Deleted
Deleted Member
Posts: 0
|
Post by Deleted on Jul 26, 2017 1:03:37 GMT
Kouhei se había separado por un momento de su pareja en el festival. Mientras que Rallis estaba distraído hablando con unos amigos, el kitsune aprovechó que su amor tenía quienes cuidaran de él por un rato para ir a acomodarse su cabello y su kimono, ya que quedó algo desarreglado por la gran cantidad de gente bailando que chocó contra él. Pobre.
Buscaba un lugar no muy lejano de su querido arconte para poder arreglarse. Por suerte se topó con una tienda de espejos, así que sólo fue cuestión de pararse frente a la vitrina y mirar hacia los lados para asegurarse que nadie lo estuviera viendo. No había que hacer la gran cosa: sólo se peinó un poco, acomodó su adorno para el cabello y se aflojó la cuerda de su kimono para volverla a ajustar, aunque también intentó acercase lo más que pudo a uno de los espejos a través del vidrio para retocarse su maquillaje. Estuvo listo lo más rápido posible, para mirarse soltando una sonrisa tierna en el espejo más grande, satisfecho con el resultado y listo para devolverse. En realidad no había ningún tipo de prisa. Kou quería poder regresar justo después de que los amigos de su amado se fueran. No por maldad ni nada, solamente tenía mucha pena como para acercarse a compartir con ellos.
|
|
|
Post by Akane Enomoto on Jul 26, 2017 2:58:02 GMT
Akane por un momento no penso asistir a tan enorme festividad, apenas había logrado recuperarse casi por completo de sus heridas mas graves (las cuales le dejaron unas cicatrices que estarían atormentándole de por vida). Pero recordando que era algo que solo pasaba una vez cada tanto se armo de coraje, reviso su closet hasta encontrar el único vestido que tenia: negro en el escote y el chifon colorido adornaba la falda del mismo, se coloco unas sandalias del mismo color que el escote y peno reiteradas veces su cabello, recogiéndolo en una cola baja con una liga que encontró en su tocador. Viéndose a si misma en el espejo y orgullosa del resultado salió, mientras hacia aquello amarro en su muñeca izquierda un listón amarillo. Estaba nerviosa...lo único que quería era ver a alguien conocido para que pudiese aunque sea bailar un poco...o pasarla bien.
Cerca del baile en la ciudadela, la oni se topo con lo que parecía ser una peculiar tienda con muchos espejos en exhibición, se acerco a la vitrina para ver si su maquillaje y vestido estaban bien, asintiendo con felicidad viendo todo en orden volteo para caminar al baile, cuando a su diestra encuentra un pequeño quien estaba acicalándose, a lo lejos logro divisar a su pequeño Rallis: se veía tan hermoso con el traje que le había conseguido. Tragando saliva, toco el hombro del albino quien terminaba de maquillarse: -Hola!- dijo de manera animada la mujer para inclinarse un poco para saludarlo -¿también te alistas para bailar?...¿o esperas a tu pareja como yo?...- al decir lo segundo ella rió por lo bajo...de hecho, nadie le había invitado al baile así que quiza seria una coincidencia encontrar a algún conocido (aparte de su hijo, claro) en el baile.
|
|
Deleted
Deleted Member
Posts: 0
|
Post by Deleted on Jul 26, 2017 3:37:29 GMT
El zorro todavía no había notado la prescencia de aquella persona que se le había acercado. Estaba muy feliz viéndose al espejo, cuando aquel toque en el hombro lo hizo brincar del susto. Volteó rápidamente para encontrarse con una chica muy linda de cabello largo y plateado. Esta vez no traía su caja, así que no tenía nada para esconderse de ella, no tuvo más opción que tratar de calmarse. -H-hola- dijo con un tono de voz leve a la vez que se sonrojaba. Además de saludarlo, le había hecho un par de preguntas. El kitsune quería que no se hiciera una conversación, pero ya era muy tarde, ahora le toca pasar un rato de pena. -D-de hecho yo... E-estoy tomando un descanso de bailar con mi pareja- habló mientras buscaba entre la multitud para señalar el lugar en donde se encontraba Rallis. -C-creí que se notaba lo suficiente...- dijo llevándose una mano hacia la cinta roja que había amarrado a su cuello a la vez que desviaba la mirada con las mejillas coloradas. Temía que tuviera que rechazar a una chica que tal vez había conseguido atractivo en él.
