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Post by Corneille Black on Jul 15, 2017 6:42:24 GMT
La chica había cuidado entre aquellos grandes sacos que se usaban para guardar tierra e incluso comida aquellas flores que le habían pedido, pero no se dejen engañar, las flores estaban puestas con pequeñas ramas de tal manera que no se tocaran entre ellas. Si, aquel pedido había hecho que la delgada chica hiciera varios viajes, no era tan fuerte, aunque tener la habilidad de volar le había permitido tener algo de rapidez. Aunque no totalmente puesto que se la había pasado viajando recolectando aquellas flores, contándolas una y otra vez. Por suerte era inteligente y había reunido para evitar que alguna se dañara; 4600 Crisantemos blancas.
El lugar era nuevo para ella, el bosque de los susurros le daba una curiosidad pero estaba por una misión en ese lugar. Alzó la vista a aquél templo que debía adornar, simplemente se veía emocionada, no es como si fuera la primera vez que veía uno, pero era la primera vez que adornaría uno. Se sentó a tomar un pequeño descanso, aquellos viajes cuidando que nada se maltratara había sido cansado para sus cortas alas, además que el calor que hacía gracias a la cercanía con la ciudad le había hecho arremangar sus mangas largas. Quizá después de aquello viajaría al templo donde pertenecía. Aquél lugar frío le gustaría para su cuerpo que estaba acostumbrado.
Así sin más, sentada esperó a su cliente mientras checaba el estado de las flores. 
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Post by Shaytan Ruko on Jul 23, 2017 20:35:55 GMT
la tarde era caliente como siempre y no era mas pues por el solsticio el sol se encontraba en su mas fuerte punto que acompañado por la humedad de las lluvias la situación se volvía completamente insoportable. por desgracia el deber llamaba nuevamente con un encargo que había solicitado en su inexperiencia con las situaciones del templo y no era de mas sus extremaciones pues un evento tan importante debía ser tratado con la delicadeza que este enmarcaba. por suerte la señorita a la que llamo por su encargo parecía ser alguien lo suficientemente inocente como para no asustarse o quizá era por la inexperiencia ... o quizá por que ignoraba completamente de lo que se trataba. fuera como fuera, ya se le comenzaba a hacer tarde para su "cita de negocios".
con un paso firme y una mirada dirigida a la distancia se encamino hasta donde habían acordado su cita, y no fue hasta que diviso a la señorita que fue cuando se acerco con ella, no parecía mas que una flor rodeada por mas flores, todas blancas y frescas por su recién y aparente corte, al acercarse podía notar que ella ya llevaba un buen tiempo esperándola por lo que con un resoplo de sus fauces trato de anunciar su parecencia con ella -...- guardo silencio al verla ahí frente a el, sentada, con su cabeza agachada hacia las flores, estas eran tan bellas como el día que, para su suerte, comenzaba a nublarse hermosamente por nubes de lluvia que empezaban a tronar a la distancia -va a llover- solamente esas fueron las palabras que salieron de su boca.
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Post by Corneille Black on Jul 25, 2017 6:09:22 GMT
La chica dejaba que el viento le pegara en la cara, podía oler que en su nariz aquella tierra mojada a la lejanía, quizá debería entrar con aquél pedido tan grande pero tampoco podía ser mal educada entrando en un lugar donde no fue llamada antes a pasar. Hacía mucho tiempo que no estaba en un templo, es más nunca había estado en uno, en su familia no se acostumbraba realmente a agradecerles a los viejos espíritus o deidades que se creyeran. Simplemente estaban en una posición tan alta que no tenían tiempo para pensar en algo más que el presente que tanto les importaba a ellos. Realmente eran seres arrogantes llenos de simple vanidad y sin ningún interés fuera de los propios, no sabía como la delgada chica pudo aguantar tantos años dentro de sus aposentos, en todo caso se había acostumbrado a una muy mala vida.
Así fue como por suerte del destino o tal vez porque ya era otra que llegara, escuchó una voz que la hizo saltar levemente del susto, estaba realmente concentrada pensando que cuando el silencio del bosque fue interrumpido le provocó aquella reacción. Se levantó torpemente mientras hacía una pequeña reverencia. Esta vez no portaba con aquella capucha encima suya, puesto que el calor del viaje no le había permitido tal comodidad. -S-si, parece que una tormenta se acerca- Comentó siguiendo el pequeño hilo de conversación que había iniciado este- Soy Corneille Black, hablamos por la tableta ¿Es ud Shaytan, verdad? -Una nerviosa sonrisa se formó entre sus labios, realmente las presentaciones no se les daban muy bien -Si es así, aquí están los 4,500 crisantemos que me pidió, traje un poco más pero por si alguna no sobrevivía al viaje- Dijo mostrando aquellos grandes sacos llenos de flores. La voz dulce pero nerviosa de la chica era un poco baja, pero ser del todo un susurro como se podría imaginar.
