Tallha
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Sonríe ante todo.
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Post by Tallha on Aug 7, 2017 2:18:05 GMT
Su paso alegre no se detenía, a veces pensaba que por su altura se veía ridícula al caminar así dando leves saltitos aunque el pensamiento no la hacía dejar de hacerlo. Se fijaba en el suelo de piedra y en algunas pequeñas grietas que en el habían así como igual un poco de grama creciendo apenas visible; miraba el mecer de un árbol cercano al son del viento, finalmente su vista volvió a con la adivina dando el recorrido casi por concluido. La voz de una arcana que había llegado antes que ella la saco de sus pensamientos al mirar magnificada los ojos de la adivina; le sonrío y poco antes de llegar se quitó el bolso del hombro buscando dentro de él a un paso más lento su cuaderno y carbón, sujetando ambos objetos con su otra mano volvió a colocarse el bolso en el hombro llegando finalmente a un lado de la mesa.
Tallha dio un pequeño saludo con la mano a la albina, en verdad sus cabellos se parecían aunque el suyo fuese lila perfectamente se confundía con el blanco. Escucho atentamente al otro arcano asintiendo ante su pregunta, aunque en realidad no había formulado una incógnita para la adivina, entonces escucho como abordaba a la albina sobre unos dulces, le dio cierta tristeza el tener que declinar la oferta que aún no era contestada negando con la cabeza. Le resultaba tentador el probarlos pero no toleraba los dulces, le daban nauseas aunque, claro, dependía de su cantidad.
Un leve rubor se instaló en sus mejillas al oír el halago, esa fue la primera vez en mucho tiempo que tocaba frente a alguien, en este caso fueron varios quienes la escucharon, al recordarlo el rubor se hizo más fuerte; su música la solía considerar privada, en especial la melodía anterior y no había pensado en que alguien se centraría en ella pues solo tocó para alivianar su dolor de oído. Estreno su cuaderno escribiendo un breve agradecimiento al arcano y en parte a las otras dos por, seguramente, haberla escuchado. En cierta forma se sentía feliz de que lo hubieran hecho, pero por otra parte sentía que defraudaba a alguna persona pero no recordaba a quién. El carbón volvió a manchar las hojas así como sus dedos cuando escribió su nombre “Tallha, es un gusto” Alzó el cuaderno mostrándoles la hoja y tendió la mano para estrechar primeramente la del chico.
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Lumina
La Resistencia
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Post by Lumina on Aug 9, 2017 5:58:39 GMT
Cada vez aquella sensación de ternura crecía al ver al joven gladiador hablar, expresarse de esa forma tan animada, inocente… Tan semejante a como lo hacía su pequeño “Basta…sabes que está muerto” esa cruel oración la apegaba a la realidad, no podía, no podía seguir viendo a los arcanos que mostraban rasgos así, infantiles, animados, suaves, pero Blyer… le causaba una sensación diferente que las veces anteriores, aun si no se parecía físicamente, los ojos del chico tenían esa chispa, y eso, eso la hacía despegarse por segundos de su realidad, pero sabía que mientras más lo conociera, más moriría esa relación entre ambos, y seria doloroso, pero tenía la esperanza de que el alma de su pequeño ya hubiera renacido y con fortuna, estuviera a salvo y feliz en alguna parte, lo imploraba, pero no le preocupaba eso de momento, pues enfocarse en esa posibilidad era tan efímera y frágil que no le daba más que el consuelo suficiente para dormir en las noches de pesadillas… pero había otra cosa que tenía atenta a la arconte, una extraña sensación crecía a la par de la otra, una conocida… sabía que había algo que no estaba bien, había algo, junto a ese brillo que lo contrarrestaba, algo que ocultaba, algo que de ser ciertas sus sospechas, destruía el alma del joven, esperaba que solo fuera su paranoia, solo su imaginación, un mal prejuicio ante la pregunta de su muerte, cuando su expresión cambio ante la adivinación, y por escasos segundos, pudo ver aquella expresión en sus ojos; Ya conocía a alguien así…por segundos vio el rostro de la joven niña poseedora de ojos violeta y un hermoso cabello plateado, entrecerró ligeramente los ojos, mientras comenzaba a destapar la caja, con una sonrisa marcada en el rostro – Es una excelente idea Blyer ¿gustan de alguno? – Inclino un poco la caja para que ambas arcanas pudieran ver lo que había dentro de esta –Por favor, tómenlo con confianza y disfrútenlo, de verdad son exquisitos – Recomendó, sonriendo animada