|
|
|
Post by Akane Enomoto on Jul 28, 2017 3:43:58 GMT
Le pareció bastante tierno de parte del pequeño su reacción, se veía bastante tímido ante su presencia por lo que ella decidió inclinarse de nuevo -Disculpame si te he incomodado, no era mi intensión- la amable mujer se despejo un mechón de sus cabellos del rostro, para jugar un poco con el. -Owww!, que tierno...yo también vengo a bailar con alguien, pero parece que esa persona aun no ha llegado...asi que supongo que le esperare- pensando en su invitada, sus ojos pasaron de ver al suelo a posarse sobre quien le señalaba el kitsune...dio un respingo al descubrir que era nada menos que su hijo Rallis. -¿Estas bailando con Rallis?....oh, que modales los mios- río por lo bajo -mil disculpas al no presentarme, mi nombre es Akane y...digamos que soy la madre adoptiva del pequeño Rallis- sonreía viendo al kitsune quien, posiblemente se habría de llevar una sorpresa de tan irónica coincidencia -me parece interesante lo pequeño que puede ser este mundo a veces- estaba orgullosa de su hijo, se veía charlando feliz a pesar de todas las cosas que hubiesen pasado...no quería ponerse sentimental pero, posiblemente lo hiciera.
|
|
Deleted
Deleted Member
Posts: 0
|
Post by Deleted on Jul 28, 2017 14:40:47 GMT
- A-ah! N-no te disculpes!- exclamó moviendo sus manos frente a él, al ver a la oni inclinándose con unas disculpas, al hacer eso ponía aún más nervioso al pobre kitsune. Kouhei se sonrojó tras escuchar las palabras de la chica, pero estaba algo preocupado de que su acompañante aún no llegara. Además parecía que Akane conocía a su pareja, y esto le sorprendió un poco. No se esperó conocer a una amig...ya va...La mamá de Rallis?!? Eso es aún más inesperado!. - P-por favor, no te disculpes! Y-y mi nombre es Kouhei, m-mucho gusto!- dijo haciendo una reverencia, bajando lo más que pudiera su rostro para ocultar lo nervioso que estaba. Ahora comenzaba a pensar en miles de cosas estando frente a su suegra. - (Ella estará de acuerdo con que sea hombre? Quizá aún no se ha dado cuenta? Aunque mi voz no es nada femenina, así que no sé... ;-; Rallis le habrá hablado de mí? Le habrá contado sobre... Sobre lo que le hice a Rallis en la cama?!? ;-; ojalá que esa costumbre que tiene de decir frente a todos y en todo momento lo que siente por mí no haya llegado tan lejos. Si le contó en detalle a su mamá lo que hicimos, me voy a morir. Ya asumo que me quedé sin visto bueno de la suegris ;-- estaba paranoico, aún manteniendo la reverencia, esperando que la oni le diera permiso para levantarse nuevamente.
|
|
|
Post by Akane Enomoto on Jul 29, 2017 1:47:07 GMT
- Esta bien- dijo cruzando sus manos para verle, su mirada era tranquila por lo que trataría con todo su ser de no incomodarle o apenarle mas de lo que ya estaba. Quiza...su movimiento de cartas había sido repentino, pero, desde hace tiempo tenia las ansias de conocer a la persona que se había ganado el corazón de Rallis. Analizo al pequeño kitsune, era un chico tímido, de muy buenos modales y ademas lindo. "Hmm...perfecto para mi niño" dijo riendo para si, salio de sus pensamientos para ver como el albino hacia una reverencia bajando su rostro, apenado pero mostrando respeto. -Un placer conocerte Kouhei- era un chico adorable - puedes levantarte de nuevo...no hay problema- ser tratada de esa manera le daba un poco de pena, pero debía mantener la compostura. - Por lo que he escuchado...se ve que mi niño te ve como una persona muy especial para el, y por lo que he visto en tus ojos al mostrármelo...note que correspondes sus sentimientos- había empezado a decir cursilerías pero no podía evitarlo: estaba conmovida. - Si te lo preguntas, para mi no hay problema alguno en que ustedes dos pequeños sean pareja, no importa el genero que tengas ni nada por el estilo...al contrario- dijo la mujer sacando un par de pulseras de cuentas rojas (ella misma las había hecho) de las cuales en el centro colgaba un pequeño cascabel plateado, extendió su mano para que el pequeño las tomara - toma esto...es la representación de mi bendición para ustedes dos y mis esperanzas de que confío en que le brindaras felicidad a el y el a ti -.
