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Post by Clover Hatmora on Dec 16, 2017 5:09:13 GMT
-¡¡PUEDES LLEVARTE TODO LO QUE ESTA AQUÍ!!- grito el sujeto mientras trataba de aflojar el amarre de sus manos -¡TODO!- volvió a gritar – ¡PERO PORFAVOR, NO ME HAGAS NADA!- se podía observar el rostro lleno de angustia y miedo del arcano, atado de piernas y brazos contra una silla de madera y completamente desnudo. Con los pies sobre la mesa, una copa de un líquido rojo y espeso y la mirada fija en aquel sujeto, Clover le dio un largo sorbo a aquella copa, que segundos después lanzo contra la pared rompiéndose en mil pedazos. Bajo los pies de la mesa y se acercó lentamente al hombre –Debiste pensar bien las cosas antes de drogarme e invitarme a tu casa- se puso en cuclillas, poniéndose a la altura del contrario para que ambos rostros se encontraran –Esto no es personal, yo solo… ¿a quién engaño? Claro que es personal- sonrió abiertamente y musitó una risa desde el fondo de su garganta.
El hombre continuo suplicando y Clover, frustrado por tanto grito, termino el trabajo impactando su mano transformada en un gran mazo contra la cabeza de aquel tipo. Los gritos cesaron, la sangre comenzó a correr y el sol comenzaba a esconderse en el horizonte. Y todo aquello no tenía ni cuatro horas de haber sucedido.
Como siempre, camino sin un destino fijo. Con una antorcha en la mano derecha, una botella de quien sabe que en la izquierda y la vista un poco borrosa. La pócima que le habían dado aún se encontraba haciendo estragos en su sistema y, en conjunto con las ya 2 botellas de alcohol que llevaba, lo volvían más torpe de lo que en realidad era. Tenía que admitir que estaba muy tranquilo, por un momento olvidó todo el odio que tenía contra todos y cada uno de los seres que habitaban aquella isla. Tanto así, que incluso un cuervo se posó en su hombro, Clover simplemente lo observo y le hablo como si de un muy buen amigo se tratase.
Estaba oscuro, había árboles por doquier y un ambiente sumamente lúgubre. Por alguna razón el Shapeshifter se sintió como en casa por un momento. Siguió caminando un par de metros hasta que el graznido de aquel mentado pájaro lo tomó por sorpresa, sobre saltándose y perdiendo el equilibrio, cayendo al suelo y golpeándose contra un árbol en el proceso sin que él pudiera hacer algo al respecto.
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Post by Dorothy Blair on Dec 16, 2017 6:29:14 GMT
Varios días habían pasado ya desde aquella extraña noche en la que se había lastimado la patita a manos de ese feo orco, por lo que poco a poco comenzaba a retomar sus actividades normales (Que generalmente eran flojear, tocar, cantar, comer y embriagarse) e incluso el tomarse un tiempito para ir a la ciudadela a encargar un nuevo instrumento y de paso comprarse algún libro que le pareciera interesante para pasar el rato, pues el no tener una guitarra que tocar últimamente la tenia jodidamente aburrida y la flauta ya la tenía hartísima.
Su elección había sido "Noroi, el engendro del pecado", una novela llena de suspenso, terror, drama y protagonistas de los cuales era fácil encariñarse pero que morían fácil ante las garras de un no se qué sobrenatural, por lo que seguramente leer eso sería toda una experiencia si se tenía el ambiente correcto y la comodidad adecuada. Y vaya que ella sabia donde encontrar un ambiente así~
El bosque de los susurros. Padre de historias atemorizantes, guardián de las criaturas de la noche y el hogar de su querido elfo Gideon, al cual ni le avisó que iría sólo para que la dejara leerse al menos unos capítulos bajo el cobijo de la densa niebla, entre la cual solo se podían ver arboles secos y animales ponzoñosos cuidando sus madrigueras. Sin duda era el lugar perfecto. Nisiquiera el saber de los peligro que resguardaba aquel bosque maldito la intimido lo suficiente como para evitar que aterrizara en un árbol que parecía resistente y cómodo, donde se puso a leer mientras devoraba una manzana.
