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Post by aishling on May 13, 2017 3:46:41 GMT
-entendido fue lo único que dijo para salir corriendo a hacia la habitación de haru ,también se sentía molesto por como le hablo ,acaso no conocía modales la intrusa ,calmándose en su recorrido por los pasillos contaba hasta diez ya que no quería hacerse un coraje y ser una molestia ,ya encontrándose con el cuarto de la susodicha ,le había emocionado entrar ya que nunca en su vida lo había hecho ,sacudió un poco su cabeza no era el momento para tontear como siempre lo haces ,acercándose al cajón indicado por la pelimorada abrió el segundo cajón para sacar de este lo que parecía ser una cuerda muy larga y gruesa o tal vez sea algo para amarrar a la chica para que no escapara con facilidad ,cerrando el cajón con cuidado saliendo de la habitación cerrando la puerta tras de si comenzando su carrera hacia el calabozo con el encargo ,no quería defraudar a haru por alguna razón sin importancia.
bajo las escaleras a punta de brincos pudiendo observar como haru y akane cuidaban de las rejas ,acercándose jadeante de la larga carrera para entregarle en mano a haru aquella cosa que necesitaba -a...aquí ...esta
dijo entre un pequeño bofe llevándose ambas manos a sus rodillas esperando a regularizar su pulso y su respiración,tiñendo su pálido rostro de un carmesí por la carrera descansando por al menos un momento y así volver a regresar a limpiar de la biblioteca
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Post by Deleted on May 13, 2017 13:49:34 GMT
Estando en su forma fated estaba recostado en su lugar, al fondo del calabozo cuando sacude su oreja de león y cabra, había escuchado algo de ruido provenir de arriba de las escaleras, un golpeteo y el arrastre de un cuerpo o una cosa, estaba acostumbrado a oír y sentir al andar de cada uno de sus compañeros, por lo que sabía que esto no era un evento común. Es entonces que se da cuenta que habían entrado a lo que él consideraba su terreno, como una de sus tareas era cuidar el calabozo, tanto de quien entra como de quien sale, tanta conmoción le hacía despertar y salir de la penumbra.
-"¿Qué provocaría que bajasen a los calabazos haciendo tanto ruido?"- pensó para si Xhime, su cola de serpiente se mostraba inquieta y analizando las vibraciones, al ver de lejos y entre sombras que eran sus compañeras, se acerca en su forma sellada.
-"Señoritas, -hace reverencia en su traje de butler-, "¿Es a caso este ser quién las ha interrumpido de sus cotidianas labores...?"- Observa como la habían arrojado con desprecio a la fauno dentro del calabozo 12. "Es un invitado no deseado y por su cambio en apariencia puedo dictaminar que torturarla es lo que desean, podría sugerirles que dependiendo de la gravidez de su pecado sea el castigo, todo acto contra nosotros o nuestro señor no debe queda impune, pero siempre esta el adormecerla con un poco con alcohol y otras hierbas para clavarle astillas debajo de las uñas o patas...."-esboza una sonrisa que es más que tenebrosa es de satisfacción por su idea escabrosa-."Oh, -exclama- ha llegado el joven ya listo para comenzar con el evento...-señalando con la palma extendida a Aishling quien venía casi desfalleciendo- excelente aportación...veo que tienes gustos definidos...-comenta con tono entre sarcástico y complacido al ver la cuerda entre las manos del muchacho, la toma y se acerca a la fauno y le toma la mandíbula-...eres...despreciable si las hiciste enfadar... ellas no se andan con rodeos niña.... -la amarra con bastante fuerza-... espero que se diviertan mucho contigo -le susurra al oído esto último-.
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Post by Laiah Todorovic on May 13, 2017 19:52:42 GMT
Ambas chicas me tenían sostenida entre ambas, realmente me estaba empezando a asustar pues esto se estaba poniendo cada vez peor, La dragona ordeno al pequeño niño foca que fuera a buscar algo a su habitación. Me llevaron hacía los calabozos, se encontraba más oscuro de lo normal y se veía bastante mugriento, era como si no le prestaran mucha atención al lugar más profundo del gran castillo Velfast. Ambas chicas me pusieron en la celda. Esta estaba bastante sucia, tenía algunas telarañas y se podían ver como los pequeños insectos caminaban por el frío piso de concreto. Se quedaron aguardando afuera de la celda, eso arruinaba mis planes para poder escapar de aquel lugar. Me estaba comenzando a asustar, ambas se veían bastante molestas y comenzaba a desesperarme un poco.
