Clases de nado [Privado] (Ró - Ivka)

Prestó atención a cada palabra, cada gesto, cada expresión única e inconfundible de la pequeña. Interesado, curioso, débil ante la hermosura de la amabilidad que alguien podría demostrar. Se sentía ligeramente anticuado, las personas más jóvenes estaban tan llenas de vida, emoción por continuar, algo que en el arcano estaba a punto de acabarse, una llama que pronto podría extinguirse.

- Puedo sumergir mi cuerpo durante poco tiempo, pero como si estuviese de pie...realmente no tengo la capacidad de poder mantener en el agua todo el cuerpo entero sin parecer estar incado reteniendo la respiración...- Explicó serio mientras ambos se adentraban más al agua, el vaivén de las olas era suave y amable. Después de aquella explicación pudo apreciar como la contraria correspondía a su humor, ambos bromeando, pero una acción llamó un poco su atención, el que la pequeña rodase los ojos,únicamente soltó una leve risa ante lo que dijo justo después de ello, parecía molestarle un poco el que se disculpase con tanta preocupación "No es tan fácil intentar no disculparse después de estar acostumbrado a ello tantos años..." Pensó desde el fondo de su corazón, era la verdad, pero sólo se limitó a dedicarle una cálida sonrisa mientras continuaba escuchando sus dulces palabras, llenas de sinceridad y humildad.

"No quiero que te sientas obligada a querer sentirte útil para mi Ró..." Pensó en aquello con total serenidad mientras sus ojos le observaban, apacible y ligeramente emocional, el muchacho deseaba decirle tales palabras, pero sus pensamientos fueron interrumpidos, las palabras que le hicieron sentir una punzada en el pecho le cautivaron, "¿Así se siente entonces...?" La sensación era agradable, diferente a lo usual, diferente a todos esos años de soledad y confusión. - Sabes, también puedo decir que eres mi mejor amiga Ró, pese al poco tiempo de conocernos me he dado cuenta de ello, y realmente aprecio tu compañía... y por ello, casi puedo asegurarte que no me sentiría disgustado su tu estas a mi lado, acompañandome en los buenos momentos... - El arcano dijo todo aquello con total normalidad, mientras elevaba su rostro mirando al cielo, cerrando con lentitud sus párpados por unos cuantos segundos, disfrutando de la brisa refrescante. Hasta que pudo escuchar nuevamente a la voz femenina, delicada y servicial, abría lento sus párpados nuevamente para mirarle de reojo, sorprendiendose un poco al ver como corría, al escuchar la idea que se le había ocurrido, y al sentír como le era salpicada un poco de agua.

- Me parece buena idea, comencemos entonces..- Fueron sus últimas palabras hasta ese momento, con cierto tono de emoción y expectativa.

Le causó un poco de gracia el escuchar el berrinche de la pequeña, era muy graciosa cuando parecía molestarse por algo tan simple y sencillo. Serio pero expectante le miraba, escuchando cada palabra que salía de su pequeña y delicada boca.

- Supongo que podríamos intentarlo, de cualquier modo ya estamos aquí, seria tonto irnos sin que haya aprendido algo... creo - Dijo el arcano mientras desviaba su mirar con cierta "ironía", para después notar como la contraria extendía sus brazos, y sólo decidió guardar silencio, apreciando el despejado azul del cielo, ignorando un poco lo que ocurriese cerca suyo.
Todos esos años el muchacho había admirado el cielo nocturno despreciando el color azul claro de todos los días, se sentía extraño, el que pudiese apreciar siquiera un poco el cielo tan claro y luminoso que no toleraba.
Sentía la luz sobre su cara, no le molestaba tanto pero igual no le gustaba demasiado la sensación, en cuanto pudo escuchar la risa de su compañera decidió mirarle de reojo, "¿Has llorado?... ¿o sólo estoy imaginando cosas?..." pensó al notar un ligero tono más rojizo en el rostro contrario, pese a ello sólo fue una suposición quizá errónea, la pequeña siempre solia tener aquel tono en su rostro, así que simplemente decidió no dar vueltas al asunto y asintió con una leve sonrisa en su rostro.

-Bien, sólo dime que hacer ahora... - Susurró el arcano mientras miraba atento a la joven, esperando indicaciones. En su espera y sin muchas energías de querer moverse únicamente decidió estirar su cuerpo, soltando un bostezo al aire sin mucha preocupación encima, escuchando aleteos a la distancia con las suaves olas meciendose.

Sus mejillas se tornaron ligeramente rojizas al ver que la contraria acariciaba sus manos gentilmente, era algo extraño para el pero no le molestaba, al contrario. Pese a ello, el rubor se desvaneció lentamente al escuchar que la contraria quería ir a la taberna, una sonrisa ligeramente nerviosa apareció en el.

