Rallis
Los Invictos
Luces y estrellas en los ojos de oro
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Post by Rallis on Jun 24, 2017 4:05:07 GMT
"El valor está precisamente en hacerlo, pero el valor desaparece cuando uno abandona la voluntad de cambiar y de vivir la vida. Las alternativas están delante de ti: elige una y dedícate a ella. Las acciones te darán nuevas esperanzas y un sentido a tu vida"
El arconte abrio los ojos, era un nuevo dia pero su cuerpo estaba contuso, mordidas que eran cubiertas con gasas sus brazos tenian varias suturas finas en cada zona donde parecia que le habian hecho cortes y heridas tan profundas que un poco mas y llegarian al hueso, la nariz tenia un tabique, aveces sangraba pero no esta rota, las rodillas desechas por haber caido sobre rocas muy probablemente, cubiertas por vendajes finos que se veian levemente manchados de sangre, el brazo derecho estaba roto en dos puntos, que unos maderos delgados pero firmes sostenidos por vendas servian como soporte para las fracturas y una recuperacion del hueso, su zona abdominal tenia vendajes sobre vendajes, apenas podia moverse por aquella herida que causo una poderosa hemorragia gracias a los guardianes de Mirovia que no fue momento de morir ahi, gracias a que Garrel Thelnak habia salvado su vida en aquella jungla y cauterizo esa herida que ahora era una quemadura tan horrible que lo dejaria marcado para siempre, Rallis movio la cabeza lentamente y como pudo se incorporo lentamente aunque con dolor hasta lograr ponerse de pie, musculos lesionados y contusiones en la cara, ademas de una que otra costilla rota, un estado bastante lamentable para el Arconte.
-N-no quiero quedarme aqui...quiero aire fresco...-Una vez dicho esto Rallis camino saliendo con lentitud de la habitacion, se quejaba de dolor por las heridas pero ¿estar acostado sin poder ver el exterior?, era muy frustrante para el corazon de un explorador, miro a su alrededor, cubriendo su mirar con el antebrazo mas "sano" admirando el templo del verano, la arquitectura tan impresionante entre la espesura de la jungla. |
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Post by Akane Enomoto on Jun 24, 2017 5:27:19 GMT
Despues de aquella noche, Akane no volvio a ser la misma...dormia poco, hacia sus deberes pero su semblante era amargo, su comida le sabia cada vez mas insipida, se sentia miserable y culpable de todo lo que habia hecho y queriendo a la vez intentar remediar un poco del daño causado. Por las lenguas distantes escucho de que el pequeño Rallis estaba hospedado en el templo de su corte, asi que no dudo ni un instante y salio para verle. Sin que nadie lo supiese abandono el castillo, caminaba torpemente pero a paso constante...queria verlo, queria disculparse.
Camino entre la espesura de la hierba, el polvoriento camino empedrado...entre las risueñas hadas quienes revoloteaban a su alrededor (aunque eso no le hacia para nada feliz...) , las sandalias de madera sonaban ritmicamente al compas del viento quien, sacudia las hojas, haciendolas caer al suelo. La ansiedad aumentaba en el corazon herido de la oni, ese pequeño arconte ocupaba ahora un lugar muy especial en el, pero le dolia tanto haberlo diezmado de tal atroz manera.
Un guardia la sorprendio, sacandola de entre sus pensamientos:
-¿Buenos dias?, ¿que se le ofrece?- dijo uno de los guardias del soberano.
-Vengo a visitar al que se hospeda...es un arconte que ha sido gravemente herido....- trago saliva pesadamente -yo...soy una conocida de el-.
-Muy bien....adelante- dijo el guardia, dejandola pasar a regañadientes.
