Post by Irenea Novkrov on Sept 5, 2017 8:28:10 GMT
Nombre: Irenea Novkrov
Género: Femenino
Edad: 145
Raza: Centauro (Reno)
Corte: Invierno
Lugar de Residencia: Isla Gélida
Ocupación: Mensajera
Stats:
Fuerza: ★★★
Inteligencia: ★★★
Social: ★★
Agilidad: ★★
Defensa: ★★ ★
Habilidades raciales:
En el elemento - Tierra. (+★★★ Agilidad )Los arcanos con esta habilidad son mucho más veloces que otros corriendo por tierra firme aparte dándoles también gran prominencia en saltos de longitud.
Estamina Aumentada.(+★★ Defensa ) La resistencia física de estos arcanos es superior a cualquier otra, pudiendo correr grandes distancias o cargar enormes objetos incluso dándole un umbral de dolor mucho mayor.
Fuerza aumentada. (+★★ Fuerza ) Esto permite al usuario cargar el doble de su peso y, dependiendo de su condición física, hasta el cuádruple.
Personalidad: Reservada | Respetuosa | Paciente | Melancólica | Terca | Perfeccionista | Orgullosa | noble | valiente | Cautelosa
Por la forma en la que fue criada, puede ser bastante terca con sus ideas, principios y defenderlos con tenacidad si los cuestionan. Se rige por la verdad y sinceridad, por lo que es muy raro que mienta por algún motivo.
Muchas veces se le puede ver pensativa y hasta algo distante, atrapado en sus pensamientos que la mayoría del tiempo está en el pasado.
Puede llegar a ser muy pudorosa con su cuerpo y con el de los demás, siendo en estas ocasiones de las pocas veces en la que se le puede ver desconcentrada, incomoda o avergonzada.
Historia:
Sus padres, un centauro y una elfa que se conocieron al llegar a la nueva tierra prometida de Mirovia, concibieron a Irenea. La primera hija de ese matrimonio, pues antes su padre había tenido a otra esposa quien murió durante la gran caza, quedando solo el con sus tres hijos.
La familia Novkrov alguna vez fue numerosa e importante, sin embargo, más de la mitad de sus integrantes murieron defendiendo a los arcanos de los humanos.
Siguiendo con las rígidas y severas tradiciones de la familia, a Irenea se le negó poder convertirse en un soldado y ser entrenada como tal, al menos en un principio, pues nunca desistió con sus ideas, incluso le pidió a sus hermanos que la entrenaran en secreto; hasta que un día convocó a los miembros de la familia exigiendo que se le reconociera como un soldado más y le permitieran aplicar la prueba que determinaría si podía serlo, prometiendo que si no podía completarla, desistiría para siempre con su deseo de convertirse un soldado. Fue difícil, sin embargo logró completarla con éxito, por lo que Irenea se convirtió en la primera miembro a la que se le permitió luchar junto a los varones, lo que la había llenado de orgullo, pero más que eso haber logrado su objetivo y ganarse su lugar con su propio esfuerzo.
Años atrás, su familia ya había jurado lealtad a la corte del invierno al llegar a Mirovia, para formar parte de su armada, por lo que la joven arcana había sido encomendada en una misión. Uno de sus seguidores poseía un poderoso grimorio, el cual deseaba dejar en la biblioteca del templo. Así que ella y otros soldados, viajaron para escoltar al ser de luz que deseaba entregar en persona tan preciada posesión.
Un querubín al que le habían cortado sus alas durante la gran cacería, era quien había solicitado la escolta, por quien sintió curiosidad Irenea al ser su primera vez tratando un ser de luz; que durante la travesía formaron un lazo y gran cariño mutuo, despertando un instinto maternal en Irenea que no pensó tener. La caballero estaba sorprendida de haberle tomado cariño a un arcano que apneas conocía y en tan poco tiempo, por lo que se volvió tremendamente protectora con él.
No faltaba mucho para llegar a su destino, solo descansar una noche más antes de tomar un barco que los llevaría hasta la isla gélida. Noche en la que Irenea tenía un mal presentimiento, por lo que decidió quedarse afuera la habitación del querubín durante toda la noche, sin embargo el viaje había sido largo y el cansancio fue más fuerte. Un quejido la despertó de golpe y al entrar rápidamente, cruzó su mirada con el intruso. Un vampiro que no conforme con haber tomado el grimorio, había drenado la sangre de su portador. Irenea hubiera intentado atraparlo, pero pasar los últimos momentos de vida junto al querubín, fue más importante para ella.
