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Post by Raiden Ivelic on Jun 25, 2017 19:51:53 GMT
Cuándo descubrió el cuerpo de Izark incorporándose, una sonrisa se le escapó, una que inmediatamente se borró al verlo aproximándose al cuerpo que había dejado caer sin importancia. Asi que esa mujer había sido la culpable... Entonces, ¿por qué estaba cuidando de ella? Bajó su cabeza no queriendo ver la escena, alejándose hasta la entrada de la habitación. Su mirada se topó con Neero y luego com el cuerpo de Yaotzin desplomado en el suelo; Izark se equivocaba, ni siquiera las plantas carnívoras podrían comerse ese desperdicio.
Mientras Abdon revisaba minuciosamente el cuerpo de la chica, el cerbero se retiró de la habitación, dirigiéndose a buscar lo que había mencionado Jago anteriormente, trayendo consigo uno de las botellas con sangre conservada para ese tipo de ocasiones. Volvió a la habitación donde se encontraban todos, entregándole la botella a Izark junto con un vaso, por si era necesario. Se quedó un momento observando al vampiro con ojos suplicante por el notable enfado en su semblante.
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Post by Neero Oka on Jun 27, 2017 23:15:14 GMT
Neero se quedo parado un rato despues de que Jago le dio una "orden" pues era el hijo mayor de los Santori... Iba refunfuñando entre dientes, tomando su forma de zorro, cuando escucha algo por detras, era el señor Santori levantandose y tomando a la chica, tenia mucha curiosidad por ella ya que de seguro nadie sabia su nombre, algo minimo al tener una nueva huesped ¿No? Ademas se podia sentir una tension en el aire cosa que a Neero no le gustaba mucho... Con una ultima mirada al señor Santori movio sus colas en indicio de felicidad pero antes de irse con Yao sin darse cuenta se queda mirando a Abdon, parecia avergonzado y un tanto triste... Neero solo se le acerco sigilozamente para luego poner su cabeza bajo su mano, dandole una señal de que estuviera tranquilo.
Luego de eso, se va a paso suave para no hacer ruido y sentirse una molestia, ya hay mucha tension en la habitacion.
Cuando sale y ve el cuerpo tirado en el suelo no pude evitar cambiar la cara a una de angustia...
-¿Porque tengo que cuidar al borracho...? -Decia mientras caminaba al lado del cuerpo para luego de sentarse lanzar un suspiro- Me alegro que el señor Santori este bien pero... Aun no se quien esa chica, nunca la he visto pero, algo me la hace familiar... -El zorro pensativo y aburrido empezo a jugar con sus colas, poniendo la punta de estas en la nariz de su acompañante desmayado- Cuchi, cuchi, cuchi... Despierta...
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Post by Yaotzin Etzatlan on Jun 28, 2017 22:57:46 GMT
El cuerpo del joven se encontraba reposando sobre el suelo. El piso seguía dándole un montón de vueltas y con ello un montón de nauseas, era lo normal para alguien que se había acabado un barril de cerveza, solo en una tarde. De momento se encontraba con los ojos cerrados acostado boca arriba, la sensación de vértigo aun con ello era muy fuerte y casi ni estaba consiente de el mismo. No supo calcular exactamente cuando había sido el tiempo transcurrido entre bajar del techo y quedarse tirado en… no tenía idea de dónde y eso solo lo hacía sentir más confundido, sin embargo no podía ponerse de pie o mostrar señales de vida.
De golpe un pequeño escozor en la nariz comenzó a irritarle, tenía ganas de estornudar pero no podía, así que como pudo rasco su nariz. Otra y otra vez sentía aquel escozor horrible pero el no estar en sus 5 sentidos le hacía más difícil todo, entre abrió los ojos y solo pudo notar una figura medio borrosa y blanquecina. – Ne…..ne….eh…? quiers…jugar? ….- dijo con una voz divertida y apenas entendible. – Se levantó y acerco su cara a la del chico, quedando frente a frente, su rostro lucía bastante demacrado y apestaba a alcohol . Toco los hombros de Neero con bastante suavidad y también una de sus colas – Umm….. –se le quedo viendo fijo por un momento- Estassss…medio….tossca y peluuda…pero….no le hago el feoooo….a casi…. ningunaaa chica…
Se abalanzo a como pudo encima de Neero, quedando el arriba de su cuerpo y poniendo su frente contra la suya para de nuevo dejarse caer y volverse a dormir encima del chico. – Estas…peluda… -murmuraba el joven mientras ponía de nuevo la frente, ahora en su hombro. Después de toda aquella escena de lo más rara, rodó hacía un lado de él , volviendo a dormir plácidamente usando un de las blancas colas del chico como almohada temporal. - Tamibien....hueless feo.... - decía el joven entre dormido, ebrio y despierto. Ahora estaba murmurando unas cosas en una lengua desconocía, mientras sonreía como idiota y se movía de un lado a otro.
