Deleted
Deleted Member
Posts: 0
|
Post by Deleted on Jan 1, 2018 19:15:23 GMT
(ooc: desde 2:39 hasta 5:05) En altas horas de la noche, la quimera que yacía dormida en su cama se levantó repentinamente. La sábana vieja con la que los 3 se arropaban, ahora servía de manto, dándole así cierta semejanza a un fantasma. Sus pasos eran ligeros y delicados, y se dirigía hacia la salida de la habitación. El silencio de la noche entre Reapergate y el Bosque de los Susurros hacía audible el rechinar de la madera desgastada del suelo cada vez que caminaba. Abrió cautelosamente la puerta del armario, sacando de ahí una capa negra con capucha que normalmente usaban para visitar el mercado negro. Pero esta vez, el destino sería un lugar diferente. Abandonó la sábana para vestirse con la capa y un camisón café claro. Salió sin bolso ni calzado de su casa ¿No se habría dado cuenta? ...por el modo cómo se asomaba tímidamente por la puerta, ni siquiera se podía estar seguro de que Hyd estaba al mando de este cuerpo. Ojalá la noche rindiera bien, pues caminar desde Reapergate hasta la playa no sería tarea fácil. ¿Y para qué ir hasta allá? Nadie lo sabía con certeza y tampoco nadie vería a la quimera correr por Mirovia a estas horas. Corría a toda velocidad a lo largo de la isla. Su prenda negra se movía con el viento que le rozaba el cuerpo. Sus pisadas eran tan gráciles que parecía flotar al andar, levantando con sus pasos a las luciérnagas que descansaban sobre el pasto, haciendo que brillaran y fueran arrastradas un poco por la brisa que creaba la quimera al desplazarse. Luego de unas horas, había llegado a su destino: La playa de Aqualia. La arena húmeda ya estaba al alcance de sus pies, dando unos últimos pasos para sentir el agua. Su túnica se mojaba con las olas que golpeaban suavemente contra aquel ser que dudosamente se trataba de Hydnore. Su mirada se dirigió hacia el cielo y se quedó apreciando la luna mientras que la capucha y mangas de ropa se meneaban con la brisa marina.
|
|
Jundel Fenrir
La Resistencia
La luna nos llama, pues somos las sombras de los aullidos de la noche...
Posts: 172
|
Post by Jundel Fenrir on Jan 1, 2018 23:15:05 GMT
El hombre viajo por todos los lares helados esperando completar la encrucijada que se le había encomendado, Barleem paso una gran tarea sobre los hombros del licántropo, Jundel tenía que descubrir quién era un ser inocente y puro como el ente había mencionado.
El camino era verdaderamente largo, la nieve cubría toda la zona, los arboles congelados, cuando de manera pronta el ecosistema había cambiado notablemente por una zona otoñar o primaveral cuando el aroma que lleno su nariz era tan distinto y extrañamente familiar, el corazón de un lobo azabache que tuvo que alejarse de la seguridad de la manada para terminar un trabajo que tuvo que hacer una promesa que tenía que cumplir.
El Fenrir corría por el follaje, miles de cosas pasaban por su cabeza, las palabras de Barleem rebumban en lo más profundo de su mente, en lo más recóndito de su alma como si algo lo estuviese arrastrando a cumplir aquella promesa, jamás había roto una y esta no sería la excepción, sus patas resonaban contra el suelo, hasta llegar a un aroma tan conocido, el olor a sal tan familiar acompañado por un nuevo aroma, era extraño mezcla de carbón, saliva y a la vez un aroma dulce…¿un arcano podía tener esos aromas tan diferentes? La curiosidad invadió a tan curioso arcano para correr hasta un extraño claro, que entre las plantas azoladas por el frio viento los ojos azules encontraron una figura pequeña y esbelta, una mujer ¿acaso era ella la que le estaba causando esa mezcla de olores?
Camino hacia ella a una distancia algo prudente y el peludo arcano se agacho dando a entender que no era una amenaza para tan pequeña arcana que parecía tener aletas en las orejas y un castaño cabello.