Hoja tras hoja pasó. Jaja, a ese tipo le arrancaron los dedos. Los minutos y minutos que se volvieron horas, horas que hicieron que para Blair aquel libro comenzará a parecerle también excelente para inducir el sueño y cómodo como almohada, pues ya se había quedado dormidota justo encima de la pagina donde se había quedado. Pero... Tal vez aquella siesta no estaría destinada a ir más allá de tan solo 20 minutos, pues apenas iba a comenzar a soñar cuando sintió tremendo porrazo en el árbol donde estaba durmiendo y se alarmó con el estruendo, por lo que intento girarse y al estar en la orilla de la rama solo terminó cayendo junto con su libro al suelo... Un suelo que estaba sospechosamente blandito.
- ¡MON CHÉRI! - Gritó horrorizada al percatarse que aquel bulto multicolor donde tenia apoyado el codo era la cabellera de Clover, lo cual quiso que se levantara de inmediato y "delicadamente" lo volteara con ayuda de su pie. - ¿Estás muerto? - Preguntó, arrodillándose a su lado y acercándose a su rostro para escuchar alguna posible respuesta.
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Post by Clover Hatmora on Dec 16, 2017 7:05:45 GMT
Ante la caída del hombre, aquel cuervo se posó sobre su cabeza un par de segundos, picoteando la cabeza multicolor del Shapeshifter por pura inercia. Clover pudo sentir aquellos picotazos seguidos de un fuerte dolor punzante en la cabeza, se quedó ahí por un rato y, ni bien levantó la cabeza, volvió a besar el suelo tras el peso de algo cayéndole encima.
El animal salió volando apenas sintió algo aproximándose. El dolor en la cabeza de Clover solo aumento, añadiendo ahora una pequeña parálisis por el dolor, el alcohol y aquella droga en su sistema. La voz que sus oídos percibieron le resultaba muy familiar y no fue hasta que aquella chica le dio la vuelta, permitiéndole volver a respirar con normalidad, que se dio cuenta de quien se trataba.
-Me gustaría- dijo con una voz débil y sumamente adolorida. Se quejó en voz alta, lanzando un par de jadeos de dolor mientras pasaban los segundos y trataba de incorporarse, al menos para quedar sentado y recargar su espalda en aquel árbol –Ese maldito pájaro me tendió una trampa- dijo refiriéndose al cuervo y señalando la nada frente a él.
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Post by Dorothy Blair on Dec 16, 2017 7:40:24 GMT
Al escuchar la adolorida voz de su querido amigo, una tremenda paz invadió el pecho de la mujercita y al ver como intentaba levantarse, lo único que pudo hacer fue acercarse y darle su apoyo hasta que se recargo en el árbol, donde lo dejó descansar. De ahí en más sólo se quedo sentadita escuchando los delirios del Shapeshifter acerca de un cuervo que "le había tendido una trampa", un cuervo de neblina al parecer, porque solo señalaba a la nada.
- Creo que te golpeaste... Golpeé... Golpeamos demasiado fuerte la cabeza, querido. Andas viendo cuervos donde cuando mucho puede haber una polilla. - Dijo mientras lo miraba de manera un poco extrañada, pues verlo así de atontado no era de lo más usual. No fue hasta que sintió el aroma a alcohol que comprendió la situación, pues de esta manera le atribuyo totalmente las alucinaciones a la borrachera. - Bueno, tiene sentido... Si yo me bebiera un par de copas y me metiera a pasear por el jardín de satanás también vería cuervos. - Dijo casi para si misma, aunque pudo haberse como un murmullo hacia el hombre ya que la fénix se había acercado para revisar que no se hubiera abierto la cabeza. - ¿Al menos el motivo de la borrachera era lo suficientemente bueno como para terminar así, chéri? - Le preguntó mientras estaba quitándole algunas hojitas secas que traía en el cabello.