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Post by Jago Santori on Jun 30, 2017 6:12:48 GMT
Jago hubiera dejado escapar un amargo y frustrado suspiro de entre sus labios, pero volvió a tragárselo y en su lugar esbozó una leve mueca de cansancio, casi imperceptible. Era inútil mostrar siquiera un atisbo de su molestia, pues su padre tenía razón. Todo era un desastre y él había llegado demasiado tarde como para arreglar las cosas a tiempo. Al menos Abdon ya estaba volviendo a calmarse y la muchacha pelirroja viviría (probablemente).
Fue él mismo a servirle un poco de sangre de la botella traída por Raiden a su padre, mas como una muestra de respeto y no de servidumbre. El cerbero había traído un vaso en lugar de una copa... bueno, era lo que había. Ya después pediría que por favor revisaran la loza del hogar. Le entregó la roja bebida revitalizante en la mano a su Lord progenitor. - Lamento mucho la vergüenza que tuviste que presenciar, padre. Asumo toda responsabilidad por lo ocurrido.
Pero las malas noticias no dejaban de llegar, y escuchó cómo afuera de la habitación Yaotzin trataba de propasarse con Neero. - Discúlpame... -le dijo a Izark antes de salir por la puerta y acercarse a donde estaban los dos jóvenes. Se agachó y los separó como pudo, empujando el cuerpo del dragón y haciéndolo rodar por el piso. Honestamente, todavía no aprobaba al nuevo sirviente, no fue capaz ni de alejar a un zángano como Yaotzin. - Neero, levántate y ve a atender las necesidades de mi padre, por favor.
El olor a alcohol que Yaotzin despedía era tan fuerte que lo hizo arrugar la nariz. Regresó al cuarto donde estaban atendiendo a la mujer de cabellos de fuego. - ¿Podría alguien ayudarme a mover a Yaotzin? No confío en que vaya a quedarse dormido para siempre.
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Post by Deleted on Jul 2, 2017 4:51:01 GMT
La molestia del vástago bajo un poco al ver que todos a su alrededor se movilizaban, ya sea para bien o para mal por fin estaban haciendo algo en lugar de perder el tiempo. Rechazó aquel vaso tanto de la mano de Neero como de Jago con un simple movimiento de man -Por esta noche he tomado demasiada sangre- El sabor del festín que había tenido en el bosque aun inundaba su boca, y si bien era un vástago que debía estar bebiendo aquel liquido rojo constantemente y reprendia su desperdicio, no estaba del mejor humor para alimentarse... otra vez.
Ante el comentario de Jago, izark le dedico una mirada fría -Si te vas a hacer responsable de todos los errores que los demás cometan debería buscarte un féretro lleno de dagas en el que te pueda enterrar vivo y así exonerarlos- cerró los ojos lentamente manteniendo aquel semblante furico. Jago era su orgullo así como su mano derecha y odiaba de sobremanera cuando se adjudicaba culpas que izark sabia nada tenían que ver con el, la incompetencia de sus sirvientes e inquilinos eran cosa aparte de su hijo y de vez en cuando al vástago le gustaría reprenderlos severamente como en los viejos tiempos.
La quejas sobre Yaotzin llegaban sin cesar y estaban a punto de colmar su paciencia -¿Acaso nadie tiene el suficiente cerebro para resolver un problema tan simple?- se dijo a si mismo en su mente -Nada de esto estaría pasando si estuvieras aqui querida- volvió a suspirar y su mirada se posó en el techo de la habitación -¡Raiden!- habló con voz firme resonando por el gran cuarto -Deja de perder el tiempo, usa tu forma verdadera para sacar a Yaotzin del pasillo-
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Zaniah Neshmet
Los Invictos
Vive como si tu libertad dependiera de ello
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Post by Zaniah Neshmet on Jul 2, 2017 5:30:54 GMT
Las heridas cerraron ante los tratados de Abdon, mientras la sangre quedaba como pequeños rastros de lo ocurrido, y las yagas rojizas, se volvieron cicatrices pálidas o café en el cuerpo de la arcana. Zaniah frunció el ceño, ante el ardor que estas provocaban, Niwre salió de entre su cabello rojizo, observando a cada uno de los presente, y en un movimiento con sus patas, mostrando desagrado, se volvió a esconder bajo los rizos anaranjados.