Cuando aquel niño foca bajo hasta donde nos encontrábamos los tres, venía con una especie de cuerda, o látigo. Pero como cereza del pastel llego otra persona, era una especie de Quimera, hablaba y lucía bastante elegante por lo que supuse que trabajaba como sirviente también, ya me encontraba en demasiados problemas, y por primera vez en mi jodida existencia me ahorre las palabras, porque era consciente de todo lo que había hecho, pero siempre me daba cuenta después de que ya tenía todo en mi contra. Aún permanecía en silencio o eso hasta que la Quimera me hablo arrogantemente, en mi cara, no pude contener la rabia así que exclame -" Mira, ya me basta con la dragona con problemas de agresividad, la Oni con transtorno Bipolar y el niño foca que parece sirviente de los sirvientes, para que vengas tu y me hables de esa manera "- Estaba bastante molesta, no toleraba que la gente me hablara así. Aquella Quimera me amarró fuertemente con aquel látigo para después susurrarme al oído sobre como esperaba que se divirtieran conmigo, eso me asustaba aún más y comenzaba a cuestionarme si de verdad saldría ilesa de aquel castillo. -" Bueno, ahora que? ya me tienen encerrada, y si es necesario pagare la puerta, pero esto no es la habitación de la reina, y aunque acostumbre a dormir en las afueras, esto es denigrante "- Ya me encontraba un poco más calmada pero aún tenía miedo de lo que podían hacer esos desquiciados sirvientes.
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Post by Deleted on May 15, 2017 22:53:22 GMT
La dragona ignoró completamente lo que pasaba a su alrededor por un momento y se centró únicamente en esperar al pequeño, pensando detalladamente en qué iba a hacer una vez tuviera su látigo con ella. Ahora que lo recordaba, había pasado muchísimo tiempo desde que no utilizaba aquel instrumento, el cual solía utilizar bastante en sus tiempos fuera de Mirovia. [¿Eso es una cuerda para saltar? Es muy rara... ¡Igual quiero jugar con ella!] Fueron unas palabras que inconscientemente vinieron a la mente de Haru, lo cual la hizo sonreír inocentemente por un momento. Pero esa sonrisa se tornó en una mueca sombría y satisfecha al mirar una pequeña silueta se acercaba corriendo desde las escaleras. Llegó.
Aishling había traído su encargo bastante rápido, lo cual sin duda alegró a la pelimorada, la cual extendió su mano hacia él para recibir el látigo y por fin poder comenzar con el show. Sin embargo, cuando menos se lo esperaba una voz poco común llegó a sus oídos, la cual la hizo voltear de manera desinteresada sólo para ver a Xhime, el cual al parecer también se quería unir a ellos para castigar a la Fauno. [Qué molestia...] Pensó Haru en sus adentros, ya que a ella realmente no le gustaba compartir a sus presas, mucho menos si era alguien que la había ofendido y molestado de esa manera. Apenas iba a decir algo al respecto cuando Xhime tomó el látigo de las manos de Aishling y se dispuso a amarrar a Nevraska con el, lo cual hizo que sin duda se enfadara más de lo que ya estaba. ¿Cómo era tan ciego como para no ver que era un látigo? Y no un látigo común, sino SU látigo. - Xhime... En serio que eres un idiota. - Murmuró de manera totalmente descontenta y se adentró a la celda, apartándolo y desamarrando a Nevraska para tomar su látigo. - Aunque no te culpo... Si yo tuviera que permanecer todo el tiempo aquí abajo con éstas escorias quizá también se me hubieran dañado las neuronas. ¿Por qué no te tomas un descanso? Quizá así te recuperas un poco... Yo me encargaré de ésto a partir de aquí. -
Después de decir aquello fijó su mirada en la fauno, a la cual se acercó y tomó el cuello descuidadamente para así llevarla hacia el fondo de la celda, donde al llegar la aprisionó con un par de grilletes y cadenas que salían de la pared asegurándose de que no pudiera moverse libremente al momento de soltarla, lo cual hizo cuando verificó de que los grilletes estaban bien cerrados. Luego se concentró totalmente en su látigo, el cual tomó firmemente e incluso dio algunos golpes al aire como prueba, como intentando recobrar la habilidad que solía tener con éste. Sus golpes iniciales eran algo inciertos y demasiado fuertes, pero después de algo de práctica se volvieron precisos y ágiles, así que decidió parar con las pruebas y sostuvo firmemente su instrumento entre sus manos mientras volteó a ver a la prisionera, sonriendo de una manera algo tenebrosa.
