Silver Somnium
La Resistencia
Los ojos lindos ocultan mas de lo que puedes imaginar
Posts: 179
|
Post by Silver Somnium on Jan 2, 2018 9:01:26 GMT
Había calculado varias veces, muchas, incluso lo había discutido con su amado, se mordió los labios nerviosa mientras terminaba de acomodar aquellas bolitas de masa dulce en el potente horno, era relativamente temprano pero no demasiado, aún faltaba para que el sol ocupara su lugar en el centro del cielo indicando el medio día y aun así ya había vendido varios panes, estaba extasiada de ver cuanta gente disfrutaba de su trabajo, sencillamente encantador, cerro con cuidado el horno dejando que sus creaciones se cocieran mientras se sentaba junto a la ventana esperando, la cuidadela se veía un poco vacía siendo sinceros, o esa era la percepción de Silver, jugaba con mechones de su cabello, esperando, sacando la cabeza de vez en cuando para ver si alguien se acercaba, ese día no estaba esperando clientes para ser sincera, había por fin tomado la decisión de contratar a alguien, a algún arcano que supiera o estuviera dispuesto a aprender y que aceptara la paga a pesar de no ser mucha, lo dejaría en principio atendiendo mientras ella preparaba más mercadería en caso de ser necesario y que la ayudara con los enormes sacos de harinas y semillas, no podía depender siempre de Xhial, agradecía la ayuda de su pareja pero lo conocía y sabía que no siempre estaba cómodo en aquel lugar, a veces se llenaba a rebosar de arcanos esperando comprar el pan recién horneado y el arconte sinceramente no le agradaba aquello, no lo juzgaba, comprendía ese sentimiento, Silver normalmente evitaba los lugares muy concurridos por lo mismo pero en ese ámbito, en ese espacio era diferente, su corazón lo sentía diferente y le complacía ver esa tienda llena, con clientes satisfechos y felices
Cerro sus ojos suavemente cuando sintió una brisa acariciar su rostro moviendo algunos mechones de cabello, recapitulaba una y otra vez la conversación con el arconte, las preguntas que debía hacer, las cosas que debía decir, debía ser seria en aquello, no podía confiar en cualquier arcano y aun así estaba emocionada porque alguien preguntara por el trabajo, se había tomado toda una noche haciendo diferentes papeles con la dirección de la panadería y además con el puesto de trabajo ¿Y si nadie entendía su caligrafía? “No, Xhial la reviso varias veces y se entendía” ¿Qué tal si se volaron los folletos? “No, los asegure bien” Se respondía frunciendo el ceño, apretando aquel delantal tan característico de su vestimenta Y sí... –Ya, basta- Se dijo a si misma enderezándose en la silla donde estaba sentada y levantándose, debía entretener su mente en algo mas o perdería la cabeza entre tantas dudas y ansiedad, se metió en la cocina para hacer por tercera vez el inventario ese día, mañana por la mañana el arconte traería los insumos que necesitaba reponer nuevamente –Por favor… que sea alguien a quien le guste el pan- Pidió con voz suave mientras tomaba la libreta y el lápiz, así al menos no subiría de peso sola y si tenía suerte podría aprender cosas nuevas y quizás en un futuro lejano, poner una tienda donde poder beber te
|
|
|
Post by Bellenique Amar Belou on Jan 4, 2018 19:34:52 GMT
Las maravillas que le contaron sobre la ciudadela y las miles de oportunidades que podía encontrar allí definitivamente no se ajustaban a ella. El sol que alumbraba con ardiente devoción al lugar la acosaba, así que debía con su capa todo el día si no deseaba ronchas adornando su blanquecina piel. Las monedas en sus bolsillos cada vez eran menos y cada día sus necesidades eran mayores… Debía resignarse, no podía dedicarse exclusivamente a ser una detective ¡Por muy triste que fuera! Caminaba pensativa por las calles de la ciudadela ideando como iba a estirar el dinero que tenía ¿Podría con sus escasos fondos volver al bosque? Le resultaba también una buena escapatoria aun cuando las opciones de trabajo en el bosque eran mucho menores, allí por lo menos tendría la posibilidad de no preocuparse dos tercios de su tiempo en el sol.
