Malak Ruko
Los Grises
entre la luz estelar he de reflejar los deseos de aquellos que lo necesiten
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Post by Malak Ruko on Nov 3, 2017 3:11:18 GMT
La tarde comenzaba a bajar en aquellos pastizales por el horizonte plasmando su calor en los dulces colores que el cielo dejaba ver intensificados por la suave belleza de las nubes mientras el viento se las llevaba suavemente como las hojas muertas que caían al piso a completar el ciclo natural de la vida a la cual todas las criaturas estaban destinadas a transitar Sin embargo a la par mientras caían las estrellas a plasmarse por el cielo un dulce sonido comenzó a retumbar por lo profundo de su interior inundando le hasta las fauces de sus labios cerrados pues desde lo profundo de la tierra el tambor marcaba el compras del marchar de aquellos que exigían se les recordase dignamente. Una sensación de profunda soledad le lleno el cuerpo hasta que sus manos comenzaron a llenarse de las gotas cristalinas que caían de sus mejillas, en ese momento el incubo supo que debía hacer algo, algo para honrar a aquel que tanto adoraba -ahora- Fue lo único que se escuchó pues en ese momento dio comienzo a lo que se consideraría el comienzo de su insignificante celebración la cual termino de montar poco antes de que la noche y la luna estuvieran en su punto más alto, para ese momento ya eran dos figuras las que se notaban escondidas entre los pastizales iluminadas suavemente por el minúsculo titilar de la una pequeña llama en las manos del incubo, una en el suelo y la otra tendida desde lo alto en posición de adorar los cielos con los brazos levantados pidiendo a la luna la gracia de poder ver nuevamente el descanso gloriosos de aquellos quienes se habían ido Después de que la ceremonia fuera montada lo único que hacía falta era que se presentaran aquellos quienes darían inicio a la misma, por lo que con ayuda de los vientos envió los mensajes escritos con la sangre tan negra como la tinta a los cuales rogaba la asistencia de sus hermanas o de aquellos que se atrevieran a celebrar a su lado. Ahora era cosa del viento a quien fuera atraer Después de eso el canto nórdico del incubo comenzó dulcemente acompañado por el retumbar y penetrar que la tierra comenzaba a generar -quien va a cantar para mí en el sueño de la muerte me envuelto? Cuando camine por la vía del Hel Y las huellas que deje, este tan frías? …..-
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keyko joy
Los Grises
Si vas a beber conmigo, prepárate a ponerte ebrio!!
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Post by keyko joy on Nov 3, 2017 4:36:10 GMT
Los plantíos siempre eran el lugar ideal para obtener comida gratis, sobre todo las sobras que los granjeros no querían. Patatas deformes que parecían tener forma humana, zanahorias con cuernitos y patitas e incluso huevos de distintos tamaños, cosas que no podían vender en el mercado de la ciudadela.
Con una caja de madera llena de suministros amarrada a su espalda, Keyko retomó el viaje hacia su hogar donde un estofado la estaba esperando. Pero una linea de humo que se volvieron varias le llamó la atención. Venía por los matorrales más alejados, donde los sembradíos de maíz perdían el nombre. No supo si adentrarse más a esa fina línea que separaba la cordura de la razón pero... Tampoco es que se fuera a meter en grandes problemas.
-Que tan malo podría ser?
Tras avanzar y alejarse todavía más, se encontró con una escena omniosa de ultratumba.
-...Es alguna especie de celebración con calabazas? -Esperaba que no se tratase de un culto de esas mismas o habría lamentado haber hecho papilla a sus primos calabacines en una ocasión en la ciudadela.
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Post by Deleted on Nov 3, 2017 15:12:27 GMT
El pequeño goblin había descubierto que había un enorme lugar lleno de plantas en las que crecía comida. No era muy distinto a lo que podía conseguir en el bosque, pero también habían muchas cosas que no había probado todavía. Ya se había tragado una cantidad considerable para su forma verdadera. Tal vez al día siguiente los granjeros comenzarían a hablar sobre una nueva plaga desconocida que atacaba sus siembras.