Al no sentir dolor alguno, más que una que otra secuela de los huesos heridos por los golpes de los bandidos, intentó mover de nuevo los dedos de sus manos. Nada. Zaniah maldijo para sus adentros mientras, con todas sus fuerzas intentaba ver qué es lo que estaba pasando a su alrededor, sentía que podía mover las cejas y los ojos. Pero nada más que eso, ¿Qué clase de veneno era ese? ¿Sería como esos cuentos de hadas que vendían en los mercados para los niños? Esperaba que el antídoto fuera todo menos un beso, separó los labios, observando a Abdon desde la posición en la que se encontraba.
--Gra...cias --Al menos podía soltar una que otra palabras, le agradaba no estar paralizada del todo, quería saltar de la cama, tomar sus cosas e irse por donde había entrado. Ese lugar le daba escalofríos, pero no podía quejarse, al menos la cama estaba cómoda, aunque fuera en una posición muy desesperante. --¿Son... su familia? --Soltó la arconte, mientras permanecía como una estatua, aunque con la curiosidad a flote en su pecho, como siempre. |
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Post by Abdon Santori on Jul 4, 2017 2:24:48 GMT
Entre sus nervios,la suave lengua de Neero tocando el dorso de su pálida mano logró dejar de temblar un momento, bajó la presión de la situación, una simple lamida demostrando el apoyo que le daba Neero era suficiente para sacarle una sonrisa, acarició la cabeza antes que se fuera, ignorando completamente al insecto que se encontraba entre el cabello de la arconte. Terminó de curar a la mujer y cerró la botella del ungüento que estaba casi completamente vacía con un pequeño corcho el cual tenía en su algo temblorosa mano, dejó la figura de cristal en un lado donde no fuera algún tipo de molestia.
-No se preocupe,señorita.-Le respondió a Zaniahy se levantó del pequeño e incómodo banco donde estaba sentado y comenzó a dirigirse hacia la puerta, donde se encontraba el embriagado de Yaotzin intentando "coquetear" con el kitsune, le daba repulsión solo saber que tenía solo a alguien como él dentro de su clan.
Estaba a punto de darle un final a la desagradable interacción de ellos dos, pero su hermano había llegado antes que él, admiraba a Jago tanto como envidiaba su comportamiento, anhelaba algún día ser como él, pero las anclas del pasado le impedían avanzar. Sin darle más importancia a ello, miró con desagrado a su sirviente y pasó encima de él casi pisándolo para salir al estrecho pasillo. Volteó su cuerpo y puso sus manos empapadas que las extrañas pociones detrás de él.-Descansa,padre.-Fue lo último que dijo antes de dirigirse hacia su oficina otra vez, no iba a causar más problemas y a soportar las palabras de rechazo de su progenitor, además , no tenía ningún otro deber allá.
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Post by Raiden Ivelic on Jul 5, 2017 3:52:45 GMT
"Ugh." Fue lo primero que pensó en el momento que recibió la orden de parte de Izark. Desde luego que no usaría su forma verdadera para mover a Yaotzin, de eso podría encargarse el mismo y si el otro causaba demasiado problemas sería el momento de usar su forma verdadera. Abdon abandonó la habitación a la vez que el cerbero se dirigía hasta donde se encontraba el hombre casi inconsciente por la cantidad de alcohol ingerida. Al llegar a su lado, su pie pateo sin fuerzas la espalda contraria, intentando adivinar el estado del dragón y que tan ebrio estaba como para no poder incorporarse por si solo. Se inclinó hasta el nivel del pelinegro, tomándolo de un brazo y luego colocandolo al rededor de su propio hombro para que sirviera de apoyo - ¿Puedes caminar o prefieres ser cargado como mujer? - Preguntó sin gracia mirando fijamente el demacrado rostro.