- Y bien... ¿Comenzamos? -
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Post by Akane Enomoto on May 16, 2017 3:01:27 GMT
El pequeño ya habia salido por el encargo que le habia pedido Haru, desconocia totalmente que era pero sonreia, le hacia gracia la situacion actual de la fauno la cual sinceramente no terminaria bien. " Quiza de esto puedan por fin almorzar..." penso mientras se rascaba la barbilla un poco. Xhime, el carcelero de la mancion habia hecho acto de presencia, y aunque al principio penso que su existencia era solo un murmullo comprobo por si misma que si laburaba aqui abajo, entre el moho, la humedad y los gritos de los prisioneros. " Poco elegante para un sirviente...." lo evidente, siendo nombrado por el susodicho amplio la sonrisa de la Oni, quien, solo era una mera espectadora. " Oni con transtorno bipolar" fue gracioso, debia admitirlo. Con latigo en mano, la cosa se estaba poniendo peli-aguda y viendole practicar sus golpes capto que lo mejor seria dejarla sola para que la castigase a gusto. No queria ser la segunda a insultar despues de atrevimiento que habian hecho el chico y la fauno, miro a Haru para inclinarsele con respeto haciendo que su cabello tocase el piso (era una inclinacion de devocion un poco mas arriba que la que solia hacer para el Amo...algo que...le gustaria que notase de ella), si, habian tenido roces anteriormente por la moral de ambas, pero no la odiaba, por el contrario: era su modelo a seguir. - Me retiro Haru, espero que esta desagradable criatura obtenga su merecido...- se irguio de nuevo, haciendole señales al pequeño para despedirse y a Xhime tambien - Cuando terminen, por favor vengan a almorzar- musito con una sonrisa y su piel se fue normalizando a manera que se alejaba con el kanabo en hombros." Hora de que las ratas mueran..." despues de tanto, habia sido una velada encantadora y esperaba tener la oportunidad de castigar a alguien tambien, en un futuro.
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Post by aishling on May 16, 2017 18:48:18 GMT
se sintió algo confundido del como el carcelero tomo el pedido de haru llevándose los colores de su rostro al suelo ,ya que haru no estaba de humor y tampoco quería interferir en el castigo ,aunque su ceño estaba fruncido fuertemente por el coraje hacia la chica escucho no uno ,ni dos si no varios golpes al aire con el látigo ,mirando de por si la sonrisa de su compañera akane y el como hacia la inclinación para seguirla con la vista y asentir pero lo del almuerzo sonaba tentador ademas de que el color rojizo de la piel de akane volvía a la normalidad
-esta bien akane,necesitaras algo mas haru?
musito con calma y con cierta curiosidad ,sabia que a ella le gustaba hacer las cosas por si misma ,pero quería estar asegurado de que con lo que había traído fuera suficiente para el castigo de la fauna invasora ,ademas tenia que limpiar las astillas de la puerta para que nuestro lord no se molestara al ver tal desastre eso seria imperdonable
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Post by Deleted on May 16, 2017 19:16:33 GMT
Xhime, solo observa a la pelimorada de los pies hasta el pelo sin importarle una palabra de los insultos recibidos ya que para él ella no representaba alguna figura de autoridad o similar, eran iguales y entendía que había cometido un estúpido error, hasta se golpetea la cabeza en forma graciosa, además sabía que las personas de Reapergate así eran. En eso escucho justo lo que esperaba: ..."Yo me encargaré de ésto a partir de aquí"... ..."Yo me encargaré de ésto a partir de aquí"... ..."Yo me encargaré de ésto a partir de aquí"... *Resonó en su cabeza*
