Post by Dantalion Abbadi on Apr 25, 2017 23:41:19 GMT
Nombre: Dantalion Abbadi.
Género: Masculino.
Edad: 300 años.
Raza: Incubo.
Corte: La corte de Primavera.
Lugar de Residencia: Como un bardo, es importante visitar cada lugar y contar grandes historias para cada uno, sin excepción.
Ocupación: Bardo.
Stats:
• Fuerza: ★
• Inteligencia:★★★★★
• Social: ★★★★★
• Agilidad: ★
• Defensa: ★
Habilidades raciales:
Belleza Extraordinaria. Por naturaleza, la belleza con la que cargan estos seres es de una intensidad mayor a la común por lo que tienen ventajas al tratar de seducir a sus objetivos.
Carisma. Algunos íncubos tienen facilidad de palabra y para relacionarse con la gente, logrando crear un aura de confianza. Esto no significa que puede manipular o seducir gente pero tiene mejores posibilidades.
Regalo de Pandora. El íncubo o súcubo se transforma en aquello que el personaje objetivo desea.
Personalidad:
Idealista, soñador, una presencia dulce en el amargo mundo, así es como se puede describir a Dantalion en pocas palabras. Es demasiado bueno como para que le pasen cosas buenas y demasiado inteligente como para caer en el mismo problema mucho tiempo y complicarse la vida gracias a ellos. Dantalion es una extraña combinación de un soñador idealista, alguien que busca casi una utopia aún sabiendo que no se puede dar, pero tratando lo suficiente como para dar felicidad a las vidas de otros, tal vez pecando en no pensar mucho sobre si mismo, pero siente esto último como lo mas inteligente que puede llegar a hacer, después de todo, Dantalion, lo único que se le quedó de la "oscuridad"; fue un ego y un orgullo que no le quita nadie.
Se ha convencido con el tiempo que todos tienen un corazón tolerante y cálido, solo hay que hacerlo salir de un cascarón si es muy díficil, pero con buenas palabras, una conversación y quizás algunas canciones, tragos, e historias, podría lograr algo... o así se convence. En realidad parte de ello es su ego que lo idiotiza, bah, en realidad nunca se da por vencido y cubre que es un idiota con lo de llegar a la meta tras palabras bonitas de superación, pero fuera de aquella actitud casi hipocrita, él mismo se ha enseñado que nunca debía juzgar a los demás por sus apariencias o acciones de manera muy profunda, que se diera tiempo a conocer a mas profundidad, que siempre había bondad o algo bueno en corazones ajenos, aún si realizaban las acciones mas sucias y ruines.
Aún así, Dantalion, con tales caracteristicas, es un hombre algo inseguro con sus habilidades gracias a su rostro, su raza, su existencia; Ser un incubo no era fácil, ¿cómo podía contar grandes historias o cantar, si todos los espectadores lo miraban tan solo por ser atractivo? Odiaba eso, él quería valer por su arte, por sus palabras y no por aquella apariencia agraciada, casi se podría decir que desprecia sus rasgos a un punto que si no tuviera que bañarse usaría su mascara todo el día, a cada momento. PeeeEEEeeero, Dantalion no es tan inocente, es una rata que también le gusta hacer trucos o aprovecharse de los demás tan solo un poquitín, solo para reírse un momento porque no podía ser un niño bonito todo el tiempo, después de todo se vuelve hasta aburrido y aquellos rasgos de incubo se le salen y termina haciendo bromas simplemente pesadas y de mal gusto. También es alguien que aún si se puede ver que tiene una gran paciencia, dependiendo de factores, es un tonto que en cualquier momento puede saltar molesto y cortar la conversación para correr por allí como un tonto y ocultarse hasta que el enojo se le pase.
Ah, que debe actuar digno y no mostrarse como un niño con berrinche.
Tan solo le gusta ser un poquitín ruin para animar las cosas. Por lo demás le gusta hacerse el incubo mas sano que pudo existir y tan solo entregarse a su espiritu aventurero y lleno de curiosidad que busca la paz de los demás, calmando corazones gracias a sus canciones.