“Giselle” Repitió ese nombre en su mente, pensando si lo había escuchado en algún momento, había algo familiar, seguramente, algún rumor por parte de sus soldados, quizás solo era una coincidencia de nombre… Pero las coincidencias a veces no son más que eventos predeterminados a suceder, rechazo la idea, quería también dejar ese pasado lleno de guerra, nombres de guerreros misteriosos que al igual que ellos habían intentado detener la gran caza, de maneras bastante diversas a las que el escudo de plata tenia, jamás aprobaría la guerra, pero a regañadientes debía admitir que era un recurso, uno desesperado que solo debía usarse cuando absolutamente ninguna otra posibilidad era factible, la muerte no era algo que ella encontrase fuera justo para los inocentes, ni para los humanos, ni para los arcanos ¿Qué sentido tenia aquella matanza sin sentido? ¿Por qué derramar sangre? No podía comprender ese deseo de sangre, de destrucción, de caos miedo y desesperación… lo aborrecía -Tiene un bello nombre señorita, creo que le combina bastante con su apariencia…- aclaro su garganta suavemente, sentía sienta vergüenza de preguntarle aquello – Me gustaría, si usted me lo permitiera, hacerle un retrato, me ha llamado potencialmente la atención la forma de su rostro, además de sus ojos y su cabello… Le pido disculpas si esto es extraño…- sonrió con completa amabilidad, esperando la respuesta mientras veía a la nueva integrante de aquel curioso conjunto de personas que se había reunido allí, pues si alguien los veía de lejos, de seguro se verían algo llamativos gracias a los contrastes de altura, físicos y obviamente, colores
Miro el cuaderno de la muchacha, sorprendida, curiosa, pero no así menos feliz de conocer a alguien nuevo, enancho más su sonrisa, respirando profundo esperando su turno de saludarla, deseaba preguntar por aquel cuaderno, empezando a escarbar más entre sus recuerdos ¿Tendría algún problema para hablar? ¿o simplemente era tímida? No quería parecer descortés al preguntar, esperaría a ver que hacia aquella muchacha – como ya me nombro Blyer, mi nombre es Lumina, es un enorme placer conocerlos a todos – Acomodo la caja entre sus dedos, con cuidado de que no se cayera ninguno – Debo felicitarla también, me ha gustado mucho su melodía – La adulo, era completamente sincera, ella disfrutaba de escuchar todo ese tipo de instrumentos, aun si el músico era inexperto y se equivocaba, disfrutaba de ese sonido, añoro por momentos volver a poner sus manos en un piano, pero llevaba décadas sin tocar música, de seguro su cuerpo había olvidado como hacerlo de buena forma, reemplazando esas bellas artes, por las artes del combate
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Blyer Bloodthorn
Los Grises
Let me take your hand... And let's fly together
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Post by Blyer Bloodthorn on Aug 10, 2017 0:08:56 GMT
Se llenaba de emoción cuando Lumina concordo con su idea de compartir aquellos deliciosos dulces con las ajenas, sabia que comer en conjunto seria mejor, aunque tan solo fueran unas golosinas. Miro con la chica que se habia integrado recientemente al grupo comenzaba a escribir en un cuaderno, Blyer ladeo levemente la cabeza con curiosidad, incluso acercandose un poco para ver que era lo que trazaba con ellas, cuando finalmente vio unas palabras de agradecimiento, ¿Habra sido por su halago? Problablemente, pero habia algo más, ¿Acaso ella no podia hablar o simplemente no queria? No queria preguntar, sentiria que seria una pregunta dura para la chica, asi que simplemente sonrio ante aquellas palabras escritas. Estrecho con gran animo la mano de Tahlla, pero con el debido cuidado, sabia que tenia bastante fuerza y no queria lastimarla por error.- ¡Es un placer, Tahlla! Espero nos llevemos bien.- De alguna manera esa sonrisa era sincera, siempre lo eran cuando conocia gente, le encantaba poder disfrutar de algunos momentos de felicidad con gente desconocida, muchas veces era rechazado, pero cuando no, disfrutaba las jornadas como si fueran las ultimas de su vida. bebiendo, comiendo, conversando, incluso cantando al son de los musicos de las tabernas, eso era vida para el.