Es allí cuando algo dentro de él despertó, el sueño de sentir el aire fresco vino a él como una ráfaga de libertad, rápido voltea a sus alrededores asegurándose de la presencia de los otros dos, es entonces que tendría dos testigos donde la dragona pelimorada era la responsable de que si algo o alguien irrumpía en el calabozo tratando de rescatar a la intrusa u a otro ente allí atrapado, la responsabilidad caería en los hombros ajenos a los de él. "Entonces, excelente, esta fauna parece que te importa mucho, por lo tanto no interfiero más..."-suelta una leve sonrisa y da una muy pequeña reverencia, cuasi burlona, cruza miradas con Aishling para tratar de leer su comportamiento tan sumiso o si solo estaba esperando alguna oportunidad al igual que él; cuando escucha lo que la oni ofrece como carta de salida de aquel lugar tan escabroso-. ...Deja te acompaño a la salida Akane" -casi a zancones corre de allí abajo, pasándola a toda velocidad más que acompañarla en sí- "...Pasaré a comer en unos momentos -le dice desde la parte superior de las escaleras a la bella oni-...tomaré un poco de aire primero...gracias por tu oferta.."-abre la puerta y sale de tan miserable lugar-. OOC: Out of the thread, Thx
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Post by Deleted on May 18, 2017 17:00:56 GMT
La ninfa había recibido un mensaje por parte de Nevraska pidiendo ayuda y revelando su ubicación desde hace algo de tiempo, por lo que tardó bastante en "responder" a su llamado. Aquel tiempo lo había gastado bobamente intentando conseguir más gente para tener más posibilidades de salir ilesos de aquel lugar, pero al final nadie la había acompañado y ahora frente a la puerta parcialmente destrozada del castillo sólo se encontraba ella, sujetando firmemente su arco y su flecha con sus temblorosas manos. [Nevraska... Si es que no estás muerta ya, te juro que después de ésto yo misma te voy a matar.] Pensó en sus adentros mientras comenzó a adentrarse en las profundidades del castillo con el mayor temor que alguien podría sentir en su vida. Todos lo habían dicho, cada persona a la que le mencionó sobre aquella misión de rescate lo mencionó: "Lysander Velfast no es alguien que deba tomarse a la ligera". Sí, bueno... Daba miedo, pero no por ello iba a dejar a su amiga morir en aquel escabroso (y demasiado limpio) lugar, y si moría a manos de un vampiro hambriento tratando de rescatarla, su consuelo era que al menos moriría haciendo una buena obra.
A cada paso que daba, Eira se arrepentía más y más de haber entrado a ese lugar, pero ya no había de otra, no podía dar vuelta atrás y ahora sólo debía concentrarse en no ser descubierta por ningún ente maligno de los que habitaba en aquel lugar, además de prestar mucha atención a sus alrededores en búsqueda de algún indicio que le pudiera decir donde estaba la fauno. Todo eran pasillos y habitaciones vacías, además de tantas cosas parecidas que la ninfa comenzó a confundirse más y más, llegando al punto donde ya ni siquiera sabía para donde quedaba la salida. Pero cuando Eira menos se lo esperaba, repentinamente unas voces extrañas llegaron a sus oídos desde el pasillo de al lado y le dieron susto de muerte, provocando que se acercara corriendo sigilosamente al primer escondite que se le cruzó a la vista, la cual para su suerte era una maceta con una planta de hojas lo suficientemente grandes para cubrirla en su totalidad... Bueno, los cuernos no, pero para eso sólo tuvo que cambiar a su forma sellada.
[Porlosdiosesquenomeveanayudapapáauxiliomemueroprontovoyaestarcontigoporquehiceestoyoqueríavivirunavidaplenayaniloqueahorréparaeljodidobarco] Los nervios de Eira aumentaron drásticamente cuando vio como dos personas pasaron brevemente por el pasillo que cruzaba con el que estaba ella, por lo que en cuanto vio que se fueron corrió hacia otro lado en caso de que la hayan visto o siquiera hubiesen sospechado que estaba allí, perdiendose aún más en el inmenso castillo.
Oh dios... Hubiese preferido que se la hubieran comido los lobos a seguir en aquel infierno lleno de suspenso.
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Post by Laiah Todorovic on May 18, 2017 17:43:40 GMT
Todo se estaba volviendo peor de lo que pensaba, empecé a temblar de miedo cosa que nunca había hecho en mi vida. Aquellos tipos eran aterradores y las cosas que decían no eran para menos, solo estaba asustada, ni siquiera sabía donde se habían llevado mi mochila, allí tenía un montón de cosas las cuales no les conviene ver, aunque eso no es lo más importante ahora, lo más importante era saber lo que me iba a ocurrir ( Que me va a pasar ahora ) Esas palabras resonaban en mi cabeza incesantes veces, la paranoia empezaba a sumirme. Como último recurso me quedaba mi pequeño ratón, pero no podía ponerlo en riesgo aún.