Historia:
El nacimiento de un incubo no es la gran cosa, la "oscuridad" no te da ningún talento mas que ser tan lindo como una rosa y la ayuda de la educación de usar la labia para que otros hicieran lo que querías por conversaciones y simples palabras. Dantalion no fue diferente a ellos, despojado de figura materna o paterna, tuvo que vivir allí como cualquier otro, acatando las reglas de los superiores y en busca de un despitado humano que quisiera hacer un contrato con él.
Así pasó los años en aquellas cavernas tan asquerosas que el humano llamaba "infierno" o dónde las almas penaban, no se podían conseguir amigos puesto que todo el mundo era una competencia y nadie era alguien fuera de un amargado total porque aquel lugar te impide ser mas débil que los demás, o gentil... mostrarte "humano."
Por eso, cuando Dantalion consiguió un contrato fue su escape.
No debía aguantar aquel paisaje desolador, aquella vida tan solitaria.
Al ver a su invocador a los ojos, un hombre viejo, con una mirada de desesperación en su rostro a la vez que abría la boca en horror y fascinación ante la criatura que se posaba frente a él, Dantalion no hizo nada mas que soltar una risa tratando de hacer menos amargo aquel momento. No parecía un buen trato, ¿un viejo humano que tenía poco para estirar la pata? Pero aún así podía ver un lugar diferente, con muchos mas colores y menos gritos de exasperación que le hacían doler la cabeza.
El viejo, al despojarse de su asombro y caer a tierra, tan solo pasó una mano sobre su pecho con algo de vergüenza, miró al suelo un momento y finalmente levantó su mirada. Dantalion notó que uno de ellos era casi blanco, notandose destellos celestes en este mismo, quizás era de crístal, pensó él.
"No quiero morir solo en esta vida"
Esas fueron las únicas palabras del viejo y la única tarea que tiene hasta el día de hoy.
Desde ese día en adelante, Dantalion pasó su día a día junto a aquel hombre, el tipo lo trataba como si fuera su nieto y le enseñaba sobre las costumbres humanas, lo educaba principalmente herbologa ya que en su juventud fue un herbolario, al final de aquellos años, Dantalion absorbía la poca energia vital de aquel viejo decrepito y se sentía mal. Hasta el mismo incubo sentía una conexión padre e hijo en aquella cabaña en un lago alejado de otro ser humano.
Finalmente, un día, el viejo murió postrado en su cama mientras Dantalion temía tener que volver a las profundidades, ahora que conocía el corazón humano y las complejidad que podían llegar las emociones no quería dejar aquel lugar tan gris. El viejo observó aquella desesperación en su último aliento junto a su parasito personal, tomó su mano, susurrando cerca de su oreja: "Aún tienes que trabajar para mi, mi vida ha llegado al final, pero en tu memoria sigo vivo... para terminar totalmente el contrato debes olvidarme. De esa forma dejaré de existir."
Y Dantalion sigue pensando sobre aquellas palabras.
Al final, cuando salió de aquella casa tan solo se armó con un traje y una mascara que era del viejo, cual, parecía la de un ave con un pico muy largo. La capa era negra con unas hojas colgando de los bordes, también tomó un colgante que el viejo tuvo hasta que cerró sus ojos ante el descanso eterno, él decía que era de su esposa ya muerta y que se sentía acompañado de ella cada vez que miraba aquella piedra de amatista.
Pero al fin y al cabo, Dantalion, terminó recorriendo Europa como un bardo, nunca mostrando su rostro y se decían leyendas sobre él; que era la muerte en persona, un demonio que al escuchar su canto caeras en una maldición o que puede revelarte la forma en la que morirás.
Estúpideces varias para las que Dantalion no tenía tiempo ni paciencia, las únicas personas que lo comprendían eran los freaks de circos y con ellos podía pasar la gran parte del tiempo. Estos mismos le hablaban de sus historias que podría relatar, o hacer canciones, Dantalion con el tiempo creció como un cuenta-cuentos muy habil, una presencia que se contaba entre circos que si te la encontrabas era porque pasarías la mejor noche de tu vida.
Hasta que comenzó la caza.