Las sandalias hacian eco en el camino, hasta que reconocio a lo lejos aquella silueta: estaba peor que ella, usaba muchos vendajes y estaba observando el exterior de su habitacion con curiosidad. Apenas lo miro a los ojos, comenzaron a brotar lagrimas de los orbes escarlatas de la mujer, quien, tan rapido como pudo se lanzo a abrazarle...teniendo obviamente cuidado de no lastimarle. -Ralis!....pequeño mio....como me alegra encontrarte sano y salvo....- gimoteaba y besaba los cabellos del arconte, colocando su cabeza en su pecho mientras lo acunaba, acariciaba su espalda y volvia a besarle cariñosamente. -No sabes....lo angustiada que me he sentido desde esa noche....- no queria soltarlo, y las lagrimas salian mas y mas...cada vez con mas sentimiento. -Rallis....- sus manos al acariciarlo temblaban, no sabia si era porque por fin podia sacarse ese nudo en la garganta...si por fin podia expresarle sus sentimientos al arconte, al pequeño que queria como un hijo...el hijo que nunca tuvo.
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Post by Rallis on Jun 24, 2017 5:56:40 GMT
Miraba a su alrededor distraido, distante de lo que ocurria totalmente a su alrededor estaba casi en un 80% sedado por pociones que adormecian el terrible dolor que aveces lograban noquearlo o hacer que se desmayara, la fiebre bajara y evitara que se abrieran las heridas, cuando este sintio unos brazos a su alrededor, un abrazo habia sido recibido, alzo la mirada levemente mientras las lagrimas caian sobre su pequeño rostro, sentia besos en su cabeza y suaves caricias en su espalda, Rallis sentia el calor de quien le daba afecto cuando poco a poco las lagrimas comenzaron a caer de los ojos dorados del Arconte mientras lo acunaba, "-No sabes....lo angustiada que me he sentido desde esa noche....-" Rallis lloraba, recordaba entre flachazos de recuerdos torturantes, dolor mucho dolor y miedo, pero mas que nada sangre, el rojo de la sangre, temblaba con fuerza.
-A-a-a-a-akane-
Decia entrecortado, entre suspiros de panico y terror pues aquella feroz batalla lo habia dejado marcado no solo fisicamente si no tambien en el fondo de su herido corazon y mente, un trauma que quiza tarde en superar, no le tenia miedo a quien consideraba con gran amor, su madre aunque no biologica pero era tan amorosa como si lo fuera, para con su brazo "sano" abrazarla con fuerza mientras lloraba.
-L-lo siento lo siento te dañe te dañe lo siento tanto! snif snif!-
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Post by Akane Enomoto on Jun 24, 2017 6:42:41 GMT
Sentia la angustia del chico, lo abrazo un poco mas fuerte y escuchando que el tambien lloraba rompio en llanto: -No llores...pequeño- ironico que ella estuviese en su mismo estado, ambos llorando por tan traumatico evento, pero aliviados de poderse encontrar de nuevo. -¿No...no me temes...aunque sea un monstruo?- dijo impulsivamente, sabia que no queria angustiarlo mas con su pesimismo pero sobre ella misma solo sentia asco. -Todo estara bien cariño...yo....sere fuerte...para nunca mas volver a lastimarte....ni a ti ni a nadie mas....- las lagrimas rodaban por sus mejillas aterrizando en el cabello del arconte a quien besaba repetidas veces, aquel niño era su adoracion.
Al sentir aquel correspondido abrazo, tomo el rostro del pequeño besando su frente, para acunarlo de nuevo en su pecho -era en defensa propia Rallis, yo entiendo...que estabas asustado...siempre he negado la naturaleza violenta que sucumbe en mi interior, mis antepasados eran seres aberrantes y grotescos....inhumanos...yo queria ser diferente - trago en seco y su voz se entrecortaba cada tanto - yo...quiero ser diferente a ellos....quiero que en mis acciones abunde la bondad....la misericordia....el amor...- las manos de la mujer se enredaron en su cabello, para acercarle mas hacia ella, no queria soltarlo de nuevo. -Eres mi todo....con tu amor....puedo cambiar Rallis....puedo ser una mejor mujer....puedo....- pauso para separarse un poco y mirarlo a los ojos, ambos lloraban como magdalenas y eso hizo que ella esbozara una timida sonrisa -...puedo liberarme de toda esa maldad....-.
-Yo....quiero ser mas que una conocida para ti....quisiera poder criarte...y darte todo el amor que realmente mereces....- un nudo en su garganta inpedia que hablase claramente, carraspeo un poco y siguio hablando. -Quisiera...que vinieses conmigo....- se limpio las lagrimas e hizo lo mismo con las de el -quisiera....demostrarte que puedo cambiar....ser mas fuerte...a tu lado....como....una familia...- las manos de la mujer acariciaban las mejillas del chico, lo acerco hacia si para darle un ultimo beso en la frente, para despues avergonzada, tomar un poco de distancia.