- No creí que realmente quisieras ir a la taberna, es inesperado pero igual podemos ir, aunque no te aseguro que pueda quedarme contigo en dicho lugar tanto tiempo...- explicó con un semblante serio, algo abatido al recordar que era pésimo bebiendo, a sus 208 años aún no le tomaba un gusto al beber alcohol. Mientras el contrario pensaba en aquello también estaba atento a lo que la contraria hacia, observando como se alejaba aún tomando sus manos, mostrando plena confianza en el y en el hecho de que podría logarlo. Cierta tensión invadió su cuerpo, las expectativas de la pequeña eran muy altas...

- Diría que me siento...relativamente bien, cualquier cosa te lo haré saber... gracias - susurró con cierta intranquilidad, pero el arcano estaba seguro de querer hacer aquello, más que por la selkie, por si mismo.
Se dio unos cuantos segundos para respirar con lentitud para relajarse, después de ello lentamente tomó posición y se dispuso a intentar lo que la contraria le había indicado, con sumo cuidado y lentitud se dejó llevar, elevando sus pies junto con el resto de su cuerpo. Comenzó a flotar.
Maravillado y alegre se sorprendió, lo estaba logrando, cosa que realmente le impactaba al dragón, para poder continuar pataleaba fuerte como le habían sugerido mientras sujetaba con cierta firmeza las delicadas manos, estaba concentrado en aquello pero también con suma felicidad. Aun inmerso en la expectativa y todas esas emociones nuevas se percató de que la pequeña selkie comenzaba a hablar, sutil y amable hizo una pregunta que provocó que el arcano se quedase viéndola al rostro con unos ojos algo sorprendidos y un leve sonrojo...

- Eh... - se quedó pensativo, aquella pregunta lo había sacado de si, tanto que detuvo el pataleo y por inercia se colocó de pie nuevamente, con total tranquilidad mientras pensaba en una respuesta. Pero nada, no tenía alguna respuesta a aquello, nunca nadie le había preguntado algo así y mucho menos a había preocupado por los gustos o intereses del muchacho. A excepción de dos personas...

- Sabes, no tengo un platillo favorito, realmente nunca lo había considerado...- Explicó con cierta vergüenza, su mirada se desviaba al agua con cierta intranquilidad. - Aunque estoy seguro de que si cocinas algo para mi, será delicioso. Así que esperaré con ansias a que ese día llegue pronto...- Dijo el arcano con total sinceridad y calidez, mostrándose deseoso de aquello mientras sujetaba aún las manos pequeñas de la chica.
Era un día tan hermoso, la experiencia era única y la persona con la que había acudido era como una bendición en su vida...

-Ciertamente soy pésimo estando en lugares con muchas personas, pero el problema es el tiempo y el hecho de que no tolero mucho el alcohol, puedo beberlo pero no es que me guste mucho...- Explicó completamente tranquilo a la chica, sabía que lo comprendería y no le diría nada a su opinión, quizá habría desilusión por parte de la pequeña, pero era la verdad y no quería forzarse a hacer algo que no deseaba con tantas ganas, beber. -Aunque quizá en otra ocasión podríamos ir a alguna otra parte... no lo se... - sugirió algo serio mientras desviaba su mirar y continuaba en lo suyo.


El arcano lo había logrado, había conseguido "nadar" por unos instantes, fue bastante placentero y su semblante lo demostró, estaba relajado y feliz, mirando el agua con ligera añoranza y tranquilidad en sus ojos, los cuales parecían querer llorar dado un recuerdo que se hizo presente nuevamente. Pero gracias a los dioses ese deseo vago fue interrumpido con un abrazo de la contraria, una hermosa frase y otro beso en su frente, el cual provocó cierto sonrojo nuevamente y algo de timidez en la mirada del arcano mientras sujetaba la mano de la selkie con amabilidad.

-Lo conseguí gracias a ti, que no dejaste de creer en mi pese a todo lo que sucedió. Gracias...- susurró sereno mientras dejaba que la contraria le besara su frente nuevamente, para después ambos separarse con normalidad. El dracónico pudo notar un poco de extrañeza en el rostro ajeno,pero sólo se limitó a mirarle en silencio con una muy leve sonrisa.

- Me gustaría que fuese pronto pero debo estar pendiente de mi trabajo, quizá...¿la próxima semana? ..- Sugirió amable mientras el muchacho observaba detenidamente a la contraria, hermosa y linda, como la joven que era...pero el arcano se percató que pese a esos atributos y a la personalidad tan bella de la chica no podría verle de otro modo, ni sentirse de una manera romántica por ella. La mente y tristemente el corazón del muchacho le pertenecían a un recuerdo del pasado, un recuerdo que el dracónico no estaba dispuesto a dejar ir por nada, ni por nadie. Se sintió ligeramente apenado con la situación, la selkie le parecía bastante hermosa, pero el joven prefería mantener sus sentimientos alejados, en sus recuerdos, en el olvido.
Su mente vagaba un poco, pero decidió olvidar el tema de los sentimientos amorosos y mejor volvió su mirar a la contraria, apreciando la amable y bella sonrisa de la chica con una pregunta algo oportuna.