La verdadera apariencia de Dantalion nunca fue revelada en verdad, nadie sabía que era un incubo gracias a tener una mente habil y era rápido al actuar. Nunca corrió peligro, de hecho una vez alguien trató de encararlo, decirle que era un ser maligno, pero con aquella labia tan habil de Dantalion lo pudo controlar sin salir herido, convenciendolo de que no lo dañara y a ningún otro arcano.
Quizás esperaban a un arcano con grandes habilidades.
Ayudó a varios arcanos en su camino, cuales, le hablaron sobre una "tierra de paz y alegría."
Mirovia.
En aquellos años fue cuando toda su vida dio un giro, los humanos se ponían cada vez mas violentos, los circos ya no querían su presencia cerca porque la mala fama del "hombre pajaro" ya no era bienvenida, aún así no abandonó sus sueños. Junto a algunos arcanos mas, desfallecidos en el camino gracias a la caza de los humanos y heridas de gravedad producidas en el camino gracias a pasos torpes y persecuciones constantes. Dantalion sintió que todo ello era su culpa por su lentitud, por no poder ser tan buen curador como trataba, por no poder encontrar las plantas adecuadas.
Quizás por ello juró amor eterno a la Corte de Primavera; con tantas flores y planas alrededor le recordaban tiempos mas apacibles. Tiempos en los que podía estar en calma en medio de flores y árboles sin tener que preocuparse porque era inútil.
Actualmente en Mirovia tiene una extraña reputación entre los habitantes, sigue siendo lo de siempre, que anuncia la muerte, que te revelara de la forma en la que mueres si escuchas sus historias, pero quizás sin aquel sentimiento tan frío de antes, sino como si fuera una leyenda con patas aún vivo. Mas que nunca está cerca de su mascara sin querer matar la leyenda del hombre pajaro.
Datos curiosos:
> Tiene asma.
> Odia las moras.
> Los ciervos le producen repelús desde una vez que intentó de hacer razonar a un animal y el ciervo se le fue encima mostrando aquellos cuernos a medio crecer.
> Siempre que recorre diferentes lugares de Mirovia remplaza las hojas de su capa.
> Mide 1.79 metros.
Imagen complementaria:
Género: Masculino.
Edad: 300 años.
Raza: Incubo.
Corte: La corte de Primavera.
Lugar de Residencia: Como un bardo, es importante visitar cada lugar y contar grandes historias para cada uno, sin excepción.
Ocupación: Bardo.
Stats:
• Fuerza: ★
• Inteligencia:★★★★★
• Social: ★★★★★
• Agilidad: ★
• Defensa: ★
Habilidades raciales:
Belleza Extraordinaria. Por naturaleza, la belleza con la que cargan estos seres es de una intensidad mayor a la común por lo que tienen ventajas al tratar de seducir a sus objetivos.
Carisma. Algunos íncubos tienen facilidad de palabra y para relacionarse con la gente, logrando crear un aura de confianza. Esto no significa que puede manipular o seducir gente pero tiene mejores posibilidades.
Regalo de Pandora. El íncubo o súcubo se transforma en aquello que el personaje objetivo desea.
Personalidad:
Idealista, soñador, una presencia dulce en el amargo mundo, así es como se puede describir a Dantalion en pocas palabras. Es demasiado bueno como para que le pasen cosas buenas y demasiado inteligente como para caer en el mismo problema mucho tiempo y complicarse la vida gracias a ellos. Dantalion es una extraña combinación de un soñador idealista, alguien que busca casi una utopia aún sabiendo que no se puede dar, pero tratando lo suficiente como para dar felicidad a las vidas de otros, tal vez pecando en no pensar mucho sobre si mismo, pero siente esto último como lo mas inteligente que puede llegar a hacer, después de todo, Dantalion, lo único que se le quedó de la "oscuridad"; fue un ego y un orgullo que no le quita nadie.