Sus sentidos seguían alertas por la mujer instalada en la habitación, pero lamentablemente tenía órdenes que cumplir y no podía quedarse a seguir detenidamente cada movimiento de la desconocida - ¿Dónde lo llevo? - Su semblante era inexpresivo, aunque por dentro estaba disgustado por la idea de tener que vigilar a Yaotzin, sabiendo lo problemático que era.
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Post by Neero Oka on Jul 8, 2017 3:53:23 GMT
Con un poco de verguenza se le escondia la cola entre las patas pues ahora si parecia perro de calle, pero al ver la sonrisa del señor Abdon hizo que en su corazon un pequeño calor apareciera y que se sintiera un tanto mejor animicamente, vio como Raiden se empezaba a hacer cargo de su alcoholico compañero cosa que hizo que un poco de culpa le llegara haciendo un pequeño nudo en la garganta, baja un poco sus orejas para luego dedicarle un par de palabras.
-Lo siento por no hacerme cargo Raiden, era mi responsabilidad despues de todo pero... -Le da un escalofrio que le recorre todo el cuerpo- Es una imagen que quiero borrar para ser honesto...
El zorro agacho la cabeza en forma de gracias y respeto al cerbero para luego ir nuevamente a ver a la habitacion pero esta vez tratando de pasar desapercibido pues aun tenia curiosidad sobre la chica y digamos que tenia un tanto de miedo ante las miradas que le llegarian por no cumplir con la orden del señor Jago...
"¿Como se llamara?", "¿Que le habra pasado?", "¿Que es del señor Santori?", "¿Que raza sera...?", "¿Habremos hablado antes...?"
Todas esas preguntas y más aparecian en la cabeza del kitsune pues entendia que todo el mundo estuviera alterado por el estado del señor Santori pero ¿Alguien más aparte de Izark y Neero se preocupaban de ella? No sabria decirlo ya que desafortunadamente no sabe leer mentes, quiere saber acerca de ella...
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Post by Yaotzin Etzatlan on Jul 26, 2017 19:58:52 GMT
El moreno entre abrió los ojos al sentir que estaba siendo cargado por algo o alguien, apenas si pudo voltear a un lado entreabriendo los ojos para intentar imaginar quien era. - we….ro….?- no reconocía a la persona que tenía a un lado de él, pero debía ser una persona genial, alguien enviado por los mismos dioses para ayudarle. – Gra…gracias (hic) así….así está bien…- dijo mientras recargaba su cabeza en el hombro de Raiden. A momentos parecía que aquel joven iba a caerse pero de alguna forma y con maestría recuperaba de nuevo el equilibrio. – Agñossss… de maestríaaa. – una risa estúpida y burlona muy propia de él se le escapo, casi sin querer. Escuchaba el eco de las voces tanto de Neero como de Raiden más sin embargo esto solo hacía que la cabeza le diera más y más vueltas de una forma muy grotesca, sentía que cada una de sus palabras le taladraban los oídos pero no entendía nada de lo que estaban diciendo – SHHHHH traaatooo…de deescasaar (hic) –se limitó a decir ridículamente alargando casi todas las vocales, más esto no era por gusto, había perdido la capacidad de hablar coherentemente hace ya varias horas. Poco a poco sintió como una de sus necesidades básicas le habían llegado a golpe - Heeeey Tuuuuu quiero orinaarr – demando toscamente al hombre el cual le estaba cargando sin importarle poco la educación o el pudor, esas cosas no existían ni estando sobrio, muchísimo menos estando en aquel estado de ebriedad tan deplorable. Intento safarse del agarre de Raiden sin tener mucho éxito, y no era precisamente porque lo estuviera tomando fuerte o algo , si no más bien porque en ese momento era medio estúpido para cosas así y la fuerza se le había ido - AYUDAAAA!!! ME SECUESTRAAAAN - grito habiendo perdido la noción de que le ayudaban
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Post by Jago Santori on Jul 26, 2017 20:09:45 GMT
El hijo mayor prefirió ignorar por completo el comentario de las dagas y se quedó adentro de la habitación. Estaba dispuesto aquellas cuchillas sin chistar y las palabras de su padre no debían ser tomadas a la ligera, pero eran otros tiempos. Atrás habían quedado las órdenes cumplidas a ciegas y los castigos crueles y letales; era un clan pequeño y una familia aun más pequeña. Retiró la copa y la botella de la vista de su padre, dejándolas encima de un escritorio, pero aprovechó de servirse él mismo un poco de sangre para poder beber. Apoyado en la mesa, observaba todo y escuchaba todo.