La chica de cabellos morados me desenredo de aquel látigo con el cual el otro sirviente me había amarrado, fue algo extraño pero después comenzó a regañarle por aquello. Parecía que todos le tuvieran respeto y me intimidaba bastante. Ella agarro mi cuello con lo cual quede despavorida, me azoto hasta el fondo de la celda para luego amarrarme con unos grilletes, no podía mover mis extremidades, al parecer estaban bien puestos, y por la mirada que aquella sirviente puso en los grilletes así era. Al principio dio unos latigazos al aire, era como si estuviera practicando los azotes que obviamente eran para mi, para luego mirarme fijamente y preguntarme si me encontraba lista, la sangre se me congelo, no pensé que había alguien tan aterradora, creo que ni Lysander Velfast sería tan aterrador como lo es esta irritante sirvienta. Los otros sirvientes se fueron, al parecer querían que me quedara sola con aquella Dragón, esto se ponía peor y ni siquiera sabía como era eso posible. Intentaba que me salieran las palabras, pero no me salían, bueno eso pensé hasta que me dije a mi misma ( Cual es mi problema? ) Así que exploté
-" Mira, Escucha, yo soy de los Plantíos de Mirovia, ¿Sabes lo que pasa en los Plantíos de Mirovia? COSAS MALAS "-
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Post by Deleted on May 18, 2017 20:41:15 GMT
Ante la repentina despedida de la Oni, Haru se giró un poco para verla de manera indiferente y totalmente desagradable (debido a que aún le guardaba rencor por sus problemas personales). Pero al notar que estaba haciendo una reverencia bastante respetuosa hacia su persona, Haru correspondió haciendo una muy ligera inclinación. - Así será, y no, Aishling... Puedes retirarte. - Dijo en un tono algo autoritario, para luego centrar nuevamente su atención en la fauno, a la cual sinceramente se le podía ver bastante asustada... Perfecto. Siempre era algo ameno el ver como sus presas temían por sus vidas, y bueno... Ella misma lo había dicho antes, iba a hacer que Nevraska comenzase a valorar su vida si es que no lo hacía antes. Al oír su miserable intento de intimidación, la dragona sólo pudo sonreír de manera incrédula y divertida. ¿De verdad creía que la iba a intimidar diciendo que venía de los plantíos? ¿Qué tan terrible era eso? ¿Sería a caso que iba a lanzar verduras hasta la muerte? Era gracioso de solo pensarlo. - Tienes razón, los plantíos deben ser terribles, las verduras últimamente no tienen la calidad que deberían... Creo que sólo por eso te castigaré más fuerte. - Respondió tranquilamente mientras sujetó firmemente su instrumento y dio el primer latigazo hacia el costado derecho de la fauno sin dudarlo ni un poco más, ya que si se demoraba más de lo debido tal vez se iba a perder su preciada hora del té. Haru había utilizado una fuerza moderada, ya que sólo quería lastimarla y no matarla. Pero cuando la cosa comenzó "suave" el impacto había hecho bastante daño en su piel, por lo que fue inevitable que un alarido saliera desde la garganta de Nevraska. Aquello no había hecho nada más que emocionar más a la pelimorada, la cual comenzó a sonreír nuevamente de manera tenebrosa, y no conforme con el daño que le había hecho utilizando su poca fuerza, comenzó a dar golpe tras golpe aumentando cada vez más la intensidad, haciendo que cada vez los gritos fuesen más constantes y agonizantes. [Eso es... ¡GRITA!] Pensó la dragona en sus adentros, ya que para ella el escuchar los gritos y el dolor ajeno siempre había sido como si una hermosa sinfonía estuviera naciendo. Los lamentos no sólo eran ruido ahora, sino que se habían convertido en elegantes instrumentos que se tocaban con maestría y dedicación, mientras que las lágrimas no podrían ser otra cosa que un público expectante atento ante el sonido, el cual comenzaba a inundar sus oídos con su belleza. La sangre eran los aplausos, una ovación de pie hecha su honor. Pero no, sólo ella podía escuchar eso, aquella melodía sólo había hecho por y para ella, lo demás no importaba ahora... Sólo... ¡Sólo era disfrutar su momento!