Miro nuevamente a la chica de cabellera colorida, era un nombre comun, al menos por si solo, pues su apellido era realmente extravagante, al menos para el Minotauro.- ¡Tambien es un gusto, Giselle!.- Le sonrio tambien a ella, le era tan facil y a la vez tan dificil sonreir, pero se habia hecho esa dura promesa, siempre sonreir, ante todo, sentia que era la unica manera de no entregarse a su pasado. Miro con curiosidad a Lumina cuando ella le pregunto a Giselle si podia retratarla, de alguna manera queria poder admirar ese arte con sus propios ojos desde inicio a final, amaba hacerlo con cualquier tipo de arte realmente, volver a escuchar la musica de Tahlla, la adivinación de Giselle, y el dibujo de Lumina, lamentablemente, el no tenia mucho que mostrar.- Ustedes son increibles, yo solo se luchar... -Se rasco la cabeza dando un leve suspiro, no le molestaba realmente, si su unica utilidad era combatir, pues que asi fuera, no tenia interes en aprender otra cosa, aunque si lo intentara se le dificultaria mucho. Se acerco a Tahlla nuevamente, tenia muchas curiosidades respecto a la misteriosa chica, de todas, realmente, todas se veian como personas que debian tener una gran historia detras, quizas dolorosas, otras felices, y otras simplemente sanguinarias, como la del minotauro.- ¿Le costo mucho aprender a tocar asi ese hermoso instrumento?.- Pregunto con curiosidad a la chica, queria hacer lo posible para que esta se sintiera comoda junto a ellos, aunque habia algo, nuevamente llegaba esa sensación al pecho de Blyer, esa gran duda, ¿Si conocieran lo que hizo... Lo aborrecerian? Era inevitable para el pensarlo, sus manos estaban manchadas, con la sangre de su propia gente.
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Post by Giselle Vladgun on Aug 10, 2017 6:10:20 GMT
La tristeza se podía vislumbrar en el rostro de la chica llamada Lumina, de melancólicos ojos cubiertos por su flequillo cano, pero esas intenciones por enmascarar tanto dolor no pasaron desapercibidos por Giselle, pero no era quien para andarse fijando por eventos ajenos del pasado. Aún así, Lumina en buen gesto de bondad compartió los dulces que tenía. Giselle solo tuvo que mirarlos fijamente para que uno de ellos flotara entre tambaleos hasta su boca. Su sabor dulce calzaban perfecto con el ambiente de la celebración.
-Se lo agradezco -Dijo suavemente tras recibir el cumplido hacia su nombre. En ese instante su rostro se tiñó con dulzura al revivir cierto recuerdo- Ese nombre me lo otorgó un Dragón, amado por dragones, por hombres y por el sol -La figura del monarca caído vino a su mente. Fuerte, poderoso y benévolo ante quien hiciera su hogar debajo de las alas de su reino, de una tierra donde se besaban la tierra y el mar en gloria por los dragones que convivían en paz entre altas murallas sinuosas.
Regresó con los pies en la tierra cuando Lumina solicitó retratarla. Aquello ciertamente la incomodaba, pues su apariencia no era más que el cascarón de lo que alguna vez había sido el rostro que se había enamorado del rey de los dragones, y su cabello... Para Giselle era una maldición que nunca pudo deshacer por más que lo intentó buscando y rebuscando en el libro que despertó con ella. Más no pretendía mostrarse grosera con quien había mostrado interés en las cartas, siempre sería agradable tener un recordatorio de como era su rostro antes de que todo terminase.
-Siéntase con toda la libertad de plasmarme en el papel -Aceptó asintiendo amablemente. La revelación de la discapacidad de Tallha resultó un tanto curioso como contundente, pues con tantos hechizos en el haber de los Soberanos y Boticarios, le sorprendía que hasta en Mirovia llegasen padecimientos que se podrían decir "Muy humanos" Pero ese no fue impedimento para que se relacionase con los presentes, especialmente con Blyer quien no dejaba de bombardear a la pobre chica con preguntas, a lo que Giselle solo podía reir por lo bajo en un tono suave.
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Tallha
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Sonríe ante todo.
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Post by Tallha on Aug 10, 2017 14:27:12 GMT
Sonrió ante el ánimo en que Blyer sacudió su mano, si hubiese podido una risa hubiera salido de sus labios pero solo se vio su boca moverse sin producir sonido alguno, asintió a sus palabras pro-cediendo a extenderle la mano a la otra persona cercana a ella. Escucho la respuesta de Lumina a la pregunta del chico, empezando a dudar sobre el sí poner un poco a juego su salud momentáneamente para probar uno de esos dulces…que…se…veían…muy buenos “Oh, vamos. Si te vas a poner en esas toma uno” se dijo a si misma dando una leve reverencia en agradecimiento, con su mano izquierda, la que estaba limpia, agarrando el primer dulce que vio para luego llevarlo a su boca y dando una mordida pequeña saboreando al instante lo delicioso que estaba.