|
|
Deleted
Deleted Member
Posts: 0
|
Post by Deleted on Jul 29, 2017 3:53:19 GMT
Al kitsune le había dado un mini infarto cuando escuchó nuevamente la voz de la oni. Pensó que lo regañaría o algo (aunque no había razón para que lo hiciera), pero por suerte sólo estaba feliz de conocerlo y quería que se leventara de nuevo. -G-gracias, el placer es mío- dijo a la vez que se enderezaba y peinaba un poco su cabello con la mano. -Y s-sí, estoy consciente de ello- dijo sonrojándose y sonriendo con timidez -Todos los días m-me lo recuerda, y me hace muy feliz. Claro que yo también lo amo- expresó volteando a ver al lugar en donde estaba su amado, soltando un suspiro de ternura.
Rápidamente volteó a ver a la chica cuando una de sus mayores dudas fue aclarada. -No sabe cuánto me alivia escuchar eso- habló llevándose una mano detrás del cuello a medida que se ruborizaba.
Ahora Akane le entregaba unas hermosas pulseras hechas a mano, cosa que el zorro apreciaba mucho por ser un artesano. Las tomó con algo de pena para observarlas con detenimiento. Él amaba los cascabeles, así que decidió colocarse la suya y agitar su muñeca para oír cómo sonaba. El regalo era muy bonito, pero su intención lo era aún más. Kou se conmovió lo suficiente para que le brotaran unas pocas lágrimas, que intentaría limpiar con cuidado para no arruinar su maquillaje. -Muchísimas gracias, e-en serio- hizo otra reverencia, aprovechando nuevamente la posición en la que estaba para ocultar las pequeñas lagrimitas que seguían saliendo. Él es muy sensible y sentimental.
|
|
|
Post by Akane Enomoto on Jul 31, 2017 2:22:44 GMT
La alegria que sentia en ese momento era indescriptible, como la madre de Rallis estaba orgullosa de que el hubiese conseguido a tan apuesto y noble muchacho como pareja, también las palabras de la Oni desbordaban amabilidad maternal. -La felicidad de ustedes es mi felicidad...y si están contentos el uno con el otro yo no pudiese pedir mas- suspiro también viendo como los ojos del kitsune fugazmente intercambiaban una mirada con el arconte para volver a encontrarse con los suyos. El rubor de las mejillas de Kouhei aumento con cada palabra que salía de sus labios.
Ahora la atención estaba centrada en las pulseras que le había regalado, se fijo en como el kitsune las tomaba con un poco de vergüenza pero con delicadeza, las observaba detenidamente y luego colocaba la que le correspondía en una de sus muñecas, agitandola para escuchar el tintineo del cascabel. Ver como reaccionaba de esa manera tan pura pero tan sentimental conmovió aun mas el corazón de la mujer, quien, también derramo unas cuantas lagrimas las cuales seco con el dorso de su mano. -No agradezcas, es por todo lo que has hecho por el...por lo que me ha contado sobre ti...- el momento tan bello que se presenciaba entre ellos dos era tal, que ambos ocultaron su rostro un momento para que no vieran como lloraban. -Quisiera que...protegieras a mi pequeño, el es para mi el sol que ilumina mi fragmentado ser...es alguien muy preciado para mi- recordó por un momento lo que había sucedido en las noches de luna roja, limpio de nuevo sus lagrimas y sonrío como si nada hubiese pasado.
|
|
Deleted
Deleted Member
Posts: 0
|
Post by Deleted on Jul 31, 2017 4:28:36 GMT
-Q-quiero que sepa que usted es una mamá maravillosa, y me aseguraré de hacerla tan feliz como a Rallis. No la defraudaré!- dijo sonriendo a la vez que luchaba con un puchero que quería escaparse.