Se ha convencido con el tiempo que todos tienen un corazón tolerante y cálido, solo hay que hacerlo salir de un cascarón si es muy díficil, pero con buenas palabras, una conversación y quizás algunas canciones, tragos, e historias, podría lograr algo... o así se convence. En realidad parte de ello es su ego que lo idiotiza, bah, en realidad nunca se da por vencido y cubre que es un idiota con lo de llegar a la meta tras palabras bonitas de superación, pero fuera de aquella actitud casi hipocrita, él mismo se ha enseñado que nunca debía juzgar a los demás por sus apariencias o acciones de manera muy profunda, que se diera tiempo a conocer a mas profundidad, que siempre había bondad o algo bueno en corazones ajenos, aún si realizaban las acciones mas sucias y ruines.
Aún así, Dantalion, con tales caracteristicas, es un hombre algo inseguro con sus habilidades gracias a su rostro, su raza, su existencia; Ser un incubo no era fácil, ¿cómo podía contar grandes historias o cantar, si todos los espectadores lo miraban tan solo por ser atractivo? Odiaba eso, él quería valer por su arte, por sus palabras y no por aquella apariencia agraciada, casi se podría decir que desprecia sus rasgos a un punto que si no tuviera que bañarse usaría su mascara todo el día, a cada momento. PeeeEEEeeero, Dantalion no es tan inocente, es una rata que también le gusta hacer trucos o aprovecharse de los demás tan solo un poquitín, solo para reírse un momento porque no podía ser un niño bonito todo el tiempo, después de todo se vuelve hasta aburrido y aquellos rasgos de incubo se le salen y termina haciendo bromas simplemente pesadas y de mal gusto. También es alguien que aún si se puede ver que tiene una gran paciencia, dependiendo de factores, es un tonto que en cualquier momento puede saltar molesto y cortar la conversación para correr por allí como un tonto y ocultarse hasta que el enojo se le pase.
Ah, que debe actuar digno y no mostrarse como un niño con berrinche.
Tan solo le gusta ser un poquitín ruin para animar las cosas. Por lo demás le gusta hacerse el incubo mas sano que pudo existir y tan solo entregarse a su espiritu aventurero y lleno de curiosidad que busca la paz de los demás, calmando corazones gracias a sus canciones.
Historia:
El nacimiento de un incubo no es la gran cosa, la "oscuridad" no te da ningún talento mas que ser tan lindo como una rosa y la ayuda de la educación de usar la labia para que otros hicieran lo que querías por conversaciones y simples palabras. Dantalion no fue diferente a ellos, despojado de figura materna o paterna, tuvo que vivir allí como cualquier otro, acatando las reglas de los superiores y en busca de un despitado humano que quisiera hacer un contrato con él.
Así pasó los años en aquellas cavernas tan asquerosas que el humano llamaba "infierno" o dónde las almas penaban, no se podían conseguir amigos puesto que todo el mundo era una competencia y nadie era alguien fuera de un amargado total porque aquel lugar te impide ser mas débil que los demás, o gentil... mostrarte "humano."
Por eso, cuando Dantalion consiguió un contrato fue su escape.
No debía aguantar aquel paisaje desolador, aquella vida tan solitaria.
Al ver a su invocador a los ojos, un hombre viejo, con una mirada de desesperación en su rostro a la vez que abría la boca en horror y fascinación ante la criatura que se posaba frente a él, Dantalion no hizo nada mas que soltar una risa tratando de hacer menos amargo aquel momento. No parecía un buen trato, ¿un viejo humano que tenía poco para estirar la pata? Pero aún así podía ver un lugar diferente, con muchos mas colores y menos gritos de exasperación que le hacían doler la cabeza.
El viejo, al despojarse de su asombro y caer a tierra, tan solo pasó una mano sobre su pecho con algo de vergüenza, miró al suelo un momento y finalmente levantó su mirada. Dantalion notó que uno de ellos era casi blanco, notandose destellos celestes en este mismo, quizás era de crístal, pensó él.
"No quiero morir solo en esta vida"
Esas fueron las únicas palabras del viejo y la única tarea que tiene hasta el día de hoy.
Desde ese día en adelante, Dantalion pasó su día a día junto a aquel hombre, el tipo lo trataba como si fuera su nieto y le enseñaba sobre las costumbres humanas, lo educaba principalmente herbologa ya que en su juventud fue un herbolario, al final de aquellos años, Dantalion absorbía la poca energia vital de aquel viejo decrepito y se sentía mal. Hasta el mismo incubo sentía una conexión padre e hijo en aquella cabaña en un lago alejado de otro ser humano.
