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Post by Cereza Koslov on May 30, 2017 14:07:51 GMT
La querubín observaba con mucha preocupación la batalla bestial que se cernía frente a ella, su nerviosa mirada pasaa del hombre lobo a la bestia consecutivamente, mientras sus temblorosas manos intentaban mantener el agarre de la espada en un inocente intento de permanecer como apoyo para el rubio. Sin embargo parecía que él se las apañaba bastante bien solo...
Cuál fue su sorpresa cuando éste mandó a volar al animal justo cerca de ella en un claro arrebato de desespero. Cereza emitió un pequeño grito mientras se intentaba cubrir como podía con un brazo.
La espada fue lanzada a un lado con total facilidad por aquél monstruo.
-¡Aaah! -tal vez fue más el susto que el dolor, pero la mujer sintió ardor en el costado de su cuerpo y pronto fue acompañado de la cálida sangre que emanó de estos. Para su fortuna la criatura se había ido, pero la querubín se tambaleó y cayó de sentón al suelo.
¿Qué había sido todo eso? Volteó a ver al rubio aún con sus ojos húmedos y suspiró aliviada al verlo... intacto.
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Ethgan Reild
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Post by Ethgan Reild on May 31, 2017 19:54:58 GMT
Abrió los ojos en su totalidad cuando la querubin cayó herida al suelo, el sable pareció caer en camara lenta y el sonido de este rebotando contra el suelo fue lo que lo trajo de nuevo a la realidad, cuando se dió cuenta quella criatura lo miraba restregandole su victoria en la cara y como si hubiese podido leer los pensamientos del lobo, se echó a correr pretendiendo lograr escapar con vida luego de su acto criminal. No lo toleró. De inmediato rugió con furia enseñando las garras y los dientes, no hubo titubeo alguna al lanzarse a correr a cuatro patas en caza de la otra bestia
Segado por su ira y el deseo latente de matar, ni siquiera se detuvo a revisar la seguridad de Cereza, saltó por encima de ella y continuó corriendo hasta que poco a poco el sonido errático de los gruñidos y el filo de las garras rasgando el empedrado suelo se perdió a través de la neblina y la oscuridad
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Post by Narrador on Jun 1, 2017 2:04:13 GMT
La sangre derramada hizo que pequeños pétalos comenzaran a brotar del suelo, dando vida a una hermosa ¡Lagrima de vampiro! |
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Post by Cereza Koslov on Jun 2, 2017 14:05:17 GMT
La sangre escurría de las heridas en su costado, empezando a manchar su vestido poco a poco, e incluso varias de esas gotas cayendo al suelo una tras otra como si fueran lágrimas. Cereza se sostuvo un costado mientras reprimía un pequeño espasmo de dolor... si no se trataba a tiempo podría sufrir consecuencias desastrosas, pero sus piernas seguían estando débiles después de tremendo susto.
-¡Ethgan, no! -pero fue en vano gritar por su ayuda, fue en vano extender su mano hacia el frente y sólo ver como su figura se perdía en la oscuridad de la noche. -¡¡ETHGAN!!
¿Porqué siempre resultaba así? ¿Porqué nunca escuchaba?
Con debilidad la arcana viró su mirada hacia un lado notando la hermosa flor roja que yacía en el suelo, habiendo florecido entre las grietas del pavimento empedrado. Acercó su mano para cortarla como pudo. Una flor tan hermosa que sólo florecía en tan fatídico día...
La querubín intentó levantarse.