Al regresar, tomo toda la responsabilidad del fracaso de la misión, esperando recibir algún castigo que le ayudara al menos para sobrellevar su culpa, pero no fue así. Los días pasaron y ella no podía comer o dormir, su mente no dejaba de recordar esa noche y su corazón se llenaba de rencor cada vez más; buscando el consejo de su padre quien pudo ver en los ojos de su hija, una reconocible y familiar sed de venganza, prohibiéndole rotundamente que lo hiciera pues tales acciones iban en contra de los principios de la familia, “La venganza puede ser justa pero no encontraras alivio en ella” fueron las palabras de su padre, las cuales se repitió por mucho tiempo hasta que no pudo más.
Emprendió su viaje con un solo objetivo, encontrar a ese vampiro de quien nunca olvidaría su rostro. Pasando días, semanas, meses hasta que por fin tuvo una pista. Se trataba de un caza recompensas de quien se decía vivía en Reapergate y sin más fue a dicha ciudad, tardando muy poco en conseguir información sobre él con ayuda de algo de dinero y arriesgándose un poco.
Fue una dura pelea, e Irenea casi muere en ella. Corriendo la suerte de que aquel vampiro no era muy longevo, y lograr su objetivo con una estaca pudo poner fin a todo, o eso pensó, pues sabias eran las palabras de su padre. El dolor de la pérdida aún estaba ahí, no había labio ni paz y nada de lo que hiciera podría cambiar las cosas, así que rendida solo cerró los ojos, cansada de pelear con sus pensamientos tortuosos solo esperó a que las graves heridas hicieran su trabajo. Pero aun no era su momento.
Al abrir los ojos ya se encontraba en su hogar, con la noticia de que uno de sus primos la había encontrado de casualidad. Irenea estaba desorientada, no sabía cuento tiempo había pasado dormida, pero al parecer lo suficiente como para darle tiempo a sus heridas de sanar un poco, y cuando pudo ponerse de pie, fue llamada por su padre y otros miembros de su familia en una reunión para darle un castigo propio a su desobediencia. Obligandola hacer un juramento mágico, un hechizo en el que prometía no volver a usar armas o de lo contrario moriría.
Después de pasar un tiempo en soledad, devastada al ya no poder ser por lo que tanto había luchado, pudo encontrar una nueva vocación convirtiéndose en mensajera del templo del invierno y de la isla gélida, llevando y trayendo los mensajes o paquetes de sus habitantes por Morovia, descubriendo una nueva paz durante sus viajes que templo su carácter.
Datos curiosos:
- El hechizo del juramento le dejó una marca en el pecho, justo sobre el corazón para cumplir su función de detenerlo en caso de romper su promesa.
- Tiene múltiples cicatrices en el cuerpo.
- Evita a los seres oscuridad, en especial a los vampiros, detestándolos por igual.
- También evita a los seres de luz por temor a caer de nuevo en un fuerte apego a alguno.
- Aunque no lo parezca le gusta la danza, en su familia cuando hacen reuniones, la tradición dicta que son las mujeres las que invitan a los hombres.
- En su familia tienen la costumbre de tomar mucho, por lo que le gusta el alcohol y tiene buena resistencia a este. Incluso tienen su propia receta especial, la cual siempre carga una pequeña botella y le sirve para mantener el calor.
- Ama el pan y las moras. Pan con mermeladas etc.
- Algunos de sus clientes más frecuentes la apodaron “Mensajera del invierno” y algunos la conocen solo por ese nombre.
- La daga que se ve en el dibujo es la única arma que puede usar, solo que aún no se la dan. (porque hay que comprar no?)
- Le gustan los poemas aunque no es buena escribiéndolos, le tomo el gusto tras leer algunas cartas de amor que entregó.
- Su voz www.youtube.com/watch?v=7yz4ruJBfJA
- Forma sellada: 1,77 m | 75 kg /// Forma original: 1,87 m | 110 kg
- Su madre le enseñó a tocar el arpa, por lo que aprendió casi por obligación tomándole algo de gusto con el tiempo. Lo curioso es que toca solo cuando esta triste o en conflicto consigo misma, que es cuando se podría decir que lo hace mejor.
- Hasta ahora su lugar favorito en Mirovia, es el lago de las hadas.