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Post by Shaytan Ruko on Jul 25, 2017 20:25:59 GMT
Eran curiosas para su mirada las graciosas reverencias de aquella señorita, su cuerpo así como su rostro le parecían tan fragiles como los de una niña así que no duro mucho en imaginar el como es que había de haber batallado para poder cargar semejante cantidad con ella, ademas para también haber llegado hasta semejante lugar puesto que no seria un lugar fácil de acceder. sea como fuerte ahí se encontraban los dos finalmente, eso pensaba el. Al escuchar la voz de la señorita, solamente arqueo una de sus cejas y con cierta seriedad notoria de el volteo a ver a la señorita que entre su contoneo y dulce gracia nerviosa se presentaba, solamente dejo pasar un momento para que la ajena se pudiera poner en compostura ante el y suspirando de forma calmada inflo su pecho para al exhalar solamente saliera una voz grave y calmada -así es ...- ligeramente inclino su cabeza haciendo que algunos mechones de cabello cayeran sobre su rostro -yo he llamado por usted- termino arremetiendo solamente volteando al horizonte, mirando como era que el cielo se ennegresia y rayos comenzaban a asomarse. Con desgana volvió a mirar a la señorita y frunciendo un poco el ceño soltó un suspiro -lo mejor sera resguardarse- dirigió ahora su mirada a los costales de flores que ahora se mostraban frágiles por los vientos, si se humedecían y se arriesgaban a la lluvia de nada le serviría, cosa que no le convenía pues las situaciones para las que las necesitaba serian de gran magnitud -lo mejor sera resguardarse- se coloco rápidamente sobre una de sus rodillas y miro a la señorita pero ahora a una altura en la que ambos se podían mirar de ojos a ojos -si lo desea puedo ayudar a cargar sus bolsas- exclamo para finalmente extender sus brazos a manera de que pudiera recibir aquellos costales tan importantes para ambos.  |
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Post by Corneille Black on Jul 28, 2017 21:51:10 GMT
Lo miró fijamente era realmente curioso su voz tan grave, hacía mucho que no escuchaba uno así, notó como era de pocas palabras, un tanto directo pero el conocer el todo tipo de gente era lo maravilloso de aquella isla, conocer a cada tipo de arcanos y tratarlos, al final esperaba tener una buena tarde incluso sin necesitar tanto del clima, puesto que sabía que adornaría un lugar techado.
Las orbes oscuras de la chica miraron el cielo notando aquellos cambios bruscos, preocupada dirigió su mirada hacia las flores que podrían estropearse con aquella tormenta que se aproximaba, en particular ella se sentía asustada puesto que las tormentas no eran su mayor gusto, realmente le temían y no les gustaban para nada. Notó como el contrario le instruía ponerse en el refugio antes de que aquella tormenta llegara a aquel encargo, asintió torpemente mientras notaba como este le brindaba la ayuda para llevar el encargo. Sonrió levemente mientras tomaba una de las bolsas y empezaba a caminar -Le agradeceré profundamente su ayuda, mi fuerza no es mucha -Comentaba mientras arrastraba aquella bolsa llena de flores con una leve ayuda de sus alas mientras aleteaba.
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Post by Shaytan Ruko on Jul 29, 2017 22:39:49 GMT
Al mirar nuevamente a aquella señorita fue un sentimiento de risa el que le causo al ver que ella no se encontraba en total comodidad por la lluvia que se avecinaba, si bien era cierto que la tormeta se veia fuerte, el sabia que nada malo pasaría, al menos no por esas causas. por lo que solo se limito a contestar un un sonido de su garganta al escuchar las gratitudes de la señorita por la ayuda. -mmmh-
Fue algo escabroso el camino que tuvieron que dirigir para poder llegar al templo pues este no se encontraba en una condición de "nuevo", era curioso este pues no era precisamente bien cuidado pero innegablemente contaba de una belleza que atraía a este. al llegar finalmente a lo que seria la entrada principal a este, se dirigió y aplicando algo de fuerza abrió las puertas que solamente tronaron secamente al abrirlas -por aquí- exclamo firmemente mientras se adentraba esperando a que la otra le siguiera los pasos.
Al final solamente bajo algunos de los costales que le habían dado a el y los dejo con cuidado en un rincón de lo que seria el salón/habitación donde se encontraban -si ... si necesita puede poner las flores en el piso- dijo mientras finalmente se dirigía a la parte en donde se suponía el debía sentarse -para que no se maltraten- exclamo finalmente mientras se sentaba en una de las partes principales del salón. solamente esperaba a que la señorita se acomodara como debería de ser, parecía tener algo importante que decir le.