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Post by Clover Hatmora on Dec 23, 2017 2:38:37 GMT
Se quedó señalando y en silencio por unos considerables 10 segundos, con una expresión de extrañeza en el rostro –E-estaba aquí hace un momento- su brazo cayó a un lado de su cuerpo sin mucho cuidado, desvió la mirada al suelo y suspiro –Ya no importa- dijo sin más, viendo que aquello fácilmente habría sido una invención de su loca imaginación. Clover no pudo evitar musitar una risita ante el comentario tan atinado de la fénix, negó con la cabeza ligeramente alzando su mirada. -…- la observo por un momento sin decirle absolutamente nada, la risa le ganó por segunda vez y volvió a bajar la cabeza con su característica sonrisa estúpida dibujada en su rostro.
Sus risas cesaron de pronto, su semblante se tornó serio pero manteniendo sus ojos cansados –No- dijo casi cortante –No lo fue- recargo su cabeza contra aquel árbol y desvió su mirada hacia el sendero que estaba siguiendo –Agua de rosas es todo lo que tome en la taberna- comenzó a explicar –Caí después del primer vaso y desperté en la casa de un jodido enfermo que me tenía sujeto a una cama- la molestia en el rostro del hombre se hacía cada vez más visible –No sé qué carajos le pusieron a mi bebida, pero por los últimos 30 minutos no pude moverme y el muy cabron se aprovecho de eso- exhaló pesadamente a la par que soltaba una risita –Creí que este tipo de cosas no pasaban en Mirovia- busco los ojos de la fénix –Ahora veo que me equivoque-
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Post by Dorothy Blair on Dec 23, 2017 5:07:02 GMT
Escuchó atentamente las explicaciones que su colorido amigo le daba mientras le quitaba cualquier rastro de suciedad u hojas de la ropa, teniendo una expresión totalmente seria al respecto hasta que por fin guardó silencio. - Pauvre de mon amour. - Dijo con un tono casi comprensivo y le dio dos pequeñas palmaditas en el hombro, para luego levantarse. - Mais je t'ai dit que tu avais un bon cul. - Expresó en su idioma natal, esperando que verdaderamente no le entendiera o de seguro le iba a soltar un putazo que le dejara el hombro morado por graciosita, mas fuera de que le entendiera o no, le ofreció un pequeño chocolatito que traía en su bolsillo. - Toma, cómelo. - Le dijo en un tono completamente serio para luego suspirar, trepándose al árbol después de habérselo dado. - Es la regla número uno en la vida de taberna, cariño, nunca debes apartar la vista de tu bebida. - Estando ya arriba de la rama en la que se había dormido, recogió sus cositas con cuidado y las guardó en su mochila para seguidamente colgársela en el hombro y lanzarse nuevamente al piso, donde cayó en cuclillas y simplemente se dejó caer para atrás, quedando sentada al lado de él nuevamente. - Al menos tu no puedes quedar embarazado, supongo... ¿No eres un Kelpie, verdad? - Se le quedó viendo por un momento, recargándose en su hombro después para también ver a la nada como él. Era verdad... Realmente nisiquiera sabía que tipo de arcano era Clover. |
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Post by Clover Hatmora on Dec 23, 2017 5:34:21 GMT
La miro directamente a su ojo, con la boca semiabierta y los ojos entrecerrados. Después de unos segundos, Clover volvió a reír, fue una simple risita de momento pero en él era algo sumamente extraño - Je crois que oui- recargo su cabeza contra el árbol sin quitarle los ojos de encima a la fénix. Ni bien tomo aquel chocolate, le dio un pequeño mordisco –Gracias- dijo a la par que la seguía con la mirada mientras ella se trepaba en el árbol.