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Ethgan Reild
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Post by Ethgan Reild on Jun 2, 2017 15:41:26 GMT
Cuando ambas bestias, persiguiéndose una tras otra, lograron alcanzarse, las garras de Ethgan rastrillaron el suelo y de un solo salto logró lanzarse sobre el otro. Rodaron por el empedrado levantando otra nube de polvo y cuando todo se despejó, el lobo fue quien quedó encima enseñando los dientes con rabia. Gotas de baba resbalaron por los colmillos y cayeron sobre su contrincante, alzó una garra dispuesta a crear el maximo daño posible y lanzó el golpe con ímpetu, deteniéndose de pronto en el ultimo instante
la escuchó
La voz entrecortada de cereza haciendo eco a través de las calles era lo que lo habia hecho detenere, su pecho exaltado subia y bajaba con cada respiracion, mirando aun a la otra criatura mientras pequeñas nubes de vapor escapaban de sus hocicos. De un momento a otro, aquella bestia se retorció en un desesperado intento por liberarse y logrando finalmente zafarse a costas de permiso del lobo, se echó a correr nuevamente para salvar su vida.
la garra alzada en el aire nuevamente bajó, un impulso por querer perseguirlo de nuevo lo embargó, pero se decidió por ignorarlo. Miró de nuevo atras hacia donde habia dejado a Cereza sola y entonces, como si aquel grito desesperado hubiese significado par él el llamado a reunirse comandado por un alfa, regresó sobre sus pasos y emprendió de nuevo su camino
la flor fue tomada justo en el momento en que la figura de su cuerpo logró distinguirse entre la neblina al final de la calle. Observó a la mujer tirada en el suelo y acelerando su paso se acercó con rapidez sin despegarle la mirada de encima. Gruñó cuando estuvo a la distancia adecuada, arrugando de nuevo la nariz pero deteniéndose frente a ella sin intensiones aparentes de querer hacerle daño
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Post by Cereza Koslov on Jun 2, 2017 16:44:28 GMT
Las temblorosas manos sostuvieron la flor de pétalos rojos frente a la querubín, permitiéndole tener una amplia visión de lo que ahora poseía... la cura para el mal de muchos arcanos durante esas carmesís noches.
Fue cuestión de minutos cuando escuchó los pasos apresurados, las garras en el suelo, y el temor volvió a esparcirse por toda la espalda de Cereza al pensar que aquella bestia (o alguna otra nueva) había vuelto por más: no fue así. Ethgan había vuelto con ella... una escena que le habría extrañado años atrás pero que ahora era lo más reconfortante que podía haber para ella.
-Volvamos a casa... -susurró con gentileza, agotada del alma, del corazón. Aún así intentó conjurar las fuerzas para formar una sonrisa en sus labios- Tenemos que curarnos...
Sólo un poco más, sólo un poco más y lograría poder poner su peso en sus pies. Cuando lo logró casi estaba por caer a un lado pero pudo sostenerse del hombre lobo a su lado. Quedando ambos con sus frentes pegadas en un contacto muy íntimo para alguien de esa raza tan agresiva.
Cereza lo miró con los ojos vidriosos, conectando azul con amatista, para luego cerrarlos y disfrutar el momento mientras pudiera, pues cuando él regresara a la normalidad... las cosas no serían iguales.
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Post by Ethgan Reild on Jun 4, 2017 23:08:58 GMT
en el momento en que la vio levantarse lastimeramente un gruñido escapó de su garganta, la sintió tambalear y sus músculos apenas se tensaron al sentir el debilitado agqrre de su mano, no se movió de donde estaba. poco a poco dejó que el cálido trato lo amansara, sus ojos fijos en los de ella, la rabia abandonando la expresión de su rostro. Pronto dejó de enseñar los dientes y como si la dulce voz de la arcana fuese musica para sus oidos se dejó sumir en sus palabras.
Habian pasado muchos años desde su transformación a licantropo, pero nunca habia podido lograr dominar por completo su forma liberada, era por el rechazo que aun le tenia, el odio a la raza misma a la que sin saberlo pertenecía y que según él había acabo por arruinar su vida. Cuando se transformaba por efecto de la luna llena, solia perder el control de sus acciones, era cuando peores acciones cometía y al regresar en sí, solo lograba tener escasos recuerdos de lo que habia hecho.
