E3: A dance with Love Abierto 7/7

Aún sentía cierta emoción de lo ocurrido durante aquella tarde, no podía asimilar que se le había declarado y todo. Su corazón aún se mantenía latiendo a mil por hora, se llevaba un par de veces la mano al pecho para golpearlo suavemente cerrando los ojos y diciéndose a ella misma -" venga va, ya dieron un paso…. tranquila" - en ciertos momentos cruzaron vistas ambos y rió con cierta gracia mientras iban caminando entre la gente que bailaba, que coqueteaban, comían o simplemente disfrutaban de tocar la música. La luna se alzaba dejando ver parte de su belleza, las millones de estrellas danzaban igual de aquellos que estaban en la ciudadela. Había un aire tan benévolo, que deseaba que nunca se rompiera. Buscaba con sus ojos los distintos colores que aun se podían ver en la noche, las decoraciones eran encantadoras y daba cierta tranquilidad a pesar que todos estaban divirtiéndose.

En el andar Khorial le mencionó que iban a buscar a alguien que reconocía por nombre, realmente los nombres eran los únicos que podría recordar. Fueron hasta allí, una muchacha de cabellos plateados casi blancos se encontraba, un vestido encantador. Realmente era bellísima y sus ojos como amatistas brillantes, casi hipnóticos. No tardo en dejar escapar su voz generosa y suave. - Buenas noches… Te queda muy hermoso el vestido... Por cierto, soy Skye. - dejo escapar una risa risueña llevando su mano a los labios ocultándolos. Luego de la breve conversación simplemente volvieron a entrar, se podía notar como fuera de la Ciudadela se encontraba parcialmente más calmado que dentro pero le resto importancia. Una vez que se encontraban dentro nuevamente simplemente gozaba de la música y la diversión, la plaza estaba completa al punto que era inevitable no reír ciertas veces cuando se chocaban y pedir disculpas. Al oír dicho comentario de Khorial dejó oír una risa y luego hablar.- los nervios son normales… Imaginate si quiero bailar. - Sus manos volvieron al regazo y miró al muchacho y luego a la contraria. - Seguro bailan mejor que yo ustedes dos. -

Era muy raro… bastante  peculiar lo que estaba pasando. Su primo Yaotzin se había ofrecido a llevarla al baile el primer día, al inicio lo observo con inquietud, se paró frente a él y después de asegurarse que no tuviese temperatura y que no estaba ebrio una cuestión resonó entre ambos.

-Estas en drogas? – pregunto la chica expectante mientras revolvía los cabellos del dragon.
-No…solo quiero ayudarte Itza- Le apretó con fuerza una de sus mejillas mientras la veía desde abajo pretendiendo inocencia.
-Qué hiciste esta vez…?- pregunto mientras se acomodaba los cabellos y apoyaba su mano en su hombro, el solo imaginarse en que mierda estaba metido hacia que la sirena se estremeciera por dentro. Un suspiro acompaño aquella acción mientras le miraba expectante.
-Lo que hago o deje de hacer a ti te importa un carajo Itzanami, ahora solo vístete y larguémonos.
Después de casi 2 horas de arreglo por parte de Yaotzin, se encontraban frente al lugar de reunión donde aguardarían por los amigos de Itza (porque Yao no tiene ) . La joven miraba expectante a las personas que se encontraban en el baile todos bellamente vestidos

-Menos mal no te equivocaste con la ropa...Por cierto de donde la...- le exclamo aliviada hablando por lo bajo con el joven, comos si fuese un secreto que ambos estaban quebrados, cuando este paso a interrumpirla.
-Menos mal no engordaste más- Le dijo mientras la envolvía con su hombro y sonreía cínicamente, en pos a evadir la pregunta.
-Oh! Mira ahí esta Khorial!- dijo ignorando su comentario anterior mientras señalo al montón de personas que se encontraban junto con él y ambos se aproximaron.