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Post by Corneille Black on Aug 14, 2017 20:45:50 GMT
Quizá fue un corto viaje para su cliente, pero para ella fue difícil, a pesar de todo agradecía por mucho la ayuda que este le brindaba, en su tierra la hubieran reprendido por aquello, un cliente no debe molestarse en ayudar a un servidor puesto que siempre se buscaba la comodidad de este. Muy en su interior estaba aliviada que aquél se comportara de esa manera.
No podía mentir el que aquella tormenta se aproximara le colocaba los cabellos de punta, odiaba las tormentas, malas memorias hacían temblar su cuerpo ya era una costumbre un mal hábito que estaba marcado en su piel. En cuanto entró al templo sus ojos no pudieron evitar sentirse curiosos alrededor nunca había entrado a uno, claro que todo ese escenario era algo nuevo para ella. Suspiró un poco tranquila por estar en un lugar techado, como reflejo miró cada una de las flores que al parecer estaban en perfecto estado.
Sus grandes orbes negros miraron al que le había solicitado el servicio, notó como este esperara que hablara, estaba acostumbrada a las ordenes por lo que un pequeño silencio se hizo presente. Junto sus pequeños pies al igual que sus alas recuperando el aliento y la formalidad que antes había perdido. Cuando sus pequeños y carnosos labios al fin se separaron de nuevo su voz tímida salió -¿Me puede indicar hasta donde adornaré el templo? -
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Post by Shaytan Ruko on Aug 24, 2017 21:45:33 GMT
y ahí se encontraban cara a cara uno con el otro, su rostro tosco miro con frialdad a la jovencita aun que no era por su presencia sin duda, era por que la razón por la cual la había llevado hasta aquellos paramos no era una a la cual cualquiera quisiera ir aun que claro, si era una profesional como aclamaba serlo, esto no seria cosa difícil para ella. solo le quedaba suponer mientras la verdadera respuesta seria entregada después.
-señorita- exclamo mientras le miraba aun que después su mirada la se dirigió hacia abajo a un pequeño pétalo que cayo para luego ser revoloteado por el viento tormentoso. le tomo y comenzó a mirar lo con detenimiento - la razón por la que he solicitado sus servicios es por que se aproxima una celebración fúnebre- un rayo repentinamente ilumino todo para después volver a la penumbra -y necesito que adorne desde la entrada a la sala fúnebre donde se encuentra el cuerpo- soltó aquel pétalo que de forma tan delicada salio huyendo con el viento hacia el exterior
-y me gustaría pedir especial detalle con ... la sala fúnebre- de su frente se notaba un fuerte seño, como si algo le estuviese atormentando por dentro -la muerte de la joven ... no fue del todo buena y queremos ... alivianar la carga emocional de los padres de ella-
occ: perdona por tardar he tenido mucho trabajo ultimamente :(
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Post by Corneille Black on Sept 4, 2017 5:05:09 GMT
Aquella seriedad del contrario le hizo callarse y escucharlo atentamente, entendía pero no pudo editar ponerse levemente nerviosa por ello el contrario le hacía dudar de sus habilidades con aquella frialdad cortante, no era como si fuera culpa del contrario pero le recordaba mucho a su hogar por cuestiones de costumbre su cuerpo reaccionaba de esa forma su corazón se aceleraba y sus movimientos se volvían torpes. Además tenía aquella tormenta detrás que iluminaba ese templo como si fuera un libro de terror enfocado solo asustar, las alas pequeñas de la Arpía temblaban pegándose a su dueña, no tenían que buscar refugio pero eran hábitos ya estaba acostumbrada y aunque quisiera no lo pudiera detener.
A pesar de toda esa situación la más pequeña asintió ante las aclaraciones mientras miraba el lugar, tenía razón debía darle una vida agradable al espíritu de la chica, no quería preguntar el porque la aflicción del contrario por educación así que su vista bajó mirando aquél pétalo que salía del lugar, desearía atraparlo pero ya era muy tarde, la lluvia rugía con el eco del lugar, los truenos iluminaban su perfil, ¿El cielo estaba triste por aquella perdida? O ¿Estaba enojado con la causa de la muerte? No podía averiguar más allá no le correspondía aquello. Al acabar la habla del chico asintió con cuidado mientras se dirigía hacia sus costales llenos de flores -Empezaré con la sala si no le molesta, es en el lugar donde tardaré más -Le comentó tímidamente mientras lo miraba fijamente como si esperaba que este no la reprendiera.
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