Ciaran se transformó en su forma fated, portando su lámpara de fuego verde, como siempre, para iluminar su camino de noche. Había escuchado rumores sobre un lugar cerca de aquí en donde era probable ver espíritus, y como buen fanático de lo paranormal, esa noche decidió visitar el molino chueco además de haber ido por la cena.
Esperaba encontrarse solamente con una estructura abandonada, pero hoy había algo más que eso, incluso mejor de lo que esperaba; Una especie de ritual estaba no muy lejor de él y 2 arcanos se encontraban mirando el fuego. Se aguantó su sombrerito antes de echarse a correr hacia el íncubo que había conocido en el bosque. -Malak!- saltó de repente a abrazar a quien ya consideraba su amigo...o amiga...no estaba muy seguro de qué era. -Oye, Malak...no tengo ni idea de lo que está pasando, pero anótame en esto- dijo mirando con emoción a los alrededores.
No había saludado a Keyko por no conocerla todavía, pero al terminar de abrazar a su amigo, volteó a ver a la kitsune fijamente con sus ojos verdes luminosos, analizando qué tipo de persona era y qué venía a hacer aquí con el íncubo, pero no de mala manera, más bien con bastante curiosidad.
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Post by Naunet Bast on Nov 3, 2017 18:29:50 GMT
Naunet estaba dando vueltas por los plantíos, la verdad estaba perdida, había tratado de entrevistar a un mensajero aéreo, y una vez obtuvo lo que quería había descendido para ver sus notas, antes de darse cuenta era de noche, y había estado tan enfrascada en su labor que no se había fijado de en donde estaba. Usaba su tableta arcana para grabar su voz -nota mental, fijar rumbo de vuelta antes de decender la próxima vez, y fíjate en donde estas Naunet!!- dice algo enojada y suspira, en eso ve luces, piensa "oooh interesante" su imaginación daba vueltas sobre que podría ser aquello, mientras su curiosidad la hacia dirigirse rápidamente hacia la zona, pronto se asoma de entre los maizales y ve a tres arcanos, dos algo amistosos, parecían estar en medio de un ritual, esto seria genial para sus entrevistas, y otra mas, parecía cargar una caja, tenia cara de haber llegado hace poco al lugar.
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Post by Irina Székely on Nov 5, 2017 23:33:56 GMT
Pasando por alto la improvista confesión por parte de su compañero, la naga se sentía bastante abatida...los síntomas que el había mostrado ante ella, su notable inestabilidad, su cambio de humor repentino le alertaron: no sabia exactamente a lo que se enfrentaba, pero debía aclarar su cabeza primero antes de sacar conclusiones erróneas. Abandono la hermosa cabaña que ambos compartían sin decir palabra alguna, para ir con sus amadas serpientes quienes la escoltaban como de costumbre. Había recordado que quizá, cerca de los plantíos podría buscar alguna muestra para sus experimentos, también podría ver si quizá conseguia por ahí un poco de comida para llevar a casa...o algo mas.
Siseantes sus compañeras le alertaron que no estaba sola, por un molino destartalado logro encontrar a cuatro personas quienes, se encontraban en lo que podría descifrar como un ritual, la academia irónicamente se empezó a emocionar por tan pagana ceremonia, sus ojos muertos brillaron con la tenue luz de la luna, sus labios se curvaron en una sonrisa y acercose poco a poco ante los presentes...de pronto, ocurrió: no sabia que decir.
Siempre era Erdos quien hablaba por ella, y la mujer estaba muda, gracias a su poca habilidad social decidió esconderse lo mas rápido que pudo ante su evidente torpeza, para asomar su rostro tras un árbol podrido (sus serpientes asomándose con ella). -"No debe ser tan difícil...segun mis investigaciones, un saludo apropiado puede ser la clave del éxito...cabeza erguida, pecho hacia afuera, una sonrisa...no, sonrisa no..."- entre discusión y discusión consigo misma decidió abortar la misión y dejar que ellos tomasen la iniciativa...todavia no estaba preparada para socializar.