(OOC: Aquí lo que Haru escucha: )
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Post by aishling on May 19, 2017 1:30:48 GMT
-entonces con tu permiso me retiro
dio un leve asentimiento con su cabeza a las palabras de la pelimorada para hacer una pequeña reverencia girando sobre sus talones para caminar justamente a la salida ,emocionado por comer algo de akane ya que le gustaba su sazón y tratar de alcanzar al par de arcanos con una pequeña ansia y hambre de comer de la comida de la oni perdiendose en la salida del calabozo
00c:aishling sale del treath
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Post by Deleted on May 19, 2017 17:03:40 GMT
La ninfa continuaba en su búsqueda, pero sinceramente comenzaba a sentir que no podría ni encontrarse a sí misma de lo perdida que estaba. Pasillo tras pasillo, puerta tras puerta, pero nada, ni un mísero rastro. Era más probable que alguien la fuese a encontrar a que ella pudiera hallar a Nevraska, o al menos esos eran sus pensamientos hasta que algunos gritos tremendamente familiares comenzaron a sonar a la distancia, y aunque no eran lo suficiente fuertes ni claros, al menos le dieron esperanza. [¡Esa tiene que ser Nevraska!] Se dijo a sí misma al mismo tiempo que comenzaba a correr en la dirección que provenían tan horribles lamentos. Llegando al fin a unas escaleras, las cuales no había visto antes. [Ya voy por ti... ¡Resiste!] Pensó mientras preparaba su arco y sus flechas.
Rápidamente bajó aquellas escaleras, aunque trató en lo posible de no hacer mucho ruido para no alarmar a los horrores (sirvientes) que seguro habían allá abajo, para luego asomándose por el marco de la entrada muy sigilosamente intentando ver a lo que se enfrentaba. Habría que imaginarse cual fue su sorpresa cuando vio como una mujer de cabellos violetas estaba azotando violentamente a la fauno, la cual sin duda era la que emitía aquellos lamentos desgarradores.
Eira de pronto se llenó de ira e impotencia... Pero tenía que controlarse. Aún no sabía bien si en verdad sólo estaban ellos y no podía ponerse en peligro así como así y arriesgarse a ser capturada, pues de nada habría servido la infiltración. Fue así que nuevamente comenzó a observar los alrededores, notando que todo estaba sospechosamente despejado. Era muy extraño, sí... Aunque significaba una oportunidad, por lo que sin pensarlo un poco más, Eira comenzó a apuntar con su arco listo para disparar hacia aquella mujer despiadada que estaba con Nevraska.
Aquella flecha había sido preparada especialmente con un "potente somnífero" que le había vendido un señor extraño, el cual sinceramente no le dio confianza ya que no había querido probarle que en verdad funcionaba, pero peor era nada, ya no había más tiempo y prefería confiar que la suerte iba de su lado que ir con los brazos cruzados a un nido de víboras. Sí, igual todo iba a resultar mal, pero al menos el somnífero le dio confianza.
Cuando calculó que la flecha ya estaba en la dirección correcta, disparó sin más, rezando en sus adentros a todos los dioses que conocía para que la flecha de verdad impactara en el objetivo.
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Post by Laiah Todorovic on May 19, 2017 18:32:37 GMT
La chica de cabellos morados comenzó a burlarse de mi y de mi lugar de nacimiento, me parecía entre irónico y estúpido que pueda haber alguien que en su posición pueda ser tan arrogante y cruel. -" No entiendo como puedes burlarte de mi por nacer en los plantíos siendo que de allí tu comes, ademas no se que tanto alegas que de no ser por el señor Velfast serías una don nadie, bueno más de lo que ya lo eres "- Realmente me causaba una rabia aquella Dragón, aunque eso no fuera lo más importante en mi situación. Solo debía permanecer tranquila ante cualquier cosa que hiciera.
Fue cuando ella comenzó a darme latigazos que supe que ya esto estaba comenzando, cada azote quemaba mi piel, al principio la Dragón no lo hacía con tanta fuerza por lo que podía aguantar los gritos y por un momento pensé que aguantaría. Pero los golpes empezaron a aumentar en intensidad. Las quemaduras pasaron a ser unos ligeros cortes sobre mi piel de los cuales comenzaba a caer sangre, el ardor comenzaba a ser cada vez más fuerte, que junto a los latigazos ya no me dejaba contener mis alaridos por lo que los chillidos que salían de mi boca se transformaron en desgarradores gritos incesantes. Por un momento pensé que alguien los escucharía, pero aunque así fuera nadie vendría por mi, ademas de estar en lo más profundo del castillo por lo que dudo que alguien quisieran venir a mi rescate.
