Ra Kai
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Post by Ra Kai on Jul 28, 2017 0:31:06 GMT
"Hace mucho tiempo que... no! no! no! no era momento para la nostalgia, se encontrada en una festividad y tenia que mostrar su mejor cara" se repetía a si mismo mientras caminaba por los alrededores con una sonrisa sincera. Ra estaba verdaderamente feliz de estar ahí, no era cuestión de compromiso o de deber, enserio le gustaba estar entre una multitud y mas cuando esta ahí por parte de un evento con tan buenas intenciones.
Aunque el sentimiento nostálgico era inevitable, no había estado en un festival como ese en sus viajes, era su primer año en mirovia y por lo general se encontraba trabajando pero ahora, por al menos ese día, era libre de ir y venir como el quisiese, no lo desaprovecharía. Lo que le encantaba ver eran las caras de las personas, no las recordaría al terminar el dia pero si era emocionante ver cuanta diversidad de razas, todos eran diferentes en todos sentidos, alturas, facciones y la ropa. Vaya que la mayoría se tomaron su tiempo en arreglarse de una manera especial para la ocupación, todos se veían formales, excepto alguno que otro...como el. El traje que usaba era parte de la tradición familiar...pero modificada. Su familia solía usar poca ropa, solo cubrían las partes importantes del cuerpo, el resto podía exhibirse sin ningún problema pero ra no era así. Desde joven inventaba cualquier pretexto para no salir con solo unos pantalones como su madre le exigía, 30 años tuvieron que pasar para que le dieran su libertad al vestir.
El joven fenix emanaba tanta confianza que ni las miradas que lo pudieran juzgar ni siquiera las palabras podrían dañar le ese día, la felicidad de su rostro no se desvanecería tan fácilmente. Quería que cualquier pensamiento negativo se desvaneciera ese día, sabia lo que podía pasar, sabia que no todo podría salir bien, que podía quedar abandonado y el listón naranja atado a su muñeca siempre se quedaría en su lugar por la eternidad. No era tiempo para pensar en eso, no quería pensar eso, no podía, los sentimientos negativos no podían existir hoy en su mente, ya mañana se ahogaría en alcohol si es que llegaba a darle la ocasión.
Su problema con el amor no había nacido hace unos días atrás, ni siquiera unos meses, ni cuando llego a la ciudad y una chica, sin conocerlo, le dijo que lo amara, ya tenia antecedentes de malas relaciones detrás de el, pero aun asi el estaba dispuesto a seguir intentando, tenia 250 años para seguir intentando.
Como en cada fiesta tenia que haber una mesa con comida y claro ahí era donde se dirigía, nada mas familiar que la comida, era como su amor incondicional, tu amas a la comida y esta nunca te dañara...tal vez te de algo de sobre peso, pero solo eso. Giraba por varias calles, lo único que lo dirigía era su olfato y esa era una pésima noticia, su raza no se caracterizaba por tener un olfato excelente. Caminando a ciegas llego al final del camino, con una sola idea en su mente.
-rayos...me perdí...- pero la idea mas importante aun -tengo hambre...- soltando un quejido pequeño para si mismo
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Post by Itzanami Aquetzali on Jul 28, 2017 0:33:05 GMT
A pesar de sus ideas optimistas y de todo el panorama que se había llegado a plantear para la aquel evento... absolutamente nada había ocurrido, por alguna extraña razón todo le había salido de una forma por completo diferente y no es que fuera totalmente malo todo aquello, simplemente sus ilusiones de llevar una fiesta medio normal comenzaban a perderse: El haber comido de más le generaba culpa a la hora de intentar comer otra cosa, el perseguir a un primo borracho, todos aquellos bochornos que le había causado este último y el no haber bailado con absolutamente nadie, no le hacía nada de gracia. Se encontraba cabizbaja y con una sonrisa desmotivada, observando a las parejas que felizmente danzaban de un lado a otro moviéndose sobre la pista, compartiendo un momento especial y quizá inolvidable en sus vidas, sonriéndose los unos a los otros con amor y confiando mutuamente en promesas a futuro.... y ella ¡? estaba de brazos cruzados , intentando cobijarse a si misma en un triste intento de no sentir celos… de no sentirse sola, de sentir que había fallado. - Déjalo, esto no es para ti – se había dicho un millón de veces ahora y en el pasado tratando de convencerse de que si dejaba esas ideas en algún punto se terminaría acostumbrando. Lo había intentado y había fallado de la peor manera posible, no solo una… dos veces. La tercera era la vencida pero ella no estaba lo suficientemente segura de querer arriesgarse y sufrir de nuevo. – Vale la pena?...de verdad lo vale? - No. No lo vale- se preguntaba y se respondía ella misma intentando reprimirse.