Después de haber hecho aquella reverencia, volvió a levantarse cuando la oni comenzó a hablar nuevamente. -La verdad es que creo que Rallis ha hecho mucho más por mí. En mi primer día en Mirovia fue la primera persona que se me acercó. Me ofreció un lugar para quedarme y me regaló este hermosísimo abanico- dijo mostrando el objeto, poniéndolo contra el sol para que brillaran sus dibujos -Pero más importante que eso: Rallis me permitió que me enamorara por primera vez, me da mucha felicidad y cada día me da miles de razones para vivir- habló sonriente a medida que sus ojos se llenaban de lágrimas otra vez -Yo creo que le debo un montón a él- dijo secándose las lágrimas antes de que rodaran por sus mejillas. -Y claro que lo protegeré, también es muy importante para mí- la emotividad del momento lo impulsó a tomarle las manos de golpe a Akane, mirándola con cariño -Desde que se lastimó, no he hecho más nada aparte de cuidarlo: le cambio los vendajes, le acomodo el yeso, le compro sus medicinas para el dolor y-y le doy muchísimo amor!- sus ojos volvieron a aguarse cuando, por un momento, recordó lo duro que había sido aquel incidente y la enorme angustia por la que habían pasado.
|
|
|
Post by Akane Enomoto on Aug 2, 2017 23:39:51 GMT
-No sabes lo feliz que acabas de hacerme con tan dulces palabras Kouhei...se que no me defraudaras- sonrío junto a el mientras acomodaba un mechón de sus cabellos tras su oreja. El pequeño kitsune hablaba y por cada cosa que salieran de sus labios la mujer ya no recordaba tanto los incidentes de la luna roja, era como si la pesadez de su corazón fuera liberándose gracias a el. -Que detalle tan hermoso...entiendo que ser nuevo puede generar varios conflictos, pero que el te haya recibido con los brazos abiertos ciertamente es algo memorable...- solto una risita recordando lo cariñoso que era el arconte e imagino como hubiese sido su primer encuentro -Quizá yo aun no sepa la dicha que comparten sobre enamorarse...pero te dire que nunca abandones esas ganas de vivir que el te brinda...atesoralas que han de ser lo mas bello que podamos imaginar- las lagrimas se formaban de nuevo en sus ojos bicolor -Entiendo...- se sorprendió al sentir sus manos siendo tomadas por las de Kouhei, su mirada era compasiva y cariñosa, por lo que no pudo evitar seguir derramando algunas lagrimas. -No se si ya te habrás dado cuenta pero...la crueldad del destino me ha hecho sufrir con mi raza....- pauso para tragar saliva -ser un ser de oscuridad no es sencillo...a veces...perdemos el control por cosas por las cuales no podemos evitar como...la luna roja...- su mirada se torno melancólica, las lagrimas salían a borbotones y ella apretó un poco sus manos entre las del kitsune -fue muy duro...pero...debo confesarte que ese astro me hizo cometer las atrocidades que marcaron el cuerpo de Rallis...yo....hice lo que pude en cuerpo y alma pero....- la mujer cayo de bruces al suelo sosteniendo todavía las manos del pequeño, de sus labios salia un lastimero llanto de tristeza y arrepentimiento -...pero yo amo a mi hijo...aunque sea un monstruo yo lo adoro mas que a mi propia vida....-
|
|
Deleted
Deleted Member
Posts: 0
|
Post by Deleted on Aug 3, 2017 4:22:14 GMT
-Y usted no sabe lo feliz que me hace haberla conocido y poder compartir con su hijo cada día. Me alegra tener su aprobación ante nuestra relación- dijo con una gran sonrisa de mejillas coloradas, riendo apenas un poco. -Si no fuera por Rallis, desde aquel día estaría durniendo sobre cualquier banca o árbol. Me vine a Mirovia sin nada y gracias a él he ganado muchas cosas- expresó suspirando, sumergiéndose por un momento es sus recuerdos. -Claro que no lo haré, toda las buenas energías que Rallis me transmite me impulsan e inspiran a hacer muchas cosas- dijo alegremente con lagrimones bajo sus ojos, pero estando también algo sorprendido de que la oni aún no haya encontrado el amor.