Dio una sonrisa tímida a Lumina mientras sus mejillas lentamente tomaban un tono rosado gracias al halago. Sentía que se perdía de algo en ese lugar, miro el rostro de los tres presentes ¿Qué sería? Negó con la cabeza a su propia pregunta, igual no sería de su incumbencia. Escuchó las palabras del chico curiosa. –“La lucha también es un arte, aunque depende del punto de vista de cada quien”– Escribió dedicándole una sonrisa pues era cierto, en su antiguo hogar su padre y su hermana lo adoraban, así como sus dos hermanos menores con peleas amistosas que ocurrían a cualquier hora en cualquier lugar. En fin, ellos lo hacían con mucha gracia a decir verdad, eran movimientos limpios; Tallha adoraba cuando durante las peleas caían en picada de alguna forma sorprendiendo al adversario, consideraba tonto el asombro pues siempre lo hacían y siempre a los otros les tomaba desprevenidos, suponía que era por el momento en que lo ejecutaban. Esas luchas las hacían cada cuanto podían entre su clan y otro de hipogrifos con quienes compartían los límites del área…
Salió de sus pensamientos escuchando las palabras de Blyer ¿Le había costado aprender? En realidad no. Con una sonrisa y en estado ausente se dedicó a rememorar cuando tenía cincuenta años, recordando a una joven que era ciento veinticinco años mayor y quién fue su primera y única maestra; la recordaba bien con su cabello igual liliáceo y ojos castaños, su música llenaba de alegría las tardes que pasaba en la aldea, y cuando ella supo que Tallha añoraba el aprender a tocar la flauta con mucha emoción la levanto del suelo y la abrazo, recordaba el cómo dejo doliendo sus brazos porque además de sacarle mucha más altura era más fuerte. No le enseño sólo la flauta de pan sino que fue quien le enseño la ocarina y de ella supo cómo cortar y tallar correctamente la madera para hacer un buen instrumento de viento, o al menos los que su maestra conocía y poseía; en cuanto a la música era muy entusiasta pero tenía muchas obligaciones que cumplir por lo que varias de sus clases se vieron aplazadas. Eso le ponía triste, eso y el no saber cómo estaban sus demás seres queridos, sus hermanos, su padre, Mako y la anciana loca de la aldea a quienes tanto amaba; ya llevaba un mes y medio ahí y en verdad le sentaba mal el sentirse tan despreocupada sobre lo que les pudo haber sucedido o el intentar regresar a su hogar… Ese era el problema, se sentía extrañamente cómoda en Mirovia ¿Era una mala persona por sentirse así? ¿Una mala estudiante? ¿Una mala hija, hermana y amiga?
Sacudió su cabeza regresando a la realidad, recordando la pregunta de Blyer una sonrisa surco sus labios mientras escribía. –“No, todo depende de si tienes un buen maestro… Y claro de tu nivel de aprendizaje”– se apresuró a terminar mostrándole la hoja.