Perdí la noción del tiempo, mi cuerpo ya no sentía prácticamente ningún dolor. Tenía cortes en la mayoría de mi cuerpo, mis brazos, piernas, torso, todo estaba dañado, tenía la mirada perdida y la cabeza en blanco, todos los planes que tenía, arruinados. Aún tenía la vista borrosa, pero cuando levante la cabeza por un instante pude ver la figura de alguien, intenté enfocar la vista y fue que pude reconocer a Eira, había venido por mi rescate, intenté no llorar para que no sospechara aquella Dragón, vino por mi aún estando enfadada por lo que había ocurrido en el Bosque de los Susurros, peor aún así vino a rescatarme, me sentía muy conmovida, pero aún no era momento de celebrar. La vi como estaba apuntando a la Dragón, me sentí tan aliviada, peor tenía miedo, de que la encerraran a ella también, por lo que volví al estado en el que me encontraba antes para no distraer a Eira ni a la Dragón.
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Post by Deleted on May 19, 2017 21:25:43 GMT
La diversión de la pelimorada se vio abruptamente interrumpida por un dolor punzante en su omóplato derecho, lo cual hizo que parase con los golpes hacia la fauno para verificar su mano qué era la causa de aquella sensación. ¿Sería acaso que alguno de los otros presos había escapado y le lanzó una piedra? Pensó mientras exploraba la zona afectada con su mano izquierda, la cual se topó con algo que en verdad no se esperaba.
Algo se había incrustado en su carne, algo... Delgado. No tardó mucho en tomar el extremo de aquel objeto extraño y lo jaló firmemente para extraerlo, haciendo un leve gesto de molestia al hacerlo, pero sin emitir sonido alguno. Luego de aquello miró atentamente qué es lo que era aquello, notando por fin que era un tipo de flecha, la cual tenía rastros de algún tipo de sustancia en la punta mezclada con su sangre. Sin embargo ella no llegó a sentir nada fuera de lo normal, sólo el ardor de la herida que tenía en la espalda.
Pronto volteó hacia atrás, sorprendiendo con su mirada a una sombra que pareció ocultarse rápidamente en las escaleras. No parecía ser un prisionero, pues todas las celdas estaban cerradas. Por lo que era probable que era alguien más que se había metido sin permiso al castillo o incluso alguien que intentaba rescatar a esa desagradable fauno, después de todo había que recordar que Nevraska, aún cuando la estaba arrastrando, tenía el descaro de mensajear con su tableta. - El castillo se está llenando ratas... - Murmuró con desagrado y se dispuso a salir de la celda, yendo directamente hacia el lugar donde Eira se escondía, pues una pequeña herida no iba a impedir que le diera su merecido a los intrusos.
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Post by Akane Enomoto on May 20, 2017 0:03:28 GMT
Ignorando el erratico, peculiar y algo curioso comportamiento de Xhime, la oni siguio su camino junto con el pequeño Aishling hacia el comedor. Parecia que a ambos les estaba dando fatiga por lo que le hizo una señal para que apresurase el paso. Ya en su destino dejo aquel pesado Kanabo en una esquina para ir hacia la cocina, tomar un plato y servirle la sopa al pequeño, acompañada de dos generosas rodajas de pan, zumo de naranja y de postre una jugosa manzana partida en gajos con un poco de azucar y canela espolvoreadas encima de ella. Le llevo todo en una bandeja depositandola en la mesa para que el comiese, le acaricio la cabeza y fue a servirse para comer a su lado.
Despues de un rato los platos quedaron vacios, su humor estaba mejor y ambos andaban llenos y felices. Como pudo se las apaño para cargar todos los platos en la bandeja y lavarlos, el le dio las gracias saliendo del lugar para continuar con sus deberes (o tomar una siesta, no sabria decir). Al terminar recordo que, abajo en los calabozos se encontraria Haru haciendo de las suyas con la prisionera. La espero un buen rato pero se estaba preocupando de que no saliese, asi que dejo todo en su sitio y se dirigio de vuelta hacia donde se encontraba la dragona para avisarle sobre su comida. "No se que tanto este haciendo, pero ya es algo tarde y deberia comer...si el amo se entera de que el horario se ha truncado me iria mal..." preocupada apuraba el paso y su preocupacion aumentaba, su corazon latia fuerte, estaba ansiosa.
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