Le ahorró a su padre la molestia de presentarlos ante la muchacha pelirroja, respondió él luego de que su hemanito se retirase. - Mi nombre es Jago Santori, el caballero que acaba de atenderla es mi hermano menor, Abdon. Somos los hijos del dueño de este hogar, con quién usted entró aquí. Sí, somos familia
Estaba examinando con la mirada a la pelirroja, tratando de memorizar cada detalle de ella. Había sido todo tan abrupto que ni siquiera había tenido tiempo de preguntar bien qué había pasado, pero, ahora que todo estaba más o menos en calma, deseaba averiguar exactamente lo que había ocurrido allí afuera que provocó que su padre y la mujercita llegasen en tan mal estado. Primero lo primero, dejó la copa a un lado y se acercó un poco más a la cama donde estaba la joven, posicionándose al lado de su progenitor. - ¿Se encuentra bien? ¿Puede caminar o desea recostarse?
Estaba en eso cuando Raiden interrumpió preguntando qué tenía que hacer con Yaotzin, y de paso también escuchó los gritos quejumbrosos y ridículos del dragón. Jago se quedó callado. Ahora que Izark estaba despierto, al auténtico señor de la mansión le tocaba dar las órdenes. Se sintió mal por Neero, que entró tan derrotado, pero se sentía agradecido porque el kistune hubiera obedecido su voluntad tan rápido, así que, aunque no se ganó una sonrisa satisfecha, el heredero no lo reprimió ni hizo el más mínimo gesto de molestia. Sentía que no valía la pena hacerlo sufrir más.
Hablando de sufrir... - Padre, ¿qué ocurrió cuando fuiste de cacería? -preguntó respetuosamente a Izark.
[OOC: Perdón por la demora x1]
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Deleted
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Post by Deleted on Jul 28, 2017 19:47:37 GMT
A su parecer había pasado demasiado tiempo sentado esperando que sus sirvientes arreglaran un simple problema, lo cual fue un gran error desdes el principio. Izark estaba mal herido y agotado, lo unico que pedia era algo de paz al menos hasta el siguiente dia, pero quizás era demasiado pedir para sus torpes sirvientes. Se levantó de su asiento dirigiéndose primero hacia Neero tomándolo de la cola y arrastrándolo en su camino hacia Raiden, del cual solo puso una mano sobre su espalda y comenzo a empujarlo. "Guió" a los tres hacia la puerta que daba al corredor fuera de su habitación -No Puedo Creer Lo Poco Eficientes Que Son- Izark estaba harto y no pretendía ser el amo amable al que estaban acostumbrados sus sirvientes -Ambos Tomen Yaotzin y Déjenlo Afuera- dijo señalando el pasillo -Hablaremos Después Sobre Esto, Pero Por Esta Noche No Quiero Volver Verlos- dejó a los chico en el pasillo mientras el regresaba a su habitación cerrando la puerta y bloqueandola para que nadie más pudiera entrar.
Aun recargado sobre la puerta soltó un suspiro, tal vez de alivio tal vez de frustración pero por fin tenia algo de la paz que quiso desde el principio. Volvió hasta quedar del lado contrario a donde Jago se encontraba, sentandose sobre su cama y mirando a Zaniah dedicándole una leve sonrisa -Me la encontré en el bosque de los susurros- su mirada se dirigio a su hijo comenzando a relatar lo que había sucedido -Un grupo de ladrones la golpearon y le quitaron todo lo que traía, la dejaron a su suerte y un árbol casi la asesina- de forma paternal acarició el cabello de la chica mirándola de reojo -Fuimos a recuperar sus cosas y bueno, solo digamos que esa escoria ya no causara mas problemas- una sonrisa apareció en el rostro del vástago recordando los cadáveres de aquellos individuos -Pero no se fueron sin antes dar una buena pelea- señaló la quemadura en su pecho.