Este dialogo consigo misma le hizo sentir nostálgica, miserable e idiota, era hora de emprender retirada antes de seguir con esto: si escarbaba más profundo solo se lastimaría a ella misma. – Al menos… conocí personas y comí mucho – se decía mientras acariciaba un poco su barriguita- Menos mal que el vestido ayuda – pensó aliviada mientras caminaba hacía la salida. Su mirada se ilumino por completo y un sonrojo leve le cubrió el rostro - Eh… ese….ese es Ra? Hay por los dioses…- se cubrió la cara por un momento al sentirse abochornada. La persona por la que suspiraba todo el maldito tiempo, aquel chico el cual escribía su nombre de su puño y letra sin darse cuenta, aquella persona cuya sonrisa se le había grabado en la mente estaba solo a unos pasos. Sin poder actuar conscientemente, sin que la razón o aquellos sentimientos de pesimismo le dominaran fue caminando como boba hacía el casi sin darse cuenta – Ra!! Tenía tanto sin verte!! – le dijo con una sonrisa cálida en el rostro y tratando de impedir esas ansias de abrazarle con fuerza. |
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Post by Deleted on Jul 28, 2017 0:47:38 GMT
Rondaba por entre las multitudes, observando curiosa a los arcanos, tantos y tantos llegaban como si no fuesen a acabarse. Pues como no, la festividad estaba a punto de acabar, pocos días quedaban y lo más conveniente era festejarlo adecuadamente.
La pequeña nekomata miraba como ciertos arcanos bebian y comían alegremente, otros tantos bailaban y otros pocos sufrían o festejaban ante el amor que tanto añoraban. Las festividades eran tan parecidas a las humanas, pero con esa sutil diferencia de aspectos.
Era demasiada gente, Haize comenzaba a sentirse sofocada pese a estar acostumbrada a las multitudes, necesitaba aire. Sin pensárselo dos veces, la pequeña niña tomó su forma verdadera, una nekomata pequeña, portando como vestimenta únicamente su bufanda y su Erhu colgando en la espalda. Corrió y corrió a prisa por uno de los muchos árboles y trepó a un pequeño techo, el aire era refrescante y podia ver mucho mejor a las personas que caminaban por ahí.
"¡¿Por qué no lo había hecho antes?! Es más tranquilo andar así..."
Pensó con cierta alegría mientras andaba a 4 patas por los techos, observando a las personas. Hasta que una en particular le llamó la atención, un hombre joven que caminaba con los ojos cerrados. ¿Estaría jugando? Haize lo siguió con la mirada, atenta, pues le parecia curioso. No fue hasta que ese mismo joven abrió los ojos y se detuvo en seco, hablando sólo.
-...- La pequeña se acercó lo más que pudo desde uno de los techos y lo vio unos breves segundos, hasta que decidió hablarle - ¿Te has perdido? - Preguntó amable y gentil mientras lo miraba desde arriba. Un gato le estaba hablando a aquel joven. No pudo evitar soltar una leve risilla al terminar de hablar por imaginarse lo extraño que debía ser esa escena para los ajenos.
Pero antes de poder recibir respuesta, una voz femenina a hizo escuchar, gritando un nombre con euforia y alegría. Giró su rostro, notando a la bella dama y luego regresó su vista al hombre a quien recién le había hablado. - ¡Tal parece que alguien te encontró! - Comentó con alegría mientras los miraba reunirse, curiosa por ver como se juntaban, ¿Serían amigos? |
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Ra Kai
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Post by Ra Kai on Aug 3, 2017 3:10:13 GMT
Seguia perdido dentro en la parte mas profunda de sus pensamientos, el sonido de su estomago era lo que mas le robaba su atencion, no se percato de inmediato por la pequeña vocesita que le llamaba desde lo alto de un tejado. ¿acaso ese era un gato? un gato... con una bufanda y una.. ¿guitarra?*. La miraba atónito, era tan pequeña, ademas que le estaba hablando, le recordaba a los gatos bebés que aveces se encontraba en la ciudadela. El instinto le gano y estiro una de sus manos para tocarla, pero obviamente el tejado estaba mas lejos de lo que pensaba.