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Post by Rallis on Jun 27, 2017 23:31:36 GMT
Se sentia tan triste pero mezclado con felicidad, era algo que jamas habia experimentado, pues generalmente
era un arcano siempre feliz en su vida, para encontrarse abrazado por la albina, se sentia protegido, feliz en
verdad, para alzar su mirada encontrandose con aquellos ojos rojizos como la sangre, intimidantes pero a la vez
tan hermosos, escuchando la pregunta de Akane. " -¿No...no me temes...aunque sea un monstruo?- "claro que no, era
su mas cercana amiga, ella le brindaba un afecto que hacia muchos años habia sido forzado a dejar atras, el amor
de una madre amorosa,recordo a su madre que le suplicaba que escapara, que viviera.
-N-no...no puedo temerte...eres la unica que a sido tierna conmigo, la mas dulce arcana que eh conocido...eres
mi...eres como mi mama...-
Las lagrimas caian por sus tiernas mejillas."-Todo estara bien cariño...yo..sere fuerte...para nunca mas volver a lastimarte...ni a ti ni a nadie mas...-"
Una sonrisa de esperanza se veia reflejada en su rostro herido, sintiendo cada beso, cada caricia en su cabecita, era algo tierno y
reconfortante, tan tiernos y sinceros tan calidos y verdaderamente eran caricias de una madre amorosa, una madre que...sentia que akane jamas habia podido tener.
-No puedes...negar tu pasado...no puedes dejarlo atras...solo podemos pensar en el futuro y en como podemos mejorarlo...juntos podremos lograrlo...-
No habia ni una pizca de duda en sus palabras pero si tenia mucho temor, temor a fallar, a dejarla sola y que callera una vez mas en aquel abismo de dolor en el
que se encontraba anteriormente en esa semana de luna roja, para escuchar mientras su rostro era alzado para ver a Akane una vez mas a los ojos y lo veia con una
sonrisa timida. "-...puedo liberarme de toda esa maldad....-. " al escuchar aquellas palabras el arconte sintio mas alegria en su corazon, apesar de el increible
dolor, apesar de que sus heridas sangraran una vez mas abrazo con fuerza a Akane, con amor y ternura mezcladas con algo de preocupacion por ella, tenia esperanzas
esperanzas que al borde de la muerte estaba a nada de perderlas.
-S-si! quiero estar contigo, quiero ayudarte q-quiero que seas alguien muy cercano a mi, te quiero mucho Akane y siempre te voy a querer y hare lo posible por que
tu seas feliz!-
Dijo cuando sintio el dolor punzante en cada parte de su cuerpo, el dolor habia regresado, la pocima para esfumarlo habia cesado sus efectos, sintiendo como sus
piernas comenzaron a temblar amenazando con caer al suelo de no ser por que estaba siendo abrazado por akane.