Y como anillo al dedo un bonito folleto en busca de empleados llegó a sus manos; bueno, pies en realidad. Leyó el folleto con detenimiento, si bien no era quizás el trabajo de sus sueños parecía tranquilo y no era al aire libre, quizás todo sería perfecto y con el tiempo podría reunir alguna capital, mientras el dueño de la panadería no fuera ningún viejo verde como los hombres que visitaban la taberna.
- No es muy lejos… - Al tomar el folleto sus dedos sufrieron un leve ardor al apenas sentirse en contacto con el sol – ¡Mierda!
Se encaminó al establecimiento buscando mantener su mejor carácter, nadie en sus cinco sentidos iba a querer una empleada malhumorada en su local. Trató de recuperar la compostura que mantenía en el restaurante de su madrina, incluso cuando los recuerdos le producían un sabor amargo en el paladar. Dioses, de verdad necesitaba ese trabajo.
Antes de darse cuenta estaba frente al establecimiento, subió su barbilla y trató de dar la mejor de sus sonrisas. Bellenique pellizcó sus mejillas buscando sacarles algo de color aun a sabiendas que probablemente parecerían solo rasguños en un par de segundos. Sonrió al ver que dentro del lugar no se encontraba ningún hombre que diera mala pinta y su lugar era ocupado por una bonita mujer de apariencia joven que se alejaba del mostrador para ingresar a otro lugar. Con mejor ánimo y una sonrisa levemente más realista ingresó al lugar donde el agradable olor a pan la recibió. Antes de decir palabra o presentar su llegada olisqueó el aire con gusto, abrió sus ojos chispeantes de brillo. - ¡Pero qué bien huele! – Exclamó la vampiresa esperando que la mujer escuchase- ¿Alguien?
|
|
Silver Somnium
La Resistencia
Los ojos lindos ocultan mas de lo que puedes imaginar
Posts: 179
|
Post by Silver Somnium on Jan 8, 2018 8:41:05 GMT
Había comenzado a contar nuevamente, era un sinsentido hacerlo nuevamente, pero la calmaba, la concentraba en otras cosas, aunque sea lograba que ella se planteara nuevas recetas ¿Qué pasaría si le agregaba trozos de frutas al pan? ¿Cómo quedaría? Fruncía el ceño de vez en cuando mientras aquel lápiz de carbón se golpeaba en su mentón, dejando tras cada roce una pequeña e imperceptible mancha que comenzó a crecer tras todos los toques hasta que ya era completamente visible como tal, una mancha de lápiz. Sintió su corazón detenerse por unos momentos, la voz de una mujer en la otra estancia la erizo sorprendiéndola, se apresuró en dejar aquellas hojas y el lápiz en su lugar y se limpió las manos en su siempre confiable delantal, camino a paso rápido pero confiado, mirando a su visitante de forma curiosa, venia tan cubierta que la chica inconscientemente ladeo la cabeza pero no quito la sonrisa, de seguro seria por el frio que comenzaba a azotar la zona poco a poco, hermoso frio, frio y hielo, el sueño para la chica, sencillamente amaba el frio – Buenos días – Sonrió de forma amable, parándose delante de la clienta y soltando lentamente el delantal – Le agradezco el comentario – La sonrisa de la dragona solo se ensancho más y se aclaró ligeramente la garganta para hablar mejor