Finalmente, un día, el viejo murió postrado en su cama mientras Dantalion temía tener que volver a las profundidades, ahora que conocía el corazón humano y las complejidad que podían llegar las emociones no quería dejar aquel lugar tan gris. El viejo observó aquella desesperación en su último aliento junto a su parasito personal, tomó su mano, susurrando cerca de su oreja: "Aún tienes que trabajar para mi, mi vida ha llegado al final, pero en tu memoria sigo vivo... para terminar totalmente el contrato debes olvidarme. De esa forma dejaré de existir."
Y Dantalion sigue pensando sobre aquellas palabras.
Al final, cuando salió de aquella casa tan solo se armó con un traje y una mascara que era del viejo, cual, parecía la de un ave con un pico muy largo. La capa era negra con unas hojas colgando de los bordes, también tomó un colgante que el viejo tuvo hasta que cerró sus ojos ante el descanso eterno, él decía que era de su esposa ya muerta y que se sentía acompañado de ella cada vez que miraba aquella piedra de amatista.
Pero al fin y al cabo, Dantalion, terminó recorriendo Europa como un bardo, nunca mostrando su rostro y se decían leyendas sobre él; que era la muerte en persona, un demonio que al escuchar su canto caeras en una maldición o que puede revelarte la forma en la que morirás.
Estúpideces varias para las que Dantalion no tenía tiempo ni paciencia, las únicas personas que lo comprendían eran los freaks de circos y con ellos podía pasar la gran parte del tiempo. Estos mismos le hablaban de sus historias que podría relatar, o hacer canciones, Dantalion con el tiempo creció como un cuenta-cuentos muy habil, una presencia que se contaba entre circos que si te la encontrabas era porque pasarías la mejor noche de tu vida.
Hasta que comenzó la caza.
La verdadera apariencia de Dantalion nunca fue revelada en verdad, nadie sabía que era un incubo gracias a tener una mente habil y era rápido al actuar. Nunca corrió peligro, de hecho una vez alguien trató de encararlo, decirle que era un ser maligno, pero con aquella labia tan habil de Dantalion lo pudo controlar sin salir herido, convenciendolo de que no lo dañara y a ningún otro arcano.
Quizás esperaban a un arcano con grandes habilidades.
Ayudó a varios arcanos en su camino, cuales, le hablaron sobre una "tierra de paz y alegría."
Mirovia.
En aquellos años fue cuando toda su vida dio un giro, los humanos se ponían cada vez mas violentos, los circos ya no querían su presencia cerca porque la mala fama del "hombre pajaro" ya no era bienvenida, aún así no abandonó sus sueños. Junto a algunos arcanos mas, desfallecidos en el camino gracias a la caza de los humanos y heridas de gravedad producidas en el camino gracias a pasos torpes y persecuciones constantes. Dantalion sintió que todo ello era su culpa por su lentitud, por no poder ser tan buen curador como trataba, por no poder encontrar las plantas adecuadas.
Quizás por ello juró amor eterno a la Corte de Primavera; con tantas flores y planas alrededor le recordaban tiempos mas apacibles. Tiempos en los que podía estar en calma en medio de flores y árboles sin tener que preocuparse porque era inútil.
Actualmente en Mirovia tiene una extraña reputación entre los habitantes, sigue siendo lo de siempre, que anuncia la muerte, que te revelara de la forma en la que mueres si escuchas sus historias, pero quizás sin aquel sentimiento tan frío de antes, sino como si fuera una leyenda con patas aún vivo. Mas que nunca está cerca de su mascara sin querer matar la leyenda del hombre pajaro.
Datos curiosos:
> Tiene asma.
> Odia las moras.
> Los ciervos le producen repelús desde una vez que intentó de hacer razonar a un animal y el ciervo se le fue encima mostrando aquellos cuernos a medio crecer.
> Siempre que recorre diferentes lugares de Mirovia remplaza las hojas de su capa.
> Mide 1.79 metros.
Imagen complementaria: