Gylfie Capps

Corte: No pertenece a ninguna. (Aun)

Lugar de Residencia: No tiene un hogar fijo, pero pasa mucho tiempo recorriendo la Ciudadela y sus alrededores.

Ocupación: Sastre




Habilidades raciales: 

Aura pacífica  La presencia de estos seres puede atraer o amansar animales de toda clase, además de tranquilizar personas, hacerlas incluso entrar en confianza, el poder de esta aura es equivalente a la edad del arcano y no siempre es efectiva. Si el arcano está de mal humor o deprimido esta habilidad se anula. No se puede combinar con la habilidad de Intimidación.

Agudeza Sensorial  ( Oído, Olfato ). Su sentido del oído/olfato es más avanzado que otros arcanos de su especie. Esta habilidad es controlada a cualquier edad, sin embargo son altamente sensibles a sonidos y olores muy agudos pudiendo aturdir al arcano.

En el elemento  Tierra. Los arcanos con esta habilidad son mucho más veloces que otros corriendo por tierra firme aparte dándoles también gran prominencia en saltos de longitud.


Personalidad: Gentil pero curiosa, precavida y algo distraída, Gylfie es un poco rara para su tamaño y raza, pero que no te engañe su a veces aparentemente despreocupada naturaleza; es muy lista si la situación lo requiere, o al menos lo intenta... Sus mejores cualidades pueden salir a la luz bajo presión. Con todo y lo anterior, ella hace lo que puede por ser servicial y amable, considera que son rasgos importantes en el carácter de cualquiera.

Historia: Su origen no lo considera importante, siempre olvida los detalles, lo que si recuerda es que, como cualquiera de su raza nació y creció muy apegada la naturaleza. Su familia no era quizás tan civilizada, por conservar el aspecto mas puro, al menos en su familia nuclear no se usaba nada de ropa, vivían al día; siempre en movimiento. Pero su llamado era otro... ¿Como se sentiría usar esos coloridos atuendos que algunos arcanos lucían? ¿O poder adornarte con joyas y pieles? Su juventud estaba llena de estas curiosas dudas, saciadas muchos años mas tarde con su llegada a la Ciudadela. Su atención al detalle obviamente la hicieron afín a crear sus propias prendas y adornos. Aprendiendo por mano propia decidió probar suerte como sastre en el lugar antes mencionado. Aun así, no es como si tuviese un lugar fijo donde quedarse, dormir en las afueras aun es una muy mala costumbre ¿pero que podia esperarse de alguien que creció tan libre?
Su mayor deseo es poder tener su propia tienda y no tener que volver a preocuparse por cazar o recolectar. Y claro: ser reconocida por sus creaciones!

Datos curiosos:

• El no dormir le afecta mucho, por lo general recupera cuanto sueño perdido puede con varias siestas al día. Para quien no le conoce, puede ser algo gracioso verla dormir de pie en algún rincón.
• Jamas a tenido que cargar a nadie en su espalda, la sola idea de ser tratada como montura de alguien le es desagradable. No aplica para objetos.
• La manzanas son una de sus debilidades, crujientes y frescas, si quieres hacerla feliz; una canasta con manzanas es lo que debes darle.
  
• Esta muy orgullosa de su manera de caminar, le tomó años perfeccionar su cadencia.