-Soy Silver, soy la dueña de la panadería, por favor, si vez algo que te guste no dudes en preguntar – Y con un gesto suave la muchacha se alejó hacia el honro a un lado, sobre este había lo que parecía ser una pequeña tetera metálica, Silver se estiro hasta tomarla, quería comprobar si su idea podía ser realizada y si podía calentar agua colocando aquel contenedor de metal junto al ardiente horno, específicamente sobre él, se ayudó con las pinzas, ya llevaba allí un buen rato y esperaba que el agua se hubiera calentado por fin, el horno si bien emitía calor no era ni por asomo tan elevado como dentro de sus paredes, aunque mantenía tibia la tienda, Silver abría la ventana cuando era necesario nada más, cuidaba aquel horno como a su vida y el miedo de que los cambios de temperatura lo agrietaran le asustaba – Por fin – comento alegre al ver aquel vapor salir de la parte superior del contenedor y llevándolo a la pequeña mesita que tenía cerca la dejo allí, quitándose el delantal para poder servir dos tazas del té, el olor de la menta fresca mezclado con el agua inundaba rápidamente el ambiente -¿Gusta?- Ofreció con tono dulce mientras dejaba la tetera en la mesa con ambas tazas servidas, rebosante de felicidad al lograr su cometido
|
|
|
Post by Bellenique Amar Belou on Jan 9, 2018 1:12:37 GMT
Sonrió al escuchar la voz de la mujer acercarse a su encuentro, sonrió. Era una mujer guapa y también parecía tener una actitud de chica tierna, o por lo menos eso parecía a simple vista. Bellenique vio fijamente por unos segundos los bonitos ojos brillosos que poseía la dama, provocando que los de ella obtuviesen un brillo inesperado. Muchas veces se sintió orgullosa del bonito color que sus ojos tormenta poseían, pero esos la superaban por mucho.
Sin embargo mantuvo la cabeza erguida con la misma expresión monótona, no dijo palabra ante aquel hallazgo.
Agachó levemente su cabeza a manera de saludo ante la presentación de la dulce panadera, posando sus ojos en la vitrina buscando algo en que poder gastar unas pocas monedas. Todo parecía delicioso, pero su vista quedó clavada en unas magdalenas de aspecto bonito. Sintió como su boca se volvía agua ¿Hacia cuanto no probaba una dulzura de esas? Sacó un par de monedas de sus bolsillos depositándolas sobre el mostrador.
- Una Magdalena por favor. – Pidió con naturalidad y una sonrisa casi imperceptible cruzaba su rostro.
Su semblante se volvió serio al ver como la mujer manejaba calor, esos trabajos siempre le daban un poco de grima, solo podía pensar en lo que podría salir mal y represalias que esta traería al desafortunado. De nuevo, se mantuvo callada mientras contemplaba la situación. Un suspiro de alivio salió de sus labios cuando todo hubo terminado y Silver le ofrecía con amabilidad una taza de té. – Muchísimas gracias. – Su voz le pareció extrañamente calmada, considerando lo estresada que estaba últimamente.
“A lo que viniste, Belle” Se dijo a si misma cuando se dio cuenta de que inconscientemente se dejaba llevar por la calma del local “No te distraigas”
Con la mayor delicadeza posible, que era muy poca en su persona, sacó el letrero que encontró con anterioridad y lo depositó el mostrador. – En realidad… – Miró a Silver a la cara, más seria que antes – Quisiera saber si el trabajo sigue estando disponible.