Sonrió amigablemente en dirección a la nekomata, ofreciendo su mano para saludar -¡Hola! mi nombre e--- la respuesta quedo cortada mientras escuchaba los pasos torpes de una joven acercándose, ademas de su voz chillante, como poder olvidar esa clase de persona, no podía. Su mano se mantuvo arriba y su cabeza giro levemente en dirección a su costado para verificar que era a quien el había conocido antes "efectivamente, esa es itza". La sonrisa aun no abandonaba su rostro mientras giro su cuerpo para quedar frente de la sirena y bajar su mano con un giro rápido, deteniendo su brazo frente de ella para ofrecerle el amistoso saludo de igual manera -¡tiempo sin verte!! ¡te ves diferente! ¿es por el vestido? ¡si! ¡debe ser el vestido! ¡te vez muy bien!- tratándola con la amabilidad con la cual era característico espero su respuesta con paciencia. Llevaba un tiempo fuera pero jamas olvidaría a la gente había conocido, encontrar a un amigo se sentía como un salva vidas dentro de un mar de desconocidos. Sus ojos miraron a su muñeca y no pudo evitar preguntar-¿que has hecho? ¿viniste al baile porque te invitaron? ¿tienes pareja?-
Giro la cabeza al tejado una ultima vez, viendo a la adorable criatura con adorable tono de voz. No tenia otra palabra en su vocabulario para describirla, sus facciones la hacían resaltar mucho de otros gatos - ¡Ella es mi amiga! ¡Su nombre es Itza....nami! ¡itzanami! ¡y yo soy ra! ¡mucho gusto!- saludo hacia arriba, ignorando todo el escándalo que pudiera estar causando. El hombre pájaro no sabia que era actuar con un perfil bajo, siempre alzando la voz, moviendo las plumas, haciendo diversas expresiones usando las manos, era todo un caso. No seria raro que la gente al rededor se le quedara viendo
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Post by Itzanami Aquetzali on Aug 13, 2017 0:05:28 GMT
- E…el vestido? – exclamo extrañada para después voltear a ver sus ropas, es verdad que no llevaba su ropas normales, las de su tierra, llevaba algo más al estilo de Mirovia. – OH! Este vestido… - dijo señalando la prenda que tenía puesta, no sabía dónde meterse en ese momento, y no podía creer que fuese posible que se le haya olvidado algo tan importante como la ropa que llevaba encima solo por ver a un muchacho. Se dio un pequeño zape sin mucha fuerza – Lo siento… soy torpe, mi… mi primo lo escogió para mí- sonrió como idiota mientras se encontraba totalmente sonrojada, de todas las personas con las que podía ser una estúpida… POR QUÉ CON ÉL?! . Su voz era tan malditamente embriagante, amaba su voz, amaba como se veía como se expresaba, esa maldita sonrisa… no podía con ella. Se perdió por unos segundos y su voz la trajo de regreso - ¿que has hecho? ¿viniste al baile porque te invitaron? ¿tienes pareja?- Eran demasiadas preguntas… Cuando se había invertido el papel? La investigadora/académica era ella. Se recargo un poco en la pared y sonrío bastante apenada – Bueno… he estado haciendo investigaciones, desde que deje de verte me ha pasado de todo, incluso tuve un accidente – levanto un poquito la falda del vestido para dejar de ver algunas marcas aun visibles en sus piernas, eran como grietas – Duele, pero voy a vivir – pauso por un momento, las otras preguntas eran sencillas de responder pero las últimas …por los dioses – Ah … pues, vine con mi primo y me reuniré con algunos colegas en estos días… y pa..pareja? - rio bastante nerviosa mientras lo veía, en ese momento deseaba haberse muerto en los plantíos esa noche de luna roja- No… no tengo pareja. (Ojala fueras tu) – pensó para sus adentros.- Tu…tu tienes pareja?...umm pero más importante- dijo recobrando su postura normal y más segura para terminar recargando su espalda contra la pared, la curiosidad en ella podía más que todo – Dónde te metiste?...nadie había sabido de ti en … meses? –le pregunto confundida, esperando una respuesta que fuese realmente convincente. Volteó sorprendía a donde se encontraba la otra criaturita, era un gato, le recordaba a su amigo Niku por alguna razón pero este era un gatito pequeño. Le provoco un montón de risa ver a Ra tan animado como siempre, armando un alboroto por nada, moviéndose de un lado a otro y siendo tan activo. Se le quedo viendo en silencio, contemplando todo eso quería guardar el momento. Era tan guapo, era tan bueno, tan animado, nadie lo merecía...pero él merecía ser feliz. – Él es así… es tu persona favorita y lo adoras.- se dijo a si misma en sus pensamientos, dejando atrás aquellas nubes negras que tanto le abrumaban. Le sonrió al pequeño Nekomata y alzo la cabeza para verle – Así es… me llamo Itza , y este patas de pollo es Ra - dijo sacándole la lengua al chico a manera de juego- Por qué no bajas un momento? Para platicar. – le pregunto a la pequeña gatita, se le veía tan linda!.
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