- Preferiría dejarlo por hoy Ró, creo que han sido muchas emociones para un sólo día, y tengo que regresar temprano para continuar con mis labores...- Explicó algo apenado puesto que en el fondo sabía que no quería irse, pero el camino era largo ya que iría a pie mitad de camino, por lo menos hasta que la noche pudiese asomarse para ocultar su forma verdadera y por otra obvia razón... -Y además...- agregó como extra a su explicación mientras le dedicaba una cálida sonrisa a la selkie -... también quiero por lo menos acompañarte de regreso a tu hogar, antes de que se ponga más oscuro, así que supongo seria conveniente irnos pronto.
Fue lo último que dijo, después de ello se tomó unos segundos para estirar sus brazos y su espalda, relajandose y descansando un poco, mientras esperaba la respuesta de la pequeña a la sutil propuesta de que ambos regresarán juntos.

Aquella idea le pareció estupenda al muchacho, quedaba más acorde a ellos, a su parecer, sería más relajado y tranquilo para hablar quizá. El joven asintió suave con una leve sonrisa mientras miraba a la joven selkie. - Me parece una idea maravillosa, podríamos beber eso y descansar, mirar el cielo y sólo guardar silencio o tener una conversación... pienso que sería relajante. -opinó algo expectante mientras comenzaba a seguir a la chica a la orilla, ella por delante con ciertos ánimos aún, se notaba que estaba un poco más feliz que antes. "La próxima semana... si...." pensó tranquilamente mientras observaba el agua con un leve reflejo color naranja, llamativo y agradable, su cuerpo ya había vuelto a la normalidad, todo ocurrió de una forma tan extraña y tan rápida, tan fugazmente que ni siquiera se había percatado del cambio, únicamente soltó una leve risa y salió poco después de la contraria del agua, llendo directamente por una toalla que llevaba consigo.

-También me lo he pasado excelente, hace años que no salía a disfrutar el tiempo con alguien...- declaró algo serio mientras rascaba su nuca con una leve risa algo nerviosa, agachando ligeramente la cabeza. - Fue muy placentero pasarla contigo...- susurró al final mientras se secaba el cuerpo, para después comenzar a colocarse las prendas que llevaba de repuesto, escuchando lo que la otra decía.

- No tengo problemas con llevarte, no me gustaría que te fueras por tu cuenta, no sería correcto de mi parte...- explicó con su semblante serio, mientras seguía vistiendose por un lado, hasta que desvió un poco su mirar a la contraria. - También... de ser posible, me gustaría pasar siquiera otro rato más contigo... - declaró al final, sereno y tranquilo mientras se terminaba de acomodar sus ropas, poco después de ello en silencio y con cierta lentitud comenzó a reunir sus pertenencias algo expectante por la respuesta ajena.

El amphitere estaba algo concentrado en sus pensamientos, pero la voz de la joven selkie le hizo volver en si. Escuchó aquellas amables preguntas y sin poder evitarlo regresó su mirar al agua, sus ojos expresaban algo de añoranza.

- Estoy satisfecho y contento por lo de hoy. Más que por los progresos logrados en cuanto a nadar, diría que estoy más agradecido y satisfecho por haber salido a disfrutar el rato por gusto personal. -Comentó mientras sacaba el agua de entre sus cabellos, exprimiendolo con cierta pereza, viendo como caía el agua a la arena. - ¿Qué pienso del agua?...- se preguntó a si mismo con una voz baja, casi insonora para la contraria, justo después soltó una leve risa y comenzó a hablar nuevamente. - Siempre he pensado que el agua es hermosa, siempre me había llamado la atención. Así que hoy pude confirmar que ciertamente lo es...y puedo decir con seguridad que me gustaría volver para nadar de vez en cuando. - Comentó al final con un semblante más alegre y apacible consigo mismo.

Se percató de la risa de la otra, no le tomó tanta importancia puesto que ella solía ser así, sus palabras se juntaban con las de el, pero al parecer las palabras del amphitere habían sido más fuertes esta vez. Notó como la voz de la joven selkie se iba haciendo más suave y débil por su comentario, sonaba algo apenada, poco después el joven también se apenó un poco al considerar lo que había dicho, pero se mantuvo firme. Al escuchar que Ró había aceptado estar con el otro rato más no pudo evitar sonreír un poco, y sin prisa, ya con sus cosas en orden y su vestimenta acomodada apropiadamente se acercó a ella, escuchando la sugerencia de la contraria.

-Me parece buena idea...- Dijo en voz baja y sin prisa alguna comenzó a caminar lentamente, esperando a que la otra le guiase para ir por el camino adecuado.