Siendo guiado por ella, cerró los ojos y se permitió sentir la caricia de sus manos, pues era ella a la única a quien le permitía acercarse de ese modo.
lo sabia, aunque no lo recordara nunca bien, solía soñar con ella en muchas ocasiones... ¿o eran recuerdos?
volvió a abrir los ojos y vio entonces las gotas de sangre resbalar por la blanca piel de su compañera y manchar el suelo, un instinto se encendió de nuevo en él, no por querer herirla, no por querer hacerle daño, sino por haber permitido que alguien mas se atreviese a hacerlo. agitado volvió a despegar su frente de la de ella y una espesa nuble de vapor escapó de entre sus fauces. Retrocedió un par de pasos y un dolor agudo le atravesó el pecho, una sola mirada al cuelo fue necesaria par comprender lo que sucedía, pues la luna era cubierta por espesas nubes rojas.
Un aullido de dolor, que pronto pasó a ser un grito humano, dio cabida a la metamorfosis de su cuerpo, lenta y dolorosamente sus huesos crujieron y cambiaron de forma hasta dejar solo la figura humana de un cuerpo herido y sudoroso. Ethgan cayó de rodillas sosteniéndose con sus manos al suelo, las heridas de su rostro parecieron volver a abrirse y su respiración agitada fue evidencia clara del esfuerzo de su transformación. No se movió, no dijo nada
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Post by Cereza Koslov on Jun 5, 2017 19:17:32 GMT
Apenas abrió los ojos para observar al lobo frente a ella separarse de aquél relajante contacto. La intimidad de estar frente con frente y respiración con respiración,algo que Cereza podía apreciar sólo cuando Ethgan se encontraba con esa apariencia.
Nunca se lo diría, que disfrutaba mucho cuando el cazador adoptaba su forma arcana pues de esa forma ella podía ser sincera con él y él no entendería nada de lo que la querubin dijera, una forma de desahogarse y sentir que de cierta forma al menos era correspondida por el lado bestial de Reild.
Se sentía egoísta por ello, mentirosa y aprovechada.
¿Podía culparla? ¿Podía culparla cuando él mismo dijo que quería usarla?
Cereza sintió que su corazón se estrujaba dentro de su pecho al ver que la figura peluda comenzaba a disminuir de tamaño dejando a un hombre desnudo y de rodillas frente a ella.
Ethgan.
Ethgan.
-...-quiso pronunciar su nombre, quiso acercarse. Pero los segundos pasaron y Cereza no sabía con certeza qué hacer. Al final del día su preocupación por él sería mayor a su decepción,por lo que se aproximó al hombre con pasos cuidadosos para colocar sobre su espalda la capa con esencia de ceniza que usó al principio.
-...¿Te encuentras bien?
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Ethgan Reild
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Post by Ethgan Reild on Jun 5, 2017 19:55:36 GMT
 apretó los dientes en un intento por soportar el dolor, sintió su cuerpo temblar y formó puños con sus manos dejando en el suelo el rastro de las gotas de sangre que comenzaban a gotear desde la punta de su nariz. varios segundos pasaron siendo consciente de la cercanía de cereza, pero no se atrevió a mirarla hasta sentir la capa con olor a cenizas cubriendo su cuerpo, otro temblor casi lo hizo parecer que sentía frio, pero nada pudo estar mas lejos de la realidad No era la primera vez que pasaban por algo similar, habían noches en las que las horas pasaban mas deprisa y solo volvía en sí una vez para abrir los ojos y darse cuenta de que ya habia amanecido, pero cuando las nubes osaban cubrir el cielo y crear intervalos de " descanso", las cosas se volvían mucho peores - ... pensé - habló de pronto con voz adolorida - ... que tenia tiempo para llegar... - tembló otra vez y cerró los ojos con fuerza, no necesitó explicar a que se refería par que ella lo entendiera |
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Post by Cereza Koslov on Jun 6, 2017 0:06:48 GMT
Cereza calló por unos momentos, justo cuando terminó de colocarle con el mayor cuidado posible aquél trapo viejo para no dejar expuesto el cuerpo del hombre a la fría temperatura de la intemperie. Los ojos de la querubín temblaron apenas un poco cuando lo escuchó hablar, por lo menos... lo que el dolor le permitía.
