Sólo es un sueño (Corina-Kou) +18

Tener su rostro entre las manos de Kou la hacían sentirse segura, en ese momento solo existían ellos dos y no había nada ni nadie que interfiriera en ese sueño sucio, prosiguiendo a besarlo, dejando que sus labios y lengua hicieran el resto.

Sabia que eso no era real, pero con el simple hecho de tener a Kou frente a ella así, no podía evitar sentirse mal aunque eso se viera opacado por mas deseo en instantes. Su mano acariciaba con mayor intensidad las colas del hizo cuando sentía que el cuerpo de el muchacho se iba contra ella, sintiendo como su entrepierna se volvía cada vez mas y mas dura, algo que nunca antes había experimentado, haciendo que se asustara un poco. Separo sus labios del muchacho con un hilo de saliva para tomar aire y poder preguntar jadeante: -¿P-porque mi entrepierna se ha puesto dura?- su corazón palpitaba mas rápido, podía sentir como si se le saliera del pecho, ¿Era normal eso?

Al parecer era normal, talvez eso era la llamada ''erección''. Su rostro estaba rojo, al parecer la erección era lo que delataba a un hombre, podía sentir como su interior se quemaba, la lujuria era algo muy fuerte, necesitaba tener a Kou dentro de ella, ese era un sueño del que no le gustaría despertar.
Podia sentir el rostro caliente en su frío pecho plano, era obvio que no quería parar. Llevo sus manos sobre la cabeza del chico, acariciando su cabello suavemente mientras de vez en cuando su mano se desviaba a la oreja de el mismo. -¡N-no quiero parar...!- lo decía decidido pero con pena, beso la frente de el zorro, tomando el rostro de el con ambas manos acariciando las mejillas con sus pulgares. -E-estoy caliente...- volviendo a besarlo tan apasionadamente como antes.

Al sentir las manos del chico recorrer nuevamente su espalda hacía que se estremeciera, su kimono fue despojado para quedar nuevamente con su taparrabos,su cuerpo caía lentamente sobre la tela mientras seguía besandolo, un cóctel de emociones llenaba su estómago, no sabía que el zorro supiera besar tan bien.

Sintió cómo la lengua de Kou viajaba por su cuello, causando que su rostro se viera completamente rojo, los jadeos no se hicieron esperar, respiraba agitadamente. Mientras su torso era explorado por las manos traviesas de su amigo, su mano iba para el abdomen de éste, podía sentir total libertad de tocar en dónde quiera, bajando su mano poco a poco mientras su otra mano acariciaba el cabello del kitsune.

Su mano bajo hasta tocar un bultito en la entrepierna de Kou, lo poco que sabía sobre el cuerpo masculino era que ''esa'' zona era muy sensible, acariciandola de arriba hacia abajo. -Kou...aahhh- su excitación era tan grande que no podía evitar sacar pequeños gemidos, sentir su piel rozar contra la de el chico muchacho sólo provocaba que su entrepierna palpitara más.

-S-se ha puesto muy duro...- podía ver y sentir que el joven estaba talvez igual o mas excitado que Corina. Parecía que Kou le había leído la mente, estaba a punto de quitarle su kimono cuando el justamente lo hizo, había querido ver su pecho desnudo y ahora estaba asi...frente a el tocándose mutuamente. De pronto sintió una mano en su entrepierna, haciendo lo mismo que el le hacia al chico, los gemidos se volvieron mas constantes, respiraba aceleradamente mientras seguía acariciando a Kou y su pene crecía. -¡A-aahh!...S-se siente muy bien- decía con una media sonrisa disfrutando de ese cosquilleo caliente. Fue cuando sintió como uno de sus pezones era estimulado, el calor se propagaba por todo su cuerpo haciendo que sus mejillas siguieran rojas al igual que las mejillas del kitsune, su pecho se arqueo ligeramente, era una sensación completamente nueva. -K-Ko-kou...hei....¡Ahhh!- Se sentía increíblemente bien.