—Buenas noches señorita…e-espero no asustarle…. — Dijo ligeramente tomando su forma sellada, para rápidamente esconderse entre plantas para tomar del morral que traía en su lomo para ponerse sus prendas y salir nuevamente hacia donde la chica estaba mostrando que no estaba armado.
—Mi nombre es Jundel… ¿Cuál es el tuyo? —
|
|
Deleted
Deleted Member
Posts: 0
|
Post by Deleted on Jan 2, 2018 16:41:04 GMT
Su capucha fue echada hacia atrás por el viento, mostrando sus aletas y cabellera, pero no le importaba, ya que la playa parecía estar completamente libre de otros arcanos. Lithya, la arcana que fingía ser no más que una simple cola, se adentraba cada vez más y más en el mar después de tantos años de estar alejada de aguas tan cristalinas, pero cuando el agua llegó a su cintura, escuchó una voz que definitivamente estaba dirigiéndose a ella. La chica se asustó y volteó rápidamente a ver de quién se trataba, encontrándose con un lobo que tomó su forma humana en un instante.
El sujeto parecía amigable, probablemente estaba preocupado por ver a una chica tan solitaria bajo el cielo nocturno, pero realmente, el mayor problema para ella era ser encontrada en esta forma. Con algo de miedo por cómo debía reaccionar, hundió su cuerpo hasta dejar sólo la mitad de su rostro a la vista. Alrededor de su cuerpo comenzaron a girar unos cuantos peces pequeños que hacían brillar el mar al mover el plankton con sus aletas.
De pronto, la chica se hundió completamente, quedando el halo de peces dando vueltas en la superficie. El lobo preguntó por su nombre, pero responder con "Lithya" sería problemático si es que un día el lobo se encontraba con las otras 2 cabezas. No había suficientes Lithyas para decir que era un nombre común. Debía conseguir una respuesta antes de salir a la vista del lobo, pero no era tan fácil. Responder con el nombre que tenía antes de que sus compañeros decidieran uno nuevo para ella, podría ser una opción de respuesta, pero volver a hacerse llamar así, aunque sea por estos breves momentos, no era algo que le agradara mucho.
Finalmente, decidió salir nuevamente a la vista del lobo, con una respuesta en mente. -Mucho gusto, Jundel. Mi nombre es un secreto- dijo con una sonrisa tierna, a la vez que colocaba un dedo sobre su boca.
la chica se volvió a alejar de Jundel, yendo a nadar como si él no estuviera ahí, jugando con los peces, mirando por breves segundos al sujeto que esperaba en la orilla.
|
|
Jundel Fenrir
La Resistencia
La luna nos llama, pues somos las sombras de los aullidos de la noche...
Posts: 172
|
Post by Jundel Fenrir on Jan 4, 2018 14:57:36 GMT
La jovencita se había girado para observar al hombre que permanecía en la orilla confuso en el por qué se encontraba en total soledad admirando el firmamento, avanzo unos pasos pero la dama se sumergió en el agua, supuso que la había asustado por lo cual retrocedió unos pasos para no seguir asustando a la pequeña arcana, ladeo la cabeza y noto como los peces danzaban a su alrededor haciendo que un brillo extraño se formara, era muy bonito pero en alguna forma esos pequeños colores y movimientos le recordaban algo, no sabía exactamente el que podían recordarle pero lo hacía, como si su memoria tratara de recuperar un recuerdo que en un intento fue en vano, suspiro ligeramente pesado hasta notar como solo esos ojos brillantes lo veían en la oscuridad marina hasta sumergirse por completo, lo cual hizo que se acercara un poco sorprendido, la había asustado era eso.
— ¡Espera no te vayas!—
Pero fue en vano, pues la muchacha se había sumergido por completo, lo cual causo que solo se sentara el licántropo en la arena suspirando, estaba un poco estresado, su cruzada era difícil de cumplir ¿Cómo encontraría a quien pudiera ayudarle a cumplir su promesa? Era algo muy difícil que quizá no podría lograr y aquella familia moriría por su culpa.
—No. — Dijo con firmeza hacia sus pensamientos en un susurro para sí mismo.