A ella también le dolía mucho, pero de una forma en la que él no imaginaba.
-... Tranquilo. Estabas camino a casa, eso es lo importante después de todo -sonrió como pudo, pero su voz le temblaba enormemente e intentaba mantenerse firme, apretando la flor con fuerza en sus manos.- Pensé que no volverías a la Curandería después de... lo que pasó.
Bajó su cabeza apenas un poco, sentía su misma sangre seguir fluyendo en pequeñas gotas que se resbalaban por su cuerpo, imitando las del hombre lobo. Tan parecidos... pero tan diferentes al mismo tiempo.
-Estabas ignorando mis mensajes -fue una afirmación, no una pregunta. Fue una acusación.
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Ethgan Reild
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Post by Ethgan Reild on Jun 6, 2017 0:48:54 GMT
escuchó sus palabras pero no pudo responderla, ni siquiera sintió ánimos para enojarse. Habia sido verdad que durante todo el día la tableta arcana habia estado recibiendo sus mensajes, pero enojado con ella y consigo mismo por lo que había pasado, los había ignorado todos hasta el punto de silenciar el peculiar aparato. Fue a partir de entonces que no tomó nota del tiempo, las horas continuaron marchando sin ser por completo consciente de eso y para cuando se dio cuenta de que habia llevado las cosas demasiado lejos, ya era demasiado tarde.
el dolor impregnado en las palabras de Cereza lo hizo abrir los ojos de nuevo, pero no despegó la mirada de sus gotas de sangre adornando el pavimento. Recordó con absoluta claridad lo que esa mañana había ocurrido y sin comprender por qué la idea de enfrentarlo y admitir que si se había comportado como un idiota con ella, resultaba mas dolorosa que tratar de fingir que nunca pelearon. tembló una vez mas y sin pensar en las consecuencias de sus palabras, aclaró su voz temblorosa y respondió
-... ¿que hice?
era un completo mentiroso, uno con la experiencia suficiente como para poder hacerlo con maestría y salirse con la suya sin que nadie lo notara
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Post by Cereza Koslov on Jun 6, 2017 1:34:11 GMT
-... Me dejaste en claro muchas cosas- murmuró más para sí misma que para él, con el temblor en su voz muy presente. Sin embargo fue en un tono muy bajo, muy muy bajo que ella esperó él no hubiera escuchado. El tiempo se congeló para ambos mientras la querubin sentía el latir de su corazón cada vez más a prisa. Ahí estaba... la oportunidad para actuar como si nada hubiera pasado, para engañarse a sí misma con una vida cotidiana falsa. El punto de no regreso fue marcado cuando el hombre lobo cruzó la puerta de la curandería horas atrás.
Alzó poco a poco su rostro para sonreírle al hombre, de la manera más convincente posible. Una sonrisa de un corazón roto.
- Te fuiste sin decir nada -aclaró, poniéndose de nuevo esa venda en los ojos que le permitiría seguir actuando.- T-te fuiste sin decir nada, me preocupé bastante. Pero estamos bien, estamos... a tiempo de volver -le extendió su mano al rubio con suavidad, esperando con todo su ser que él aceptara la ayuda. Y con ello que él la aceptara a ella.
Al menos podía seguir amándolo sin ser correspondida, sin hacerse ninguna otra esperanza. Rechazando todo acercamiento posible, pues ahora sabía que para Ethgan ella no significaba mucho.
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Ethgan Reild
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Post by Ethgan Reild on Jun 6, 2017 2:05:48 GMT
abrió los ojos mas de lo normal, se habia preparado para que ella le restregara en cara lo que habia hecho, que le gritara lo desconsiderado que habia sido o que incluso se echase a llorar como siempre lo hacia, pero nada de eso ocurrio. En cambio las palabras de Cereza fueron suaves, mentirosas, pero a diferencia de las de él, con aparentes buenas intensiones.