-No creí que alguien fuera tan estúpido para meterse conmigo- el chocolate desapareció después de dos mordiscos –Creo que estoy haciendo mal mi trabajo- susurro para el mismo, importándole poco si la joven lo escuchaba o no. Se quedó en silencio por un largo rato, mientras Blair bajaba del árbol y se sentaba justo a un lado suyo. Volteo a verla con una expresión de molestia en su rostro –Hemos tenido esta conversación por la tableta arcana- acerco más su rostro al de la fénix –Los hombres no pueden quedar embarazados y, antes de que preguntes, no, no fui violado- regreso a su posición sobre el árbol, no sin antes pasar su brazo por detrás de la cabeza de Blair y sostener parte de su hombro –Soy un vampiro, creí que ya lo sabias- mintió con descaro y sin verla a los ojos.
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Post by Dorothy Blair on Dec 23, 2017 6:26:52 GMT
-Yo que ya te imaginaba siendo mamá. - Bromeó mientras sentía como su querido amigo pasaba su brazo por detrás de su cabeza para "abrazarla" por el hombro, lo que ella aprovecho para acomodarse más cómodamente y también poner una mano en la pierna del hombre. - Vaaaaya, un vampiro que va a atascarse de comida mortal en una playa ¿Quién lo diría? - Volteó a verlo acusadoramente, levantando una de sus cejas. - Si me vas a mentir al menos sé más creativo, chéri. Dime que eres... No sé, un tritón. - Sugirió antes de dejar de verlo a los ojos, desviando la mirada nuevamente y haciendo un leve gesto de molestia. Rayos... El ambiente estaba demasiado húmedo, tanto que el cuero del que estaba hecho su parche ya comenzaba a sentirse incómodo, por lo cual se apartó un poquito para quitárselo y luego volvió a su lugar bajo el brazo de su querido.
- Bien, mi querido vampirito ¿Nos vamos a quedar aquí o qué? - Cuestionó mientras movió un poquito su pie para atraer hacia ella el libro que se le había caído anteriormente, tomándolo entre sus manos y abriéndolo justo en la página en la que se había quedado. - No es que no me guste estar contigo, pero si es así deberíamos preparar un poco de fuego para no morir congelados. - Dijo casi con desinterés, ya que estaba buscando justo la linea en la que se había quedado.
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Post by Clover Hatmora on Dec 23, 2017 6:49:23 GMT
Con la cabeza aun recargada en el tronco del árbol y sus ojos cerrados, rodó sus pupilas ante el comentario de la fénix. -¿Por qué habría de mentirte respecto a mi raza? No sabes lo un buen hechizo puede hacerle al paladar de un vástago- dijo sin abrir los ojos en ningún momento. Aquella elección de raza no había sido por su parte, su fascinación por la sangre lo convirtieron en un vampiro a los ojos de muchos humanos y arcanos, después de ciertos años, Clover simplemente adopto aquello.
-¿Tienes prisa?- abrió los ojos y levanto una ceja –Estoy acostumbrado al frío de la noche, pero si tienes miedo de convertirte en un pollo de hielo- se incorporó lentamente, extendió sus extremidades y se puso a buscar con la mirada por el suelo hasta que dio con su objetivo. La antorcha que llevaba estaba pagada, pero aún era un buen trozo de madera que podría servirles. La recogió del suelo y se la extendió a Blair –Toma- dijo dejando que trozo de madera entre sus manos, importándole poco el libro –Haz una fogata con esto- inspeccionó el oscuro lugar con la mirada y comenzó a caminar, adentrandose así cada vez más al bosque.