-Itza corrió a abrazar a Kho y le revolvío el cabello mientras que Yaotzin se quedaba unos cuantos pasos atrás - Oh Oh! Deberíamos presentarnos! Nunca los he visto fuera de la tableta! . Yo soy Itzanami- dijo la morocha señalándose a ella misma mientras una amplia sonrisa se asomaba por la comisura de sus labios- Y el amargado de ahí es Yaotzin – dijo señalando al joven de cabello oscuro con grandes aretes.Aquel camino unos pasos adelante con bastante sigilo, observando principalmente a las señoritas, a las cuales paso a besar su mano como muestra de respeto. – Es un gusto estar entre tan hermosas mujeres. Se que venimos en grupo, pero me sentiré de los hombres más dichosos y envidiados de la fiesta.También es un gusto conocerte Khorial…supongo – dijo murmurando esto último mientras se acomodaba un poco el cabello y presentaba una reverencia ante todos. Itzanami solo se quedó pasmada, ya que no sabía que carajos había pasado… Yaotzin presentándose así?....él? – Pensó por un momento para negar con la cabeza- Y cómo se la están pasando?, estoy ansiosa porque me pongan al tanto –i inquirió para ponerse de lado de su primo, el cual le sacaba bastante altura. Este último permanecía al lado de ella con una sonrisa leve y poco perceptible sin pronunciar otra palabra. 

Los grandes eventos de la ciudadela siempre dependían de la ayuda de muchos arcanos para que todo fuera hermoso y grato. Por supuesto Hiku no se iba a quedar atrás en la ayuda y como sus habilidades manipulando alimentos se lo permitían fue a ofrecer su ayuda al Dragón Ahogado donde se le fue designado el trabajo de barman. El turno era bastante extenso ya que la gente había comenzado a llegar desde temprano para celebrar la gran fiesta. Hiku nunca antes había preparado tragos, pero su creatividad le ayudó y sus innovadores tragos fueron muy bien recibidos por el publico del Dragón ahogado.

Ya era tarde y comenzaba a obscurecer, pero aun así parecía que el ambiente en la ciudadela queda vez era mas alegre y festivo. Hiku había terminado su turno y se dispuso a salir en busca de algo de diversión a algún lugar en la ciudadela pero su cansancio y su botella de Vodka Dragonico, un trago que había inventado él unas horas atrás se lo impedían, así que optó por buscar algún lugar agradable donde poder descansar un rato.

Sonreíste suavemente, algo avergonzada ante las adulaciones de ambos, sonrió amistosamente – Mucho gusto Skye, mi nombre es Silver, es un placer, tú también te vez hermosa esta noche- Volteo su vista con suavidad hacia Khorial y le sonrió animada – Tu también te vez muy guapo Khorial, aunque se me hace algo divertido que traigas el cabello recogido, pero se te ve muy bien, deberías dejártelo así si te gusta –Comento con sinceridad y una sonrisa suave la chica. Por fin habían llegado al lugar, realmente estaba emocionada por bailar, escucho el comentario de Khorial y sonrió con ternura –Lo has hecho bien, ya verás que todo saldrá bien, si no, siempre puedes decir que yo te empuje – se rio ante el chiste, cubriendo ligeramente su boca para ocultar la risita, miro a Skye y se quitó la mano, sonriéndole con confianza – Yo no creo bailar bien en realidad, pero mientras se disfrute del baile, es lo que importa- empezó a caminar para recorrer mejor el lugar.


Se detuvieron cuando una mujer con un hermoso vestido rojo se puso delante de ellos para hablar con Khorial. Silver estaba confundida, demasiada gente, demasiados arcanos para tan poco tiempo, una persona tras otra aparecieron alrededor de ellos, demasiado rápido para su gusto, una pregunta tras otra, una presentación, uno de ellos tomo su mano para besarla, un escalofrió recorrió su espalda, el rostro de la chica palideció, no pensó que Khorial fuera popular, se sentía rodeada, trago saliva y lentamente, aprovechando la última distracción comenzó a alejarse, escondiéndose casi detrás del herrero, quería saludar, pero el vacío en su estómago impedía que dijera cualquier cosa, y sabía que era una descortesía completa, incluso podía traerle más problemas, ese pensamiento no hacía más que agravar sus nervios, intentaba pensar en ellos de otra manera, como cuando estaba en su panadería ¿Por qué dentro de la panadería podía atender varias personas a la vez y ahora, en un entorno amigable no? Estaba molesta consigo misma, respiro hondo mientras los veía presentarse, las manos le temblaban por completo, las escondió detrás de las faldas del vestido, respiraba algo agitada “Cálmate, no te van a hacer nada…Solo preséntate, como lo haces en la panadería” Se repetía a sí misma, se apretó con fuerza las muñecas, esperando que aquello calmara sus nervios