-E-eso es...a-a-gh...lo que mas...quiero..hng...una fa...familia...-
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Post by Akane Enomoto on Jul 25, 2017 22:22:10 GMT
Durante mucho tiempo estuvo velando por su familia, haciendo sacrificios por ella para que nada les faltase, hasta incluso por ellos es que trabajaba como sirvienta...las cosas que una persona hace por amor a sus familiares, sin importar si son de sangre o no...si comparten ese amor, ese vinculo y ese deseo de seguir unidos no hay palabra mas perfecta que pueda describirlos. Entre lagrimas, besos y risas la mujer acunaba al arconte en su pecho...a pesar de las heridas de ambos su felicidad era indescriptible. - Es cierto corazón, no podré nunca negar mi pasado...ni negar tampoco las mil y un atrocidades que he cometido hasta ahora...pero ahora vengo a redimirme y prometerte aquí y ahora que sere una mujer nueva...una madre amorosa que te proteja y vele por ti- las nobles palabras del arconte tocaron su roto corazón, lo amaba como si fuese su hijo de sangre...un hijo de alma. - No sabes cuanto te quiero pequeño mío, saldremos adelante de esto...y seremos felices juntos...- Sentir que Rallis comenzaba a temblar a causa del dolor la saco de su trance y con mucho cuidado, ayudo al pequeño a erguirse, afortunadamente su abrazo había evitado que este cayese estrepitosamente al suelo, por lo que rápidamente lo guio de vuelta a la que pienso que seria su habitación. - Vamos mi pequeño...debemos llegar a la cama para que reposes...- dijo para despues cargarlo con las fuerzas que le quedaban y depositarlo delicadamente en la cama...arropandolo con torpeza para depositarle un beso en la frente. - Ire a buscar a alguien quien pueda brindarte una poción para que alivie tu dolor...te prometo que no tardare mucho...esperame y se un niño bueno- le dijo para verle de reojo, atravesó la entrada y desesperadamente busco con la mirada a alguien quien pudiese socorrerla. OOC: Disculpa la tardanza uwu  |
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Post by Rallis on Aug 20, 2017 7:18:59 GMT
El pequeño arconte sentia los brazos de la oni que se mantenia a su lado apesar de que en esa forma quiza le daria lastima a cualqueir arcano cerca suyo, pero era su madre, solo su madre adoptiva, rallis sonrio pero esa hermosa sonirsa se borro de golpe con el punzante dolor, caminaron hasta la habitacion, su frente comenzo a sudar, la fiebre regresaba pero logro recostarse.
-n-no te va...yas...- muy tarde, la oni se habia retirado a buscar ayuda para el, sentia que el dolor era enorme, pensaba que comenzaria a gritar del dolor pero...el cansancio fue mas que el dolor, cayendo noqueado.
Un boticario llego junto con la Onie para tratar a Rallis , dandole pociones, comenzo a untar los respectivos unguentos y descubriendo la herida mas grave que fue la herida que tuvieron que cauterizar, la que probablemente le marcaria por toda su vida, el boticario termino su trabajo y les dejo solos, mientras el arconte dormia.
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Post by Akane Enomoto on Sept 1, 2017 1:59:49 GMT
- Shhhh...calma mi pequeño, ya estoy aquí- comento la mujer de cabellos plateados quien, tras las atenciones oportunas del boticario se acerco para arrodillarse al lado de la cama donde reposaba el pequeño arconte, limpio su sudor con un pañuelo que ella solía traer, tantas cosas difíciles estaban pasando por su culpa...o eso era como ella lo tachaba, se culpaba a si misma de ser la causante de tanto dolor del chico, pero eso era ahora un punto y aparte para los dos. - ♪♪ Mi cielo, mi vida...¿que haría yo sin ti?...no me importa si el mundo entero esta en mi contra, si tu me quieres como yo te quiero ♪♪- Dormia un poco, con el reposo suficiente podría ponerse de pie y quizá andar con un poco mas de naturalidad. Acariciando sus cabellos, decidió tararearle una pequeña canción, quizá entre sueños pudiese escucharla, sentir su cariño y calmarse un poco. El viento soplaba suavemente, los pájaros cantaban como si acompañaran a segunda voz el tarareo de la mujer. - Mejorate mi vida...- se levanto para hacerse un espacio en la cama junto a el y acunarlo a su lado, quería protegerlo en todo momento, cuidarlo, sanarlo como el había hecho con ella. - ♪♪ Las flores de cerezo caen al amanecer, pero amanece también mi silueta acunando la tuya ♪♪ -
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Post by Rallis on Sept 6, 2017 3:17:15 GMT
Su corazon estaba lleno de dicha ante el sentir como era mecido, la vision de su madre humana arrullandolo de bebe llego a su mente entre los sueños, una hermosa sonrisa se mostro en sus labios ademas de las lagrimas de la tristeza por el recuerdo de lo que habia ocurrido con su amada madre humana.
-ma....mama...zzzz....-
Este se acomodaba en los brazos de Akane para abrir los ojos y mirarla aun mareado por las pociones de dolor, le mareaban un poco pero no habia ningun problema, el dolor no volveria durante unas horas escuchando la exquisita cancion que akane le estaba brindando como una verdadera madre haria.
-Hola...- Dijo sonriendole levemente agotado.
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