—No me voy a rendir, cumpliré mi promesa y salvare a Barleem y su pequeño; no descansare hasta apoyar a esa familia. —
Miro al cielo, se veía tan enorme y maravilloso el firmamento, las estrellas danzantes y brillantes en las alturas hacían pensar al licántropo profundamente. “—Si esto fuese lo último que veré en mi larga vida…no me molestaría…—“
Sus sentidos de manera pronta captaron ese aroma tan curioso, fue así que bajo aquel celeste mirar hasta donde yacían las aguas calmas del océano notando ese pequeño cuerpo fémina con una sonrisa. “—Mucho gusto Jundel, mi nombre es un secreto—“
Era algo curioso como la chica expresaba que su nombre sería un total misterio; hasta que noto como su dedo índice se colocaba sobre esos pequeños labios acompañando la inocente sonrisa, eso hizo al licántropo sonreír un poco y con una pequeña risa honesta dijo.
—Bueno, tendré que quedarme con la intriga de saber tu nombre pequeña…—
Noto como la fémina cual niña jugaba con los pequeños pececillos, su lado juguetón quería saltar al agua y chapotear cual cachorro pero…al solo ver el agua salada lo ponían de nervios, no sabía la razón pero su cuerpo se tensaba al tener la simple idea de lanzarse a nadar en el mar.
—H-hm… ¿te gusta mucho venir por aquí? Je…discúlpame soy malo sacando conversaciones…hm… ¿quieres jugar a algo?...am… ¡Ah ya se!—
Este corrió al follaje y regreso con una rama para mostrársela.
—No estoy seguro por qué hago esto, pero quizá un poco de diversión no nos haría mal, esos peces y tú no pueden quedarse con toda la diversión jaja…toma, lánzala lejos hacia el bosque, yo la traeré ¿Qué tal?—
Rio un poco nervioso para dejar que la rama flotara hasta ella y tomar la forma de un lobo negro esperando ansioso por jugar, quería romper la tensión entre ambos y si la arcana aceptaba no se vería como un completo tonto.
|
|
Deleted
Deleted Member
Posts: 0
|
Post by Deleted on Jan 5, 2018 4:24:36 GMT
Una de las cosas de las que Hydnore no sabe sobre su cola, es que la pequeña Lithya tiene un vínculo muy especial las demás criaturas marinas. Aunque fuera una anguila, su prescencia siempre fue más grande, como la de una ballena, nadando siempre acompañada de otros peces. El licántropo volvió a hablarle, ya no tocaba el tema del nombre. Ya todo estaba bien, no había problema con conversar un rato más con ese señor. Ahora lo único que debía hacer era mentalizarse que controlar este cuerpo es sólo para cuando las otras 2 cabezas duermen, que Lithya la cola es una, y Lithya la chica es otra, por lo que probablemente no haya otro encuentro más allá de esta noche, y que los amigos de Hyd son más importantes que los que ella conozca en las noches. Ya con la mente bien clara, un tiburón de fondo montó a la chica en su lomo para acercarla a la orilla otra vez, dejando el mismo rastro luminoso que los peces, pero más grande y brillante. - Es la primera vez que corro tanto para venir a una playa- comentó alegremente, mirando al licántropo con sus ojos dorados sin pupilas. La propuesta del juego parecía divertida; Lithya se quedó esperando parada en la orilla, con los peces dando vueltas en círculos alrededor de ella. Lithya escuchó a Jundel mientras veía la ramita acercarse a ella, tomándola para darle una mirada y tocar con detenimiento su corteza, para luego sonreír otra vez - Ay, qué lindo! Como si fueras un perrito! - expresó con algo de ternura, acercándose más a la arena para lanzarle la rama al lobo lo suficientemente lejos para que fuera divertido ir a buscarla.
|
|
Jundel Fenrir
La Resistencia
La luna nos llama, pues somos las sombras de los aullidos de la noche...
Posts: 172
|
Post by Jundel Fenrir on Apr 4, 2018 15:35:27 GMT
OOC: Sacó a Jundel del thread
|
|