Zaniah Neshmet
Los Invictos
Vive como si tu libertad dependiera de ello
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Post by Zaniah Neshmet on Sept 12, 2017 22:55:02 GMT
Zaniah observe a Quelt, y el rostro tan pétreo decayó a uno preocupado. ―Lo siento ―Sus mejillas ardieron de la vergüenza mientras caminaba hacia el Lago, bajó la mirada mientras observaba sus propios pies.
―Es que, hay algo que no me gusta ―Zaniah encaró al mercenario ―Hay algo ahí que me hace sentir… diferente… ―No sabía cómo explicarlo, pues el dolor en su pecho y el enojo que sentía, no era algo que pudiera decir con palabras.
La grieta era mucho más grande cuando uno estaba lo suficientemente cerca para verla mejor, el hielo parecía haber sido inyectado de un tipo de pintura negra, la cual, se extendía como ramas de árbol a través del hielo. Y en medio, un agujero, como si alguien hubiera cortado el hielo desde abajo, el océano debajo de la capa de hielo se movía con toda la normalidad del mundo.
Zaniah se agachó hasta llegar a las marcas negras, acercó su mano, y como si le hubieran dado un choque eléctrico, la mujer retiró su mano con rapidez, sintiendo su brazo palpitar. La mujer chasqueó la lengua, frunciendo el ceño, Niwre se acercó a ella.
―Es magia negra… ―Susurró la mujer mientras intentaba encontrar algún símbolo.
Debajo de los pies de Quelt, una sombra pasó con rapidez, advirtiendo que no estaban solos.
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Post by Deleted on Sept 13, 2017 1:47:40 GMT
No dijo nada en cuanto a las palabras de la mujer, se encaminaron hasta el hielo nuevamente y se agacho para ver la cosa negra en el hielo, aquello parecía como si tenta densa se hubiese derramado en el hielo lo preocupante para el mercenario era el hecho de que el boquete en el hielo parecía provenir desde debajo de la superficie y no desde arriba, así que fuese lo que fuese aquella cosa podía moverse por debajo del hielo y del agua, el mercenario apreto con fuerza el mango de su arma cuando con el rabillo del ojo noto como algo oscuro se movía en aquél momento debajo de él- Fuera del hielo ahora -Grito a la mujer mientras la levantaba por las ropas con una mano y corría hacía la orilla en búsqueda de tierra firme.
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Zaniah Neshmet
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Post by Zaniah Neshmet on Sept 14, 2017 1:14:09 GMT
Los símbolos mágicos brillaban en el hielo conforme más lo mirabas. Era un hechizo demasiado extraño. Sintió como era jalada por el cuello del saco marrón y sorprendida, volteó hacia atrás, levantándose a tientas, intentando no resbalarse en el hielo.
―¿Qué sucede? ―Dijo Zaniah en voz alta. La sombra bajo sus pies se hizo presente, más grande cada vez y entonces la mujer pudo comprender, y corriendo con todas sus fuerzas, siguió a Quelt.
La nieve en alto estaba cerca, tan cerca que ambos arcanos casi pudieron saborear la salvación en ella. Pero en frente de ellos, el hielo comenzó a quebrarse, obligándolos a retroceder algunos pasos, pronto el pedazo en el que estaban se separó de la tierra firme, y el pedazo congelado se alejó algunos metros, era imposible intentar saltar, pues caerían en el agua helada, oscura y misteriosa.
Zaniah observaba hacia abajo, desenfundando su espada. Niwre escaló hasta llegar a su hombro.
El silencio… Tan solo se escuchaba el crujir del hielo bajo sus pies y el movimiento tranquilo de las aguas oscuras.
El pedazo de glaciar se movió peligrosamente hacia un lado, haciendo que Zaniah tuviera que encajar su espada para no caer.
Pronto, a su alrededor sobresalió una aleta dorsal de color plateado, y después de algunos momentos, fueron dos.
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Post by Deleted on Sept 20, 2017 21:48:16 GMT
El hielo resquebrajandose el agua salpicando y aquellas dos aletas dirigiendose hacía ellos, definitivamente no era un buen momento para quedarse parados allí como dos idiotas aquellas dos aletas no auguriaban nada bueno y no había terreno firme en el cual apoyarse solo quedaba una solución o eso es lo que pensaba el mercernario.
-Sujetate tomaremos otra perspectiva -Grito a la chica puso su arma entre sus dientes mientras tomaba a la chica por la cintura y saltaba con todas sus fuerzas hasta otro de los pedazos de hielo no tan cercano pero en vez de caer hacía el agua la chica podrían notar que flotaban en el aire, la mitad inferior del hombre ya no eran dos piernas ahora una larga cola cubierta de escamas verdes tornasoladas con algunas escamas largas y flexibes que asemejaban ser pluma, el tipo había logrado tomar su forma fated y mantener un rato el vuelo pero había sido un movimiento tan violento que apenas y había aterrizado en el casquete helado viendo como el aterior había sido destruido por las dos aletas, tomo su arma de nuevo- ¿Estas bien? -Pregunto mirando a las aletas que parecían algo desorientadas.
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Zaniah Neshmet
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Post by Zaniah Neshmet on Sept 21, 2017 2:58:36 GMT
Zaniah solo pudo soltar un gritito antes de volar por los aires, cuando cayó de pie sobre el hielo, sus piernas temblaron por el impacto, Niwre apenas si se pudo sostener por sus cabellos. La mujer tragó saliva, mientras observaba como las aletas desaparecían bajo el agua.
―Estoy bien ―La arconte miró a Quelt de nuevo, miró hacia detrás de él, donde la nieve segura estaba a algunos escasos metros de ellos ―Solo necesitamos un salto más para estar a salvo.
Pero antes de que ambos arcanos pudieran hacer cualquier cosa, el hielo en el que estaban parados fue impactado por algo enorme, haciendo que cayeran al agua al instante. El golpe fue helado, tanto que Zaniah sintió como sus pulmones se apretaban contra su pecho adoloridos, intentó aguantar la respiración lo suficiente para que su cuerpo no entrara en pánico por la falta de aire.
Ambos se mantuvieron flotando entre la oscuridad.
Hasta que dos pares de puntos se encendieron a la cercanía. Dos puntos morados, dos puntos blancos. Pronto, la misma poca luz del exterior, dejó ver los rostros de aquellas criaturas.
Una mujer de cabello corto blanco los miraba, sus ojos morados brillaban con la intensidad de una joya, al igual que la fila de sus afilados dientes, la otra mujer, con el cabello largo del mismo color que su hermana, los miraba con la misma maldad. Ambas medían aproximadamente seis metros, con todo y su feroz cola de tiburón.
―¿Qué tenemos aquí hermana? ―Habló la de ojos morados. ―Unos pequeños fisgones ―La otra tomó a Quelt con sus dos manos, apretándolo ligeramente para que de apoco se le fuera saliendo el oxígeno. ―¿Y qué le hacemos a los fisgones?
―Devorarlos, por supuesto ―La sirena se acercó a Zaniah y la olisqueó, y soltando un chasquido de lengua, frunció la nariz ―Estos arcanos apestan a magia negra.
―Quizás al jefe les gustaría hablar con ellos, le encanta la magia ―La otra mujer acarició el cabello del arcano, como si fuera su juguete personal ―¿No son adorables? ―Masculló, jalando la mejilla de Quelt hasta que sintió como la piel comenzaba a sonrosarse. ―Andando entonces.
Ambas mujeres salieron del agua, transformándose en su forma Sellada, sin soltar por un instante a sus prisioneros. Zaniah tosió algo de agua, respirando el aire gélido, fuera del agua, el frío se calaba contra sus huesos como agujas, la mujer tiritó de frío, pero la mujer de ojos morados no la soltó. La otra, tomó a Quelt, levantándolo del suelo, apretándolo con fuerza contra sus caderas y el brazo, teniéndolo casi de cabeza. ―Quien lo diría, vinimos por un tesoro, y nos encontramos dos más.
Las hermanas siguieron caminando, arrastrando con ellas a los arcanos, el mar no quedaba lejos, y ahí justamente era donde se dirigían.
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