El momento con lágrimas de bellos sentimientos de pronto cambió cuando Akane confesó sobre sus acciones en la Luna Roja. Kouhei nunca se imaginó que una chica tan amable fuera la culpable de todo el dolor de Rallis y la angustia del kitsune que rozaba con una depresión. Cayó al suelo junto a ella. Sus ojos se tornaron opacos mientras veían a triste arcana lamentándose. No podía enojarse con alguien como ella, y mucho menos lastimarla por lo que le hizo a su amado arconte. En Kou brotaba un sentimiento aún más amargo que cuando consiguió a Rallis herido en el Templo del Verano, pues tenía a la causa de todo justo en sus narices, pero no había nada que se pudiera hacer para que el zorro drenara todas sus emociones sin dañar emocionalmente a Akane, quien ya se encontraba lo suficientemente atormentada por aquel incidente. Kouhei soltó sus manos y se quedó observándola mientras unas lágrimas de dolor se asomaban de sus ojos. No tenía las fuerzas para responderle, no se encontraba en capacidad para consolarla, y menos aún perdonarla en ese mismo instante. Sólo llevó sus manos a la cara, tratando de aguantar su llanto, que terminó saliendo junto a un sollozo de dolor. Había comenzado a llorar como un niño pequeño, frotándose los ojos, secándose las lágrimas desesperadamente, sin importar que su maquillaje se arruinara. Por un momento quizo retirar todas las cosas bonitas que le había dicho a la oni.
|
|
|
Post by Akane Enomoto on Aug 15, 2017 1:22:02 GMT
Sintio ese enorme nudo en su garganta, había confesado todo lo que había pasado de buenas primeras al chico a quien su hijo amaba, pero como solía decir su madre "era mejor que le dijera la dura verdad a adornar las cosas con bellas mentiras" y eso era lo que había hecho. El kitsune la había soltado, se veía en sus ojos el dolor latente que brotaba en su corazón, comparaba ambos momentos en donde ella estaba batallando para no morir por desangramiento, mientras su bello hijo era atendido por los amables cuidados de el, en cambio para ella después de "lograr curarse" se sentía cada vez peor: se sentía como un monstruo que luchaba contra su inevitable naturaleza. Escuchando como el albino lloraba cual infante, la mujer solo se limito a disculparse en un susurro casi inaudible, era impactante para ambos pero, al menos tenia la conciencia tranquila de que se había sacado un poco de ese peso que cargaba en sus espaldas. - Lo...siento...mucho...- quería limpiarle las lagrimas, maquillarlo de nuevo y jurarle que nunca actuaría de esa manera pero, las cosas no eran tan sencillas. Aprovechando que ambos estaban en el suelo, ella decidió levantarse y mostrarle como símbolo (al menos) lo arrepentida que se sentía: Lo miro a los ojos para después arrodillarse ante el, haciendo que sus manos y frente tocaran el suelo. Nunca había hecho algo así en su vida, pero siendo como era debía disculparse como debía, si fuesen otras épocas hubiera considerado el "harakiri", pero no seria una apropiada opción. Las lagrimas que seguían brotando de sus rojizos ojos formaban una especie de pequeño riachuelo que recorría el sucio suelo en donde se encontraba, apenas ella considerase adecuado abandonaría el lugar para dejar que el asimilase la situación... "Al menos ya sabe como me siento con respecto a lo que hice" penso la mujer quien mostraba arrepentimiento en sus gestos y su rostro.
|
|
Deleted
Deleted Member
Posts: 0
|
Post by Deleted on Aug 15, 2017 3:15:23 GMT
Se imaginó que tal vez su manera de llorar llamaría la atención de los que estaban cerca, por lo que evitó seguir dejando salir aquella voz que reflejaba todo su dolor, pero sus lágrimas aún seguían saliendo con la misma fuerza, secándolas con la manga de su kimono, manchándolo con el maquillaje que estaba ya completamente arruinado.
No era justo, venía de pasar un día hermoso en la primera cita con Rallis en este evento tan especial para ellos ¿Por qué tenía que suceder esto hoy?. Se sentía horrible, no sabía qué hacer para volver a estar feliz para cuando regrese al lado de su pareja para continuar divirtiéndose juntos en el festival. Era la primera vez que se sentía así de mal. Sufría tanto que pensaba que todo se trataba de un mal sueño, pero, lamentablemente, esta vez no despertaría en un lugar tranquilo y asalvo de todo mal. -Por lo menos tuviste el coraje para decirlo. Por ahora...es lo único que estoy apreciando de ti- dijo con un tono de voz apagado, apartando la mirada, volviendo a secar sus lágrimas.