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Malak Ruko
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Post by Malak Ruko on Nov 7, 2017 22:29:57 GMT
Al escuchar los sonidos de la hierva moverse dio paro a su canto, y en dirección a los ruidos y con el mover del viento miro a la primera que se asomo en ese momento la escucho explicar sus ideas con la voz alta y clara por lo que la miro fijo mientras se acercaba a esta, cada vez mas y mas cerca adentrando sus pasos hacia la persona ajena y cuando estaba lo suficientemente cerca -así es, es una celebración, ha venido a acompañarnos?- tomo la caja que esta llevaba -permita me ayudar le, por favor acerque se, le aseguro que se divertirá- dijo a esta mientras se acercaba a nuevamente a la armatoste y dejaba por un lado la dichosa caja que cargaba.
En ese momento al haberse librado de la caja que cargaba el incubo pudo sentir el tacto de una presencia (y voz) familiar que le hicieron tomar recuerdos de lo que había pasado hacia poco tiempo de los cuales fulminaron el la aparición repentina de "Malak" lo cual le hizo voltear hacia abajo de donde le sujetaban vio el dulce rostro infantil con aquellos ojos brillantes que le miraban con fulgor -ciaran ... me hace feliz el escucharte decir ello- dirigió después sus labios a la frente ajena dando una alianza -pequeño-
Poco después de haber soltado al infante se acerco al armatoste que podía sentirse la excitación que este desprendía, después volteo hacia las dos primeras presencias observando con cuidado a la pelirroja y al infante -acerquen se por favor, pronto daremos comienzo- dijo para después dirigirse a la parte trasera de todo y algunos sollozos acompañados por algunos sonidos de movimiento por entre los matorrales
-------ya las vi-------------
se escuchaba por detrás
-------1, 2, 3 por ustedes------------
decía suavemente
-------que buscan?------------
pareciera que lo decía el viento
-------acerquen se------------
susurro a los oídos
...
Después camino tranquilamente saliendo de los matorrales a una distancia prudente de ambas presencias mirando a quizás ninguna parte en especifico esperando por la presentación de ambas entidades.
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keyko joy
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Post by keyko joy on Nov 16, 2017 3:34:11 GMT
Sus pensamientos en voz alta habían llamado la atención de un arcano de cabello largo y ondulado qu ela invitaba a ser parte de festejo. El sentido común podría haberla sacado de ahí en ese momento, pero todos sabemos como es que resultó.
-Bueno, planeaba hacer un estofado, pero una celebración con calabazas tampoco suena mal! -Expreso sonriendo y dejándose llevar por el anfitrión del evento donde el fuego iluminaba de manera siniestra los altos matorrales de las cosechas tardías.
La descomunal hoguera atraía tanto la atención que pronto otros arcanos aparecieron, al menos 3 más, ningun rostro qe la pelirroja pudiera reconocer, pero con entusiasmo se animó a estrechar la mano para llevarse bien con los presentes.
-Hola!, soy Keyko ¿sabes que esta pasando? -Dijo al pequeño goblin, denotando su curiosidad por la decoración oscura que parecía querer tragárselos en cualquier momento, un puñado de emociones fuertes la hacía exaltarse desde sus 9 mullidas colas solo de pensar en que podría consistir el evento.
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Post by Deleted on Nov 16, 2017 21:15:46 GMT
Habían 2 presencias nuevas en este ritual raro, pero Ciaran pensó que se trataban de animales del bosque que iban de paso, nada grave. Estaba más centrado en Malak y lo que este planeaba hacer con todo ese fuego y calabazas.
De pronto, aquella kitsune se acercó al goblin. Este le correspondió el gesto de estrechar las manos. -Hola! Yo soy Ciaran y no tengo ni idea de lo que está pasando- dijo alegremente, sonriendo como si su respuesta hubiera sido de gran ayuda.