Podía sentir lo agitado que el muchacho estaba, sus movimientos y gemidos lo hacían verse muy sensual y su bulto punzaba de calor, estaba desesperado, quería mas. -N-no puedo...aahh...maas...- Su mano viajo por debajo de la tela que cubría el sexo de Kouhei, empezandolo a estimular suave y torpemente, sus caderas empezaron a imitar lo mismo que su amigo, estaba adorando este sueño.

Las embestidas contra su mano lo hacían entremecer, sus gemidos se volvían constantes llenos de excitación, su zona estaba siendo tan estimulada que lo estaba embriagando, nunca en su vida había sentido algo así. -Kou...hmm...- algunos hilos de saliva salían de su boca, le gustaba que lo tocara de esa manera. Fue cuando el joven dejo al descubierto su pene para mejor desenvolvimiento, se mordió un labio, y siguió estimulándolo haciendo movimientos suaves, encargándose de cubrir todo lo que su mano abarcara, ocasionalmente volviéndose brusco.

Parecía como si sus labios necesitaran de los labios del kitsune, corresondiendole el beso casi desesperadamente, jugueteando con su lengua, estaba muy caliente. Sintió como su miembro era manipulado por las manos de su amigo, provocando que tuviera una erección soltando un chillido jadeante. Teniendo que despojarse de su taparrabos para que el chico pudiera ver mejor. -Mas...m-mas...ahhh- sus gemidos eran cada vez mas y mas fuertes, pero se trataba de un sueño, por lo que no le importaba pedir mas de eso que Kou le daba y lo volvía loco.

La mirada de Kou lo decía todo, se notaba que disfrutaba de ese ficticio encuentro, besándolo de vez en cuando mientras sentía como un liquido salia del chico, no sabia lo que le estaba ocurriendo pero podía asimilar que se trataba por la misma excitación.

Dejo a merced del kitsune su cuerpo, podía hacer lo que el quisiera con el. Sus piernas fueron separadas para que ambos pudieran disfrutar de sus cuerpos, doblando un poco las piernas apoyando sus pies sobre la arena para que fuera menos cansado. Ambos miembros se rozaban entre si, sus gemidos salían involuntariamente, comenzando a frotar el pene de Kou mientras que el otro frotaba el del tritón, era una experiencia meramente gratificante. Su rostro lucia muy ruborizado con algunas gotitas de sudor corriendo sobre su frente. La velocidad con la que el chico estaba estimulándolo aumento dramáticamente provocando que Corina arqueara su espalda y comenzara a masturbarlo mas fuerte.
Era tanta su excitación que el liquido transparente no tardo en salir de el también. -A-aahh...Kou...S-se siente tan bien...ahhh- jadeaba mientras que con su otra mano se aferraba a la tela que estaba sobre la arena. Un calor broto desde el vientre de Corina hasta llegar a sus pies, podía sentir que estaba entumecido pero no le importaba. -S-siento como si...ahhhh...me q-quemara por dentro...- sus caderas se movían parecía ser que quería algo mas.

Los gemidos de Kou sólo lo encendía más, ver su hermoso rostro rojo y lleno de placer le encantaba. Tanta fue la excitación del zorro que todo su semen había caído sobre su plano pecho, el calor seguía dentro de él, provocando que se sintiera muy desesperado. -E-está bien...- dijo con respiración agitada, sus mejillas estaban muy calientes y rojas.

El cuerpo del kitsune rosaba con su pene erecto, sus gemidos eran cada vez más fuertes y sus caderas se movían conforme su amigo lo hacía. Estaba llegando al orgasmo, -...A-aahhhhhhh!!...- apretó sus ojos mientras su espalda se arqueaba, soltando un chillido lleno de placer. Corriendose y dejando su rastro sobre el vientre de Kouhei. -L-lo siento...- se disculpó con una mano sobre sus labios mientras lo miraba con mucho placer.

El rápido movimiento del chico hizo que este se apoyara sobre la arena boca abajo, al sentir las manos del joven posarse sobre sus caderas ya sabía a lo que quería llegar. Sintió el miembro de su amigo sobre él, parecía cómo si sus caderas y piernas actuaran solas, se movían hacía Kou, quería hacerlo. -K-kou...h-hazlo...- mirando al zorro desesperado y rojo.