|
|
Silver Somnium
La Resistencia
Los ojos lindos ocultan mas de lo que puedes imaginar
Posts: 179
|
Post by Silver Somnium on Jan 10, 2018 6:31:51 GMT
Silver miro hacia donde miraba la joven, extrañada ante aquel nombre y viendo aquellas bolitas de masa que estaban en el canasto, al igual que el resto del pan que se exhibía, comprendiendo que era eso a lo que se refería “ah, así se llaman” sonrió feliz, al menos la chica le había ayudado a resolver aquel enigma que tenía – Oh, gracias por decírmelo, no podía traducir bien el nombre de la receta… Pero no están a la venta, en realidad son muestras, por eso son tan pequeños comparados con el pan y las galletas que se ven en los canastos – Sonrió amablemente –Puedes tomar los que gustes, espero que te gusten, no los había preparado antes, tengo la costumbre de ofrecer muestras de las nuevas recetas que preparo – Explico, sacando las sillas que tenía y acercando la pequeña mesita para colocarlas allí, dos, por si su clienta deseaba sentarse. Se metió en la cocina rápidamente para tomar un poco de azúcar y dejarlo en un pequeño cuenco de madera, junto con una cuchara pequeña, volvió rápidamente, sentándose con la mayor tranquilidad de todas en aquella mesa donde aún estaban las monedas de la chica, Silver no recibiría ese dinero, pues lo que ella deseaba era gratuito
- ¿mm?-Silver subió la mirada, buscando fijar sus ojos en los ajenos al escucharla hablar de nuevo, vio como la mujer sacaba aquel pequeño letrero, reconocía su letra, era su anuncio, una sonrisa nerviosa se asomó por los labios de la dragona, eso la había tomado por sorpresa, pero debía mantener la calma –¡Claro que lo está, por favor toma asiento!- exclamo, feliz, sin poder ocultarlo, carraspeo, ahora había que hablar de negocio, las manos de la panadera rodearon la taza, nerviosas, buscando algo que hacer para calmar el alocado corazón de la muchacha que se había disparado al escuchar las palabras de su interlocutora –Bien… debo ser sincera para empezar, nunca eh contratado a nadie así que te pido perdón si todo esto es algo extraño – sonrió suavemente, reacomodándose en la silla – Quitando eso de lado, quisiera preguntarte algunas cosas…- suspiro, irguiéndose en la silla y tomando una mirada seria, casi fría, debía serlo, estaba permitiendo que alguien desconocido entrara no solo a su vida laboral, también le estaba dando acceso a mucho, para la mujer aquel espacio significaba mucho - ¿Ah trabajado antes en una panadería? ¿Conoce de cocina? ¿Le gusta el pan? – comenzó con esas tres simples preguntas, tomando aquel cuenco y agregando el azúcar a su te, bebiéndolo, se sentía importante, como toda una mujer exitosa, aunque su lado más serio le pedía que se controlara y no se exaltara demasiado, no quería asustar a la muchacha que quería trabajar con ella
|
|
|
Post by Bellenique Amar Belou on Jan 12, 2018 2:26:50 GMT
Al notar la actitud de la mujer por el asunto de las magdalenas Bellenique se mostró indiferente, no iba a protestar para que aceptase el dinero ¡Puff! Como si ella tuviese el capital como ponerse en semejante posición (A pesar que le dolía su orgullo, debía tragárselo). Guardó las monedas en sus bolsillos y tomó la magdalena agradecida con la mujer. Cuando le dio un mordisco sus ojos obtuvieron un brillo leve al probar la masa dulce, pero no dijo nada, Belle se limitó a mirar la magdalena con una sonrisa. Cuando escuchó como la mujer de ojos luminosos le respondía de forma positiva volvió a su estado de serenidad, sintiéndose más cómoda con la situación que se presentaba. Bellenique tomó asiento dispuesta a responder las preguntas de la mujer, sería sincera, igual no tenía nada que ocultarle a su, probablemente, futura jefa que resultase perjudicial para la aplicación al trabajo. Tomó un sorbo del té, sin azúcar, amargo y delicioso a la vez contrastaba en su boca junto con la dulzura de la magdalena, luego los dejó a un lado. Frunció las cejas al escuchar a la mujer - ¿En serio? Entonces supongo a que se debe que tiene mucho trabajo, señorita Silver. – Enderezó la espalda y tomó una posición impecable, escuchando con seriedad a la joven. – Siendo sincera no he trabajado nunca en una panadería, sin embargo trabajé en el restaurant de mi familia desde muy pequeña, conozco como tratar a los clientes y atenderlos con calma y rapidez, son cosas que no se olvidan. - Frunció el ceño, pensativa - Si me agrada cocinar, aunque no se me da muy bien hacer pan, soy más de galletas y comidas saladas, pero estoy dispuesta a aprender si usted lo está de enseñarme.- La castaña dio otro sorbo a su té, luego sonrió – Dígame, señorita Silver, ¿Conoce usted a una pobre alma que no disfrute de la delicia de un pan recién hecho? Sería una pena que alguien no lo apreciara, es como si se perdiera de una de las delicias de la vida. Bellenique miraba con amabilidad a la mujer ¿Se molestaría si ella también le hiciera preguntas? Muy seguramente no, ella también merecía tener idea de que iba el trabajo que la panadera estaba ofreciendo, sobre todo para conocer sus chances. – Espero me permita hacer un par de preguntas – Cruzándose de piernas le miró interrogativa – Más o menos qué clase de empleado busca ¿Alguien limpie, atienda o cocine? ¿O simplemente que le ayude en cualquier cosa que necesite?, que no supondría ningún problema, claro esta, solo me temo que no soy tan fuerte como para cargar sacos de harina por mi cuenta.También me agradaría saber desde que hora debo estar presente y los días que debo asistir… – Hizo una pausa, pensativa si lo que estuvo a punto de preguntar sería prudente – También el pago.