Parecía que esos supuestos animales en realidad eran 2 arcanas que los espiaban desde los matorrales, pues su amigo Malak comenzó a hablarles y tratar de buscarlas. El goblin lo siguió, aunque corriendo como loco entre las plantas sin rumbo alguno, hasta que chocó con una de ellas. Cayó sentado en el piso, sobando su naricita, que se había llevado un buen golpe. Cuando miró a la chica, tuvo un mini infarto que le hizo ponerse de pie en un brinco. -Perdón, Solette! N-no esperaba que te interesara venir aquí!- dijo a la vez que se protegía detrás de su sombrero, pero se dio cuenta que en realidad no había nada a qué temer -pip pip...t-te confundí con mi tutora, lo siento. La noche no me ayuda mucho a ver- dijo llevándose una mano detrás de la cabeza, soltando una leve risita.
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Post by Naunet Bast on Nov 18, 2017 22:34:17 GMT
Naunet se había esponjado casi al doble de su tamaño con los susurros, tiesa del miedo, aun que eso no le impedía tomar una foto, en eso avanza al caminar un par de pasos realmente tiesa, cuando alguien se choca con ella y se voltea rápidamente, y ve a lo que parece ser un niño escondido tras un sombrero - Ah!... oh, hola, no te preocupes, jeje- ríe nerviosamente, aletea un poco y algo apenada usa su clariaudiecia para ver cuanta gente realmente había -5 personas, parece que bastante gente esta hoy por aquí- Naunet no sabia si eso era preocupante o no, le sonríe al pequeño -creo que seria mejor si salimos del maizal, tus amigos están cerca de la fogata no?- Naunet camina fuera del maizal y aclara su voz -Ahem, hola, mi nombre es Naunet, me perdí y ummm tengo curiosidad jeje, que sucede aquí?- dice todo con una sonrisa amable, saludando con la mano y cambia aun tono de preocupación cuando dice las ultimas 3 palabras.
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Post by Irina Székely on Dec 6, 2017 21:49:26 GMT
Asechando desde una distancia prudente, la naga se deleitaba para si misma, el como aquellas criaturas de la noche intercambiaban palabras entre si, algunas ya se conocían , otras por mera curiosidad acercándose estaban..pero para ella, el esconderse era lo mas propio, no era de aquellas personas quienes alzarían la voz para llamar la atención, generar una amena conversación (a menos de que el tema le urgiese tanto, o le carcomiese por la curiosidad). Sus compañeras serpientes se balanceaban de lado a lado imitando al maizal quien, con el viento ondeaba rítmicamente. Aquellos ojos viperinos se ampliaron por la sorpresa, una repentina voz tan dulce pero tan tetrica irrumpió sus propios pensamientos...alguien sabia que se encontraba ahí, la había visto, y la invitaba incluso a seguir ante aquella instalación preparada minuciosamente tiempo atrás.
-Eh?...- fue lo único que sus labios soltaron para ver de reojo a sus pequeñas quienes siseaban amenazantes por si algún peligro quisiese acercarse a su ama, Irina asintió con la cabeza para que se calmasen un poco, lo que menos quería era generar disturbios porque sus niñas eran mal educadas con los extraños. Acomodose entonces su vestido, peino un poco su cabello y con toda la calma del mundo, cual normal situación fuese para la naga irrumpió entonces entre las criaturas presentes. Inclinose entonces con un gesto de cortesía..no sabia que decir en ese momento por lo que una mirada apacible seria suficiente. Tardo unos cuantos minutos hasta que por fin hablo:
- Busco el autor de esta peculiar escena...y, viendo la invitación no me negué en aparecer...- la naga sonrío levemente mostrando sus colmillos, aquella mirada afilada se posaba entre los presentes. -Un placer... (supongo)...soy Irina Székeli....una humilde boticaria que casualmente pasaba por estos lares- seguido a eso un siseo casi tan parecido como una risa se genero entre las serpientes mascota de la naga y ella misma, estaba muerta de curiosidad por saber exactamente que sucedería.
OOC: Disculpen la tardanza ;w;
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