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Post by Dorothy Blair on Dec 23, 2017 7:30:15 GMT
Las mentiras de Clover solo hicieron que la fénix apartara su vista del libro una vez mas para dirigirse hacia él, dedicándole una mirada casi ofendida por la manera en que intentaba engañarla. ¿Creía que era tonta? No, no... ¿Creía que se la iba a tragar tan fácil? Al parecer sí, pues después de "aclararlo" el hombre solo decidió apartarse e ir probablemente a buscar leña para cumplirle su capricho de la fogata, por lo que la dejó ahí solitaria con su indignación e incluso le puso un pedazo de madera encima del libro, lo cual solo hizo que inhalada con mucho más indignación. Okay... No quería decir que clase de arcano era, no lo iba a obligar, pero ensuciar su libro perfectamente limpio y nuevo si la ofendió.
- ¡Oye! - Le gritó casi de manera molesta, quitando el trozo de madera y dejándolo de lado al igual que su libro. - ¿A donde crees que vas, murcielaguito? - Le preguntó mientras se levantaba de su lugar y caminaba unos cuantos pasos hacia él, al menos hasta que la densa neblina comenzara a aprovecharse de su mala vista y le impidiera verlo claramente, haciendo que le perdiera el rastro aunque probablemente se encontrara muy cerca.
- Ay... Que grosero. - Dijo cuando lo creyó perdido e hizo un leve puchero debido a que creyó que en verdad la había dejado sola, por lo que decidió volver a su lugar no sin antes arrancarle un pedazo de rama al árbol y usarla junto con la antorcha para encender un fuego por su propia cuenta con ayuda de su afinidad elemental. -Ojalá se lo coman los lobos. - Y por fin tomó su libro nuevamente para leerlo.
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Post by Clover Hatmora on Jan 3, 2018 3:48:01 GMT
Sus pasos eran sumamente lentos, se tambaleaba ligeramente, perdiendo el equilibrio a ratos e impactando contra los árboles y arbustos en su camino. En su cabeza había caminado durante horas, cuando la realidad era que apenas habían pasado un par de minutos. La niebla era un claro impedimento para seguir moviéndose, sin embargo no desistió en su intento. Desvió la vista un momento hacia atrás, esperando toparse con la fénix y su antorcha, frunciendo el ceño y deteniéndose inmediatamente, colocando sus manos en su cintura, quedándose así por varios segundos.
-¿No piensas venir?- dijo casi gritando, en su cabeza la chica había quedado atrás, por más que sus otras posibilidades le decían que quizás habría sido devorada en el viaje, tratándose de ella era muy improbable, además habría escuchado gritos. –Si nos quedamos en medio del camino es muy posible que nos ataquen- volvió a gritar encaminándose de nuevo –Y no estoy en las mejores condiciones para luchar- susurro para el mismo mientras seguía tambaleándose.
Llegado a un punto, sus pies se enredaron entre ellos mismos haciendo caer al hombre, al querer detener su caída extendiendo los brazos hacia un árbol, la corteza de este simplemente pareció desvanecerse de pronto, volviendo a golpear su ya de por si adolorido cuerpo contra el frio suelo. Al incorporarse, se dio cuenta que de hecho el árbol no había desaparecido, si no que aquella parte de donde quiso sujetarse estaba completamente hueca y, para su fortuna, era bastante amplia, lo suficiente para que su cuerpo cupiera dentro. –Hey, encontré algo-
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Post by Dorothy Blair on Jan 3, 2018 5:53:03 GMT
Al escuchar los gritos viniendo desde la niebla, Blair sólo cerro su libro de forma molesta y se paró nuevamente en su lugar refunfuñando y guardando el libro de mala gana para después ponerse la mochila. - Tan bien que me había acomodado ya... - Se lamentó con el ceño fruncido y camino algunos pasos hacia donde escuchó la voz de Clover, pero al percatarse de que estaba dejando su intento de fogata atrás no lo pensó dos veces y tomó ambos palos en llamas con sus manos, llevándolos consigo hasta donde escuchaba la voz del "vampirito".