|
|
Silver Somnium
La Resistencia
Los ojos lindos ocultan mas de lo que puedes imaginar
Posts: 179
|
Post by Silver Somnium on Jan 24, 2018 6:41:58 GMT
Estaba bastante complacida por las respuestas dadas, y también muy sorprendida por la seriedad de la muchacha frente a ella, bebió un poco de té, relajándose, realmente en el fondo estaba nervios por todo aquel interrogatorio que debía hacer, pero sabía que era lo correcto de hacer, suspiro con soltura para calmarse mientras escuchaba ahora la pregunta de la chica, una sonrisa salió de sus labios –Hay muchos gustos señorita, no puedo juzgar a quien prefiere la fruta antes que el pan – contesto de forma suave, enderezándose para tomar el mismo rol de la contraria –Claro, es comprensible que dese preguntarme también- contesto con un gesto amable y acomodándose en el asiento, mirándola expectante y posteriormente meditando sus interrogantes, esperando hasta que la última de las dudas fuera dicha. Su semblante cambio a uno más serio, eran preguntas bastante importantes y los había pensado bastante, eran cartas que debían jugarse bien y siempre con la verdad por delante, no quería empezar una relación de trabajo con mentiras, suspiro, respirando hondo –Bueno, comenzando con lo primero debo explicarle un poco como funciona este trabajo, tal como usted lo dijo es bastante trabajo para una sola persona, por lo que mi jornada de trabajo inicia poco antes del amanecer y termina cuando se ha vendido todo o bien, cuando ya está por ponerse el sol – comenzó a explicar, bebiendo un poco de té nuevamente – Y abro todos los días, excepto cuando se acaba por completo todos los insumos o cuando estoy muy agotada, me gusta que mi trabajo sea de calidad – sonrió ciertamente avergonzada, pero no podía evitar exigirse tanto al preparar la comida – Mi mayor prioridad es que los clientes sean felices, no sabe el gusto que me da ver las sonrisas de felicidad al probar mis productos… El dinero no es algo tan vital como la felicidad y los gustos de la vida –Compartió sus sentimientos con la joven, con una sonrisa de ilusión en el rostro, otro sorbo más largo del te
-Ahora… hablando de los temas completamente laborales – Suspiro, su se te había terminado, tampoco se había servido tanto en realidad, al menos - No debe preocuparse por cargar cosas o cocinar directamente, mi pareja es quien trae los insumos, la harina y azúcar principalmente, el resto lo compro en el mercado o lo cosecho en mi hogar, de vez en cuando – Aclaro con tono suave – El trabajo que se ofrece es sencillo, ayudarme a atender clientes en los horarios donde más se compra, entregar el pan, ayudarme a tomar el tiempo y también ordenar los cestos, tener el conocimiento de cuanto es lo que queda en las cestas de pan, hay pan que se vende más que otro, también hay días donde vienen cazadores o aventureros y compran mucha más cantidad, en ese caso el pan se entrega en sacos que yo hago con la tela de los costales, me gustaría en un futuro quizás que me ayudara a prepararlo, pero eso ya es algo mucho más lejano y por supuesto si después desea quedarse con este trabajo…- Explico toda esa pregunta – El horario de trabajo seria desde el cierre hasta el mediodía, normalmente las últimas rondas de pan terminan de salir después de almuerzo, así que con que me ayudes a abrir y te retires después de almuerzo será ideal – Sonrió con amabilidad, ya solo quedaba un tema por tratar – Y finalmente el pago…- Suspiro, era un tema complejo –bien, eh sacado un cálculo de cuanto es lo que se te podría pagar por trabajar 5 días a la semana, y me parece que 1500 Mirvos al mes es un buen sueldo – ofreció esperando ansiosa la respuesta