-Pan yo ser, silveria un gusto…- Bien, su vida social quedaba acabada, ni ella misma entendía que acababa de decir, forzó una sonrisa completamente nerviosa y si era posible palideció aún más, sentía los ojos de los arcanos mirarla, las ganas de vomitar eran muy grandes – Silver…soy…Silver…- Miro a los lados, intentando ver algo que pudiera calmarla, a lo lejos observo uno de los puestos de comida –Yo…voy…por comida…- Explico con voz temblorosa, y salió de allí casi corriendo. Sabía que la estaban juzgando duro, sus manos temblaban mientras caminaba con la vista fija en el piso, por su cabeza pasaban un montón de frases crueles, sabia lo descortés que había sido, pero no pudo evitarlo, no podía controlarlo ¿Por qué se puso tan nerviosa? No eran malas personas, si eran amigos de Khorial entonces debían ser buenas personas “y aun así tú fuiste descortés… ni siquiera pudiste presentarte como alguien normal” dijo una voz dentro de sus pensamientos, regañándola de nuevo


Sintió un ligero grito a su lado, venia tan ensimismada que no era consciente de su alrededor, volteo con violencia hacia el lugar del grito - ¡Lo siento! - Fue automático, ni siquiera sabía que había hecho, la voz había salido temblorosa, asustada, miro a la mujer de cabellos rosa, trago saliva, esperando algún comentario de su parte, otra voz la hizo mover ligeramente la cabeza, oh no, había interrumpido a una pareja, ahora se sentía como una gran tonta – Lo siento…-Volvió a decir para volver a su camino, solo necesitaba un momento para calmarse, solo necesitaba respirar un poco, seguramente mientras compraba algo se calmaría, ya estaba cerca, podría respirar y calmar todos esos pensamientos. Esperaba poder disculparse con esos dulces, sabía que quizás era patético, pero a ella la comida le daba gusto… Esperaba lograr tener ese efecto en los demás

Simplemente dejo escapar una risa auditiva al escuchar dichos comentarios y volver a sellar los labios manteniendo una sonrisa al ver lo bien que se llevaban. Se sentía algo celosa de los demás quienes podían convivir tranquilamente con la superficie, había hecho algo que nunca se había esperado hacer, pero por fin estaba ahí. Respiró hondo, con los ojos cerrados para disfrutar del aroma de algunas comidas cercanas y con su oído escuchar las melodías que hacían los músicos haciendo que la noche sea solo un hermoso lugar para continuar la fiesta. Uno de los pies, que se encontraban desnudos, comenzó a hacer ciertos movimientos para que el tobillo se moviera, aun dolía la herida mas no era de importancia ahora. Cierto vestido encantador consiguió la atención de la peliverde bajando un poco la cabeza con cierto respeto hacia la recién llegada.

No podía dejar pasar que todos tenían un estilo para vestir muy encantador, los vestidos de distintos colores como de largos y formas. El cielo nocturno no iba a dejar de iluminar con cierta tranquilidad la plaza tan animada, los colores eran un poco mas apagados pero de todas formas era apetecible mantenerse allí. Había creído que no iba a aguantar hasta la noche ya que había dormido muy poco, pero sus pies iban de un lado a otro, levantándose como si quisiera dar pequeños saltos ante la conmoción de su alrededor. Tuvo que despabilar de sus pensamientos para por fin volver a la tierra, habían llegado dos más quienes al presentarse y saludar, cosa que el muchacho simplemente se dedico a darles un "caballeroso" saludo. La risa no se contuvo, una leve suave ante los gestos. Al escuchar sus nombres recordaba ciertas charlas, mas con Itzanami que pudo cruzar algunas palabras más que el chico.