- Que desconsiderado eres. - Dijo cuando por fin había encontrado al ebrio shapeshifter en el suelo, por lo que no tardó en reunir un montoncito de hijas secas con su pie frente a aquel árbol y dejar ahí la leña encendida que llevaba con ella. - Durmiendo cuando yo soy la que encuentra la leña, enciende la fogata e incluso carga la comida. - Dejó la mochila en el piso y de ella sacó dos piezas de pan, además de un poco de queso. - Soy una damisela explotada~ -
Y diciendo aquello, se metió al tronco hueco pan en mano para sentarse al lado de él y hacer un gesto como si estuviera llorando muy infantilmente después de haberle dejado el otro pan en la espalda aprovechando que estaba tumbado. - Bua, bua. -
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Post by Clover Hatmora on Jan 3, 2018 6:20:21 GMT
Volvió a sacudirse la tierra que había quedado impregnada en su ropa, levantando una pequeña ola de polvo en el ambiente. El pan cayo de su espalda, bufo pesadamente y lo recogió del suelo, soplando un poco y mordiendo un pedazo al mismo tiempo que miraba extrañado a la fénix –Si no te gusta, puedes regresar por donde viniste- tomó su respectivo lugar a un lado de ella, extendiendo sus manos hacia la fogata, pues la brisa nocturna comenzaba a hacer estragos con su pálido cuerpo, muy a pesar de estar lo suficientemente abrigado.
Frotó sus manos y las llevó a su cuello, soltando ligeros jadeos ante el gusto del calor sobre aquella parte de su cuerpo -¿Cuál es el plan?- dijo repitiendo la acción un par de veces más, mirando directamente al fuego haciéndole brillar los ojos -¿Contaremos historias de terror hasta que amanezca?- cuestiono, llevándose el pan a la boca.
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Post by Dorothy Blair on Jan 3, 2018 6:50:43 GMT
- Contar historias de terror no suena tan mal. - Replicó la fénix mientras doblaba cómodamente una pierna y la otra la mantenía extendida, comiendo su pan tranquilamente y mirando al oscuro y nublado cielo al hacerlo. - El ambiente es perfecto, a decir verdad. - Y diciendo aquello, acercó su mochila a ella y tomó el trozo de queso que traía con ella, partiéndolo igualmente a la mitad y ofreciéndole un trozo. - Quizá si hacemos eso dejaremos de estar solos en poco tiempo... Tú sabes... Este bosque se ve algo peligroso y debe haber más de un fantasma por ahí ~ -
- "¿Por qué te tomaste mi agua de rosaaaaas?" - Dijo en un tono bajito y espeluznante, levantando sus manos de manera espectral y acercándose lentamente hacia él con intensión de asustarlo, pero luego paró y simplemente se dispuso a comer. - Aunque bueno, también tengo curiosidad sobre ti, así que elige: ¿Preguntas sobre lo que nos causa curiosidad el uno del otro o historias de terror que van a terminar atrayendo a algún espíritu? -
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Post by Clover Hatmora on Jan 3, 2018 7:05:57 GMT
Tomo aquel trozo de queso, dándole una mordida y disfrutando del nuevo sabor en su boca en conjunto con el pan. Aquello le hizo recordar un poco el pasado, sus comidas no iban mas allá de un simple y frio trozo de pan con un poco de agua para poder pasarlo, la imagen de su madre apareció en su mente por un momento, antes de ser interrumpido por la mala interpretación de Blair. Frunció el ceño, mirándola con sumo desagrado y agradeciendo internamente porque sus tonterías fueron pasajeras, al final simplemente rodó los ojos y se concentró en su cena.
-Pregunta lo que quieras- dijo recargándose en lo que quedaba de aquel árbol, cruzando las piernas y colocando una de sus manos sobre su regazo –No me generas la más mínima curiosidad- mordió el queso y le dedico media sonrisa –Si algo surge te preguntare- la vista frente a ellos era sumamente tétrica, si bien la fogata era una fuente de luz muy grande, la niebla trataba de tragárselos. Era una fortuna que ambos fueran tan valientes… y estúpidos
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