La mujer se había arrodillado para pedir perdón. El kitsune conocía el peso enorme de sinceridad que llevaba aquel gesto, pero aún así no la perdonaría, por lo menos, no hoy y mucho menos encontrándose tan adolorido por aquel mal momento que regresaba de golpe a su memoria. -No te voy a perdonar así de fácil- decía con la voz quebrada por el llanto -Necesito pensarlo mucho, necesito una mejor explicación- bajaba la cabeza y se cubría el rostro con la manos, goteando más lágrimas entre el espacio de sus dedos. Sentirse incapaz de perdonar, era una de las cosas más horribles por las que podía pasar, ni siquiera podía disculparse él por no aportar a que este ambiente se mejorara, aún sabiendo que aquel incidente no había ocurrido a propósito
(ooc: tu post está 2 veces ":3 y omg...Harakiri?!? ;-; nuuuuu)
|
|
Rallis
Los Invictos
Luces y estrellas en los ojos de oro
Posts: 197
|
Post by Rallis on Aug 20, 2017 6:49:56 GMT
Rallis estaba mirando un puesto de golosinas japonesas, desconocía en si la totalidad de los caramelos que podrían gustarle a Kouhei, pero no descartaba la idea de llegar con unos deliciosos Mochis que el vendedor le habia sugerido. Sabia que a Kouhei le gustaba el dulce, para caminar por la ciudadela pues...¡Habia perdido de vista a su pareja! yacia consigo una bolsa con los caramelos cuando observo a una mujer de rodillas en el suelo a la lejania, entre cerro sus ojos un poco. "-¿acaso sera una dama que fue rechazada?...que triste...quiza un mochi le alegre su dolor...-" penso para caminar hacia la pareja notando que efectivamente sus ojos le habian engañado, eran su amado Kouhei y ¡¡¿Akane?!!, Rallis miro la escena, ambos lloraban, Rallis no pudo evitar acercarse con una rapidez que le era permitida por su herido cuerpo. -¿Kouhei?¿Mama?¿que esta ocurriendo?¿por que lloran?- pregunto confuso para acercarse a Akane en el suelo, con mucha dificultad agacharse y tratar de consolar a Akane, para mirar a Kouhei confundido, la verdad no sabia lo que ocurria para sobar la espalda de la Oni y decir. -¿Acaso han discutido?...Amor ella es Akane, mi madre adoptiva aqui en Mirovia...¿que es lo que a ocurrido aqui?...-
Queria respuestas, queria saber que pasaba, su corazon latia de nervios y eso se reflejaba en sus respiraciones pues se agito mucho y se quejo de la incomodidad de estar en esa posicion que podria dañar su salud mientras abrazaba la bolsa contra su pecho con el brazo que estaba enyesado.
|
|
|
Post by Akane Enomoto on Aug 24, 2017 4:58:46 GMT
La mujer se fue levantando a medida que el kitsune le hablaba, sentía aun una tristeza enorme mezclada con la desesperacion del momento, pero por lo menos pudo quitarse aquel peso de encima. "Necesitas una mejor explicación...pero no creo ser capaz de dártela yo...por ahora..." penso para limpiar con el dorso de su mano las lagrimas que habían arruinado su maquillaje, para después arreglarse como pudo el cabello. La gente aprecia darse cuenta por su llanto sobre la gravedad del asunto, apenas tuviese una oportunidad se despediría sin decir nada y huiría de ahí...o eso pensaba originalmente hasta que fue interrumpido su furtivo escape por nadie mas que su propio hijo (mas o menos). Le sorprendió la rapidez en la que llego, de como le sobaba la espalda para calmarla "es un buen niño...al menos...el es la única persona que hasta ahora ha sido leal...con su cariño" la mujer había tenido el corazón roto por un evento anterior, en el cual su amor no había podido ser correspondido, sumándole el peso de su confesión y los efectos en su "yerno" eran un coctel amargo para su mente. -Rallis...- debía mantener la calma...debia mantenerla ya que su luz, su todo estaba ahí con ella. Respiro profundo varias veces, exhalando en un largo suspiro, para después acercársele al oido al arconte para susurrarle:
- Le he dicho lo que paso en la semana de la luna roja...- pauso para aclarar su garganta -¿podrías pequeño mío....explicarle bien lo que paso?....tu madre no se encuentra bien...asi que supongo que nos veríamos en otro sitio- por fin había tomado el coraje para decirle como se sentía, y realmente no tenia el valor para ver a Kouhei a los ojos. Finalmente la mujer se inclino por ultima vez ante los pequeños presentes, para tomar su bolso y salir corriendo de ahí lo mas rápido que podía.
|
|