Una pareja, se acerco hasta ellos, mas bien hacia la nueva que se reunía a aquel circulo, cosa que a Skye comenzaba a darle cierto ataque de ansiedad por conocer tantos arcanos pero trataba de simularlo. No hizo más espera en reclinarse un poco tomando la tela de degrade levantándola, como un gesto algo muy salido de ella. - Un gusto conocerlos a todos. - comentó volviendo a su postura inicial dejando nuevamente sus manos en el regazo sintiendo ahora la otra tela más suave y de color rosado o un violáceo, no importaba era un tono muy lindo para ella. - Me presento, soy Skye… espero que todas disfruten de este festival. Y a respuesta a tu pregunta, Itzanami, la estoy pasando de maravilla. - exclamó con cierto tono tranquilo con una sonrisa angelical observando a los recién llegados. No tardo en ver como se alejaba Khorial de ella, mejor dicho del grupo, ante aquella acción ajena logró que la peliverde le entrara el pánico al quedarse rodeada de otros que ni había cruzado palabras antes "cara a cara" cosa que produjo una sensación extraña en su cuerpo. -"Respira hondo… vamos Skye… se que es difícil, pero mantén la calma ahora mismo." - golpeó suavemente el piso con la planta del pie para verificar si aun estaba en aquella forma, cosa que se mantenía en su forma sellada. Dejó escapar un suspiro aliviada volteando su mirada hacia Khorial que había advertido que buscaría a Silver. - Oh, voy contigo. - prefería acompañar a su pareja y estar cerca de la ajena quien parecía estar peor que ella.

Levantó un poco la falta para correr hacia su lado y ver a Silver algo cabizbaja. - Silver, no hay problema alguno… - trato de usar su voz tranquilizadora tras algunas palabras de Khorial para ayudarla un poco. Sentía cierta conexión por el hecho de verla nerviosa simplemente dio un poco la vuelta para ver su rostro. - ¿Tienes hambre? Vamos a buscar algo dulce para una chica tan bonita - su voz salía con cierta calma pero a la vez animada para aumentar los ánimos ajenos. No había notado por completa la ausencia de una mujer encantadora, de cabellos rosados largos cuales se arrastraban un poco por el suelo, con un atuendo tan natural o esa era la sensación que le transmitía aquella mujer con rasgos delicados.

-Acaso creíste que me perdería esto? Es hermoso!- le comentó a Khorial con bastante ilusión mientras se apartaba de él con lentitud y regalaba una sonrisa amplia a los presentes. – Todo es tan diferente aquí!- El choque cultural le abrumaba, no quería ser el hazmerreír del lugar por lo que prefería mantener un perfil bajo al igual que su primo; todo era diferente y no era malo,de hecho le causaba curiosidad, pero al ser un evento social estaba consiente que podía quedar marcada de por vida si algo salía mal.

-Demasiado diferente. – Comento súbitamente el dragón con una sonrisilla difícil de interpretar, realmente esta clase de festividades no le molestaban siempre y cuando pudiera beber mucho y destruirse un poco, pero mentiría si dijese que no extrañaba a su pueblo y sus costumbres. Sentía que en sus tierras todo era más intenso, más real. –Gracias Kho – respondió al apretón con bastante fuerza.

Para la sorpresa de la sirena, sinceramente no sabía que iba a reunirse con tantos amigos! Sabía que Skye, Nevraska y Khorial estarían ahí! Pero jamás se imaginó que iba a conocer a Silver y su sorpresa fue aún más grande cuando Kravla le dio uno de sus abrazos especiales. Sentía como sus costillas y huesos eran oprimidos con bastante fuerza. Apenas y Yaotzin iba a pedir que la soltara o la partiría en dos cuando aquella hermosa mujer capto su atención, ella intervino antes que él y su prima fue “liberada”. – Treng – memorizo su nombre, más su sorpresa fue grande cuando vio que la orca y una de sus iguales tenían una relación – Vaya- murmuro por lo bajo mientras se llevaba una mano a el mentón y las examinaba de pies a cabeza, pensando como carajos eso se había consumado, cuando Itzanami noto aquel gesto y procedió a darle un codazo en las costillas.