|
|
|
Post by Bellenique Amar Belou on Jan 31, 2018 21:00:20 GMT
Bellenique arqueó una de sus cejas ante el horario, le gustaba ese tiempo. Le resultaba conveniente y le quedaba bastante tiempo durante el día, quizás podría encontrar otros trabajos cuando no tuviera que mantenerse en la panadería. Quizás podría ahorrar lo suficiente y comprarse un par de cosas para su trabajo a la larga… ¿Qué más daba pasar unas temporadas en ese lugar? Era lindo y parecía agradable, todavía era demasiado joven como para preocuparse por su futuro. Se sintió aliviada cuando escuchó el sueldo, para el trabajo que acarreaba el puesto el dinero que iba ganarse estaba bien, no iba darse muchos lujos, pero estaba bien.
Ojala nadie que supiese hornear pan pidiese el trabajo también, sería triste.
- Por mi todo está perfecto, señorita Silver – La vampiresa mostró una sonrisa cortes, evitando mostrar sus colmillos. Dejando la taza de té a un lado, Bellenique dio su ultimo mordisco a la magdalena, masticó la masa y luego se volvió hacia la mujer – Solo tengo una pregunta más, si llego a obtener el puesto ¿Cuándo empezaría a trabajar?
La castaña miró fijamente los coloridos ojos de la dueña esperando una respuesta o aún más preguntas para ella, por un momento miró por la ventana el sol. Quizás ese fuera el único inconveniente del trabajo, tener que salir con los rayos del sol podría ser increíblemente problemático.
|
|
Silver Somnium
La Resistencia
Los ojos lindos ocultan mas de lo que puedes imaginar
Posts: 179
|
Post by Silver Somnium on Mar 2, 2018 9:54:21 GMT
Aquella pequeña reunión casi terminaba, Silver ya tenía un buen dato, al menos ya había asegurado de que tendría un trabajador, escucho con atención la última pregunta de la muchacha y la medito, frunciendo ligeramente los labios, el plazo que ella daría seria de dos días más, realmente necesitaba esa ayuda y no podía esperar más que eso sonrió – En caso de que nadie más se presente comenzaría a trabajar dentro de 3 días exactamente, la contactare a través de la tableta arcana – Le sonrió con amabilidad, levantándose para recoger las tazas e ir a lavarlas más tarde, reacomodo la mesa y ordeno su falda con suavidad – Espero que te haya agradado él te… Creo que ya no me falta nada más por preguntar…- se tomó unos momentos para meditarlo, repaso en su mente todo lo que había hablado con su pareja, todo estaba en orden, lo vital, hasta que un pequeño detalle, uno que era vital… no le había preguntado su nombre, no sabía cómo se llamaba aquella bonita mujer con la que había estado hablando y aún más importante, a quien pensaba contratar en un futuro cercano
–Disculpa… Aun no me dices tu nombre…- ¿Cómo se le había pasado por alto tan importante detalle? Seguramente Xhial se reiría de aquello, suspiro algo avergonzada –si no se tu nombre… No podría contactarte después…- Hablo con tono suave, realmente estaba apenada por aquello
|
|