Solo entonces movió un poco su cabeza para poder observarla, pues se negaba aun a creer lo que había escuchado ¿por que le había seguido la corriente en primer lugar? no creía que existiese un propósito. Si ambos conocían la verdad solo se hacían daño al intentar seguir como si nada, a él nunca le había importado, claro, pero y ella... ¿tan dispuesta estaba a dar su dignidad en sacrificio solo por permanecer a su lado? se dio cuenta de que el tampoco quería separarse de ella cuando vio la mano extendida de palma arriba, esperando por su respuesta
apretó los labios pero ya no por dolor, intentó resistir el impulso de volver a ser el de siempre y decirle la verdad, pero terminando por aceptar su mano alzó la mirada agotada y ojerosa y una sonrisa cansada adornó su rostro - ¿nunca aprendo verdad? - irónicas fueron sus palabras, pues un doble sentido se extendía en la frase, haciendo valer su significado no solo par el, sino también para ella
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Post by Cereza Koslov on Jun 6, 2017 5:07:58 GMT
Cereza negó ligeramente con la cabeza, mientras esa sonrisa se mantenía en su rostro, quemando su energía rápidamente como si de un muy fuerte esfuerzo se tratase. ¿Qué tanto debía de mantenerse así? ¿Sólo como única recompensa sintiendo el contacto de sus manos? La satisfacción de saber que al menos podían contar el uno con el otro en situaciones adversas.
Ella supuso que al menos... podía ser la persona en la que Ethgan podía confiar cuando estuviera en problemas. Y así no estaría tan solo.
Tal vez ella se sentía muy sola realmente.
-Nunca aprendemos... -respondió con suavidad mientras lo ayudaba a levantarse, quedando ambos un poco próximos por tal acción. Pero la pelimorada se alejó pronto, con la excusa de buscar las pertenencias del hombre lobo lo más rápido posible, y sobretodo apretando con mucha fuerza aquella flor con su mano derecha... enterrándose las espinas de ésta sin darse cuenta.
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Ethgan Reild
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Post by Ethgan Reild on Jun 6, 2017 22:06:26 GMT
Ethgan se puso de pie, la capa hondeó al cubrir por completo su cuerpo y observó a la querubin a su lado, no contó con demasiado tiempo par detallarla pero supo al instante que la herida sangrante de su constado no era la peor de todas. No pretendió detenerla cuando se alejó de su lado, comprendió perfectamente que de seguro no quería estar cerca de él, pero era comun que fuese ella quien terminara recogiendo sus cosas cuando la situacion se le escpaba de las manos en las noches de luna llena. Volvió a mirar al cielo preguntandose cuanto tiempo mas tendría antes de que las nubes se apartasen y de nuevo a Cereza quien regresaba ya con sus cosas en mano. Miles de preguntas se agolparon en su garganta, pero ninguna de ellas salió
seriedad.
Cuando se trasformaba, no solo su cuerpo cambiaba sino también su sentido del humor. Con frecuencia se volvía mucho mas oscuro y retorcido, encontrando cierta gracia en situaciones en las que en circunstancias nromales podia al menos conservar un mínimo de respeto. Irónicamente ser de esa raza no era lo que le afectaba, sino su vida amarga y llena de errores lo que que lentamente lo había convertido en un monstruo.
Aun asi, no temió por ella sabiendo que en cualquier momento se trasformaría, sabia que a pesar de todo el no le haria daño... pero otras criaturas igualmente permanecían en asecho, dándose el posible caso de que pudiese dejarla sola otra vez... Solo entonces observó la flor que ella llevaba, si tan solo aquella lagrima de vampiro resolviese su problema de la misma manera en que lo hacía con todos los demas... pero no... el no era una criatura de la oscuridad, solo era un hombre lobo...
- ¿por que no te quedaste en casa? - todo rastro de su anterior sonrisa desapareció - te dije que no me esperaras... - sin entrar en detalles sobre lo que recordaba, la miró directamente a los ojos y esperó su respuesta; no estaba en posición de reclamar nada, pero aun su tono hubiese sonado un poco demandante, sus intensiones habían sido distintos... ¿y si alguien la hubiese lastimado aun peor?
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