-AUCH! – exclamo Yaotzin acariciándose el costado, quien realmente estaba exagerando todo pues no había sentido gran cosa.-Debes ser amable y educado Yaotzin- dijo la chica entre dientes mientras le reprendía con una mirada asesina. – Kravla te presento a mi primo, Yaotzin, Yao ella es mi amiga Kravla! Por cierto se ven tan lindas las dos!- les dijo con bastante ánimo y sinceridad, jamás se hubiese imaginado a su amiga tan arreglada y guapa para una fiesta, además tenía tiempo sin ver a la orco y deseaba preguntarle tantas cosas sobre cómo había estado y que aventuras había estado viviendo.

Una mujer hermosa de cabello rojizo le dio la mano a la sirena y se presentó como Nevraska, ella quedo totalmente atónita – No me había imaginado nunca que serías tan bonita Nev! – aprovecho ese agarrón amistoso de manos para acercarla a su cuerpo y darle un abrazo con fuerza- Me alegra mucho conocerte! Y me alegra tanto que todos estén aquí. – dijo para apartarse de nuevo y tomar lugar al lado de su primo. En este intervalo a Yaotzin ya le había parecido la fiesta más jodidamente aburrida de la historia, necesitaba alcohol y lo necesitaba ya. Entre más pronto pudiese ponerse ebrio sería mejor para él – Todos son tan estirados – pensó mientras se aflojaba el primer botón de su camisa, a la par que Nevraska le tocaba el mentón con suavidad y le dirigía cierto sarcasmo en relación a como lucía, él estaba seguro de verse bien, no necesitaba que nadie le dijera lo contrarío y menos una loca como ella. Tomo su mano de nuevo y volvió a besarla para dirigirle una mirada lasciva mientras relamía sus labios.

Ambos primos desviaron la mirada al ver que Silver y Skye se habían retirado de escena.
-Así que esa es Silver… -Así que esa es Skye – pensaron los morochos casi en sincronía, siguiendo con la mirada a las dos chicas, ambas estaban en la barra sirviéndose alimentos. Yaotzin soltó la mano de Nevraska al divisar donde se localizaba la cerveza y respondió asu pregunta dándose la media vuelta – Yo, si me necesitan estaré alcoholizado por haya-

A Itzanami se le caía la cara de vergüenza, sobre todo con Nevraska – Lo…lo siento tanto… él es así, perdónenlo por favor- bajo la cabeza sintiéndose realmente avergonzada con los presentes. Afortunadamente estos desplantes del joven eran demasiado “ligeros” en comparación a los que estaba acostumbrada a soportarle. –Pla…Planes para este año?.... ummm la reunión con el Doctor Marino es uno de mis planes… y si todo sale bien después de estas fiestas conseguiré mi grimorio!


Paralelamente a esto Yaotzin había divisado a una bellísima mujer de cabello rosa y un elegante vestido verde, el aura que ella despedía lo hacía sentir bastante extraña, no le parecía que fuese una persona común y por más que se esforzaba para verla con lujuria o quitarle la ropa no podía.- Debe...ser el aura pacifica- pensó bastante extrañado tratando de dar una autojustificación de que pasando con él de momento. Observo de reojo la barra de bebidas, de las que pudo divisar un buen whiskey, después de ver su tarro por unos instantes bebió el contenido de golpe, se sintió bastante bien! menos nervioso de hecho, después tomo una copa de vino y camino directo a donde se encontraba aquella dama - Buenas Noches- le dijo con bastante galantería, el lugar era propicio y él se miraba seguro por lo que no dudo regalarle una sonrisa.– Desde que me la tope no he podido dejar de verla, me permitiría invitarle un trago? – Una vez que la tubo en frente esa sonrisa de idiota se le borro el rostro, era ni más ni menos que la soberana de la corte de la primavera –Soberana Aesther!!!!? – Pregunto sintiéndose confundido y alarmado mientras se inclinaba para besar su mano y presentar su respeto. Ya se imaginaría todo lo que se vería encima si el Soberano Ajaní lo veía haciendo esto.