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Zaniah Neshmet
Los Invictos
Vive como si tu libertad dependiera de ello
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Post by Zaniah Neshmet on Jul 28, 2017 23:28:58 GMT
“Una familia bastante peculiar” Pensó Zaniah mientras intentaba sentarse, a pesar de que el veneno atrofiara de una extraña manera sus extremidades, la mujer tenía que poner de su parte para poder volverse a levantar. Tenía trabajo que hacer, y además, creía que estaba robando demasiado tiempo de todas las personas en la habitación, y aquello no le gustaba, si bien tenía experiencia con sirvientes de personas poderosas, sabía que a ellos no les atraía la idea de tener que atrasar a su amo por pequeñeces. Algunas gotas de sudor cayeron por su frente hasta su mejilla al lograr erguirse por completo, sus manos temblaban debido al esfuerzo, pero las escondió entre sus piernas y bajo las sábanas, para no ser tan obvia.
―Estoy bien, no se preocupe ―Sonrió ante la preocupación de Jago mientras soltaba el aire de sus pulmones en pequeñas respiraciones, al ver a los arcanos siendo expulsados de la habitación, Zaniah se encogió de hombros. Debía de irse de allí en cuanto antes para no causar más incomodidades.
Se quedó en completo silencio, escuchando el relato de Izark, contando todo lo sucedido, mirando de vez en cuando los pequeños y hermosos detalles de la habitación, después de todo, era un lugar bastante elegante.
―Disculpen ―La pregunta afloró entre los dos hombres, en un tono entre cansado y preocupado ―Creo que he dejado caer mi bolso, donde contenían algunas cosas importantes ―Al no verla en la habitación, supuso que ésta se había caído en el pasillo, con un gesto de preocupación, miró a Izark ―No es por alarmarlo, pero podría ser peligroso si alguien se atreviera a comerlos. ―En la bolsa se encontraban un par de manzanas, rojas, jugosas y con aspecto delicioso, pero no eran del todo lo que se mostraba… |
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Post by Jago Santori on Sept 2, 2017 20:21:41 GMT
Jago, observando los esfuerzos de la joven por poder erguirse, la asistió mientras que escuchaba las desventuras de su padre en el Bosque de los Susurros. Cualquier evidencia que hubiera quedado de los crímenes cometidos ya debió haber sido devoradas por las fauces sobrenaturales de los árboles y las criaturas que habitan el lugar, mas la preocupación del vástago volvió a encenderse al ver la quemadura en el pecho de su padre. El beso del fuego era tan mortal para los vampiros como la luz de los rayos del sol, y si la herida hubiera sido más grande... - Mandaré a Viveka a que traiga un ungüento del mercado para que puedas tratar debidamente vuestras heridas, padre -no era una sugerencia, sino una afirmación.
El hijo mayor de Izark se levantó. Ahora que la situación había sido aclarada, debía volver a sus deberes habituales. Escuchó con atención la petición de Zaniah antes de salir de la habitación y le sonrió tranquilamente. - Me haré cargo de que nadie toque sus cosas. No se preocupe por las manzanas, no llegaran a manos ajenas -Aquello era fácil de resolver, a decir verdad. Ninguno de los sirvientes se atreverían a apoderarse de algo que no les pertenece, y ni Abdon ni él comían nada. El único ladronzuelo era Yao, y en ese preciso instante se encontraba deshabilitado para hacer nada que no fuera vomitar y dar pena ajena.
- Que descansen, padre, señorita -se despidió antes de cerrar la puerta de la habitación tras él y desaparecer por el pasillo.
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Post by Deleted on Sept 9, 2017 4:26:53 GMT
La mirada del vástago se plantó en la puerta por varios segundos tras la partida de su hijo mayor, después de todas las complicaciones que habian surgido tras su ausencia, Jago supo manejar todo de tal manera que dejo sorprendido al mismo izark. La oportunidad de observar el liderazgo de sus hijos nunca se había dado hasta el dia de hoy y estaba muy complacido por el desempeño de Jago, en cuanto a Abdon refiere... Era mejor no precipitarse tanto.
-Es mi mas grande orgullo- dijo olvidándose por un momento que no estaba solo en su habitación. Se aclaró la garganta y se aproximó más a la joven, sentándose de nueva cuenta sobre su cama con la mirada suave y fija en ella -Deberías tratar de dormir un poco- acarició su frente retirando uno que otro mechón de pelo anaranjado de su rostro -Si te encuentras mejor mañana podrás irte si así lo deseas- el vástago estaba aferrado a la idea de no dejarla ir por ningún motivo esa noche y de ser necesario la retendria hasta que su condición física fuera la adecuada.
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