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Lumina
La Resistencia
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Post by Lumina on Aug 11, 2017 19:16:04 GMT
El ambiente era grato ahora que estaban allí, conversando, conociendo, Lumina se sentía ligeramente en paz, calmada, se sintió feliz de que aquella personas decidieran compartir los dulces que ella les ofrecía, saco uno y lo metió en su boca antes de guardar la caja en un bolsillo en el que cabía pero no podía ser cerrado, degusto suavemente el dulce, mientras escuchaba la conversación y recibía la autorización de la adivina para retratarla, asintió feliz, aun con el dulce en la boca, la verdad era que la arconte demoraba en comer, pues gustaba de disfrutar de lo que tenía en la boca hasta el máximo, pasaba su mirada del joven al cuaderno de la chica, para saber de qué hablaban, y termino de tragar por fin el dulce, justo a tiempo para acotar algo a la conversación – Concuerdo con la señorita Tallha, no deberías desmerecerte, el combate y la lucha son artes en su respectiva medida, tan validas como la pintura la música o el teatro, pues son disciplinas con valores y además con un requerimiento mayor, que necesita tiempo y dedicación, no cualquiera puede luchar correctamente, por supuesto si la vida dependediera de una lucha, cualquiera podría lanzar un golpe, y aun así no sobrevivir, pero cuando se tiene conocimiento y se dedica a algo como ser un gladiador, donde el objetivo es mostrar el poder y el dominio de una persona sobre otra, hay más estándares y reglas que en una lucha callejera- Respiro suavemente, mientras miraba a Blyer con una sonrisa amable – Eh visto por mí misma la diferencia y considero que a pesar de ser contrario al resto de las artes, el combate si merece tener su grado de arte al ser correctamente ejecutado- Sentencio mientras se sentaba en la banca junto a la adivina, acomodando cuaderno sobre su pierna y tomando el carboncillo negro
Observo unos momentos a la dama junto a ella, pensando en silencio – Voy a comenzar, puedes moverte y hablar, pero por favor no te levantes del asiento, es lo único que te pido – La voz cantarina de la mujer estuvo acompañada de una mirada amable, Lumina soltó un suave suspiro mientras sus ojos analizaban los detalles de la adivina ¿Qué era realmente lo que quería dibujar de ella? No era su apariencia real, era esa aura de misticismo que la seguía, poso el carboncillo en sus labios, manchándolos un poco más de negro, era una muy mala costumbre que tenía, pero sentía que si no lo hacía realmente no iba a conseguir el resultado que deseaba, estiro el brazo para comenzar a trabajar, moviendo su dedo por el lápiz mientras miraba a la mujer y seguidamente pasaba al papel, creando el suave sonido del carboncillo, línea tras línea, apenas un bosquejo, nada que se entendiera por completo. Se acomodó nuevamente en el asiento, cambiando ligeramente el ángulo del cuaderno y volviendo a dibujar, su mirada pasaba de la mujer a la hoja, pero no movía su cabeza, sonrió, disfrutando de aquel dibujo, estaba consiguiendo captar esa esencia, más que el rostro de la mujer, se felicitaba a si misma internamente, sorprendiéndose de su mejora en tan poco tiempo
Estuvo así unos largos minutos más, hasta que ya solo miraba la hoja, repasando algunas líneas, brindándole más detalles, sonrió victoriosa de su trabajo, metiendo la mano limpia en su bolsillo para sacar un pañuelo y así comenzar a limpiar sus dedos que ahora eran negros – Eh terminado… disculpa si eh tardado o ha sido incomodo- Aclaro con una sonrisa suave, la verdad se había demorado más de lo común, pues era un dibujo pequeño a comparación de otros que había hecho – Espero que sea de tu agrado – Comenzó mientras estiraba el brazo con el cuaderno en su mano, con el lugar donde estaba el retrato de la mujer, más apegado a la esquina, a pesar de que no era absolutamente fiel, si lograba dar esa sensación de misterio y hermosura que la alta peliblanco sentía ante la presencia de Giselle. Un sonido interrumpió el ambiente, el estómago de Lumina emitió un quejido, hambre, hambre que no podría ser detenida con dulces y golosinas, necesitaba una comida contundente, las mejillas de la arconte de encendieron fuertemente ante la vergüenza, carraspeo ligeramente, para aclarar su garganta – Lo lamento… pero tengo algo de hambre ¿gustan acompañarme a comer algo? También si desean beber puedo invitarles una cerveza… Claro, si es que quieren…- No quería obligar a nadie, pues en realidad solo se habían conocido por una mera casualidad y no era su intención hacerlos sentir incomodos
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Blyer Bloodthorn
Los Grises
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Post by Blyer Bloodthorn on Aug 12, 2017 17:27:38 GMT
Miro con cierta sorpresa las palabras escritas por Tahlla ante las palabras anteriormente mencionadas por el Minotauro, escuchando también a Lumina la cual comenzó a argumentar respecto al porque la lucha debía ser considerada un arte como muchas de las demás cosas, Blyer lo sabia, lo sabia perfectamente, que la lucha en muchos casos se trataba de estrategia, dominio, poder y ademas, un gran sentido del honor, pero eso era exactamente lo que causo que la mirada de Blyer se tornara a una muy levemente angustiada con una sonrisa forzada en su rostro.- La lucha... solo puede ser considerada un arte, si se posee el honor correspondiente al luchar...- Comento en voz baja mientras desviaba un poco la mirada, ¿Como podía tener honor si sus manos estaban manchadas con tanta sangre? Era imposible, o al menos, eso creía el Minotauro. Miro a Tahlla nuevamente para leer las palabras en respuesta a su pregunta, a lo que Blyer llevo su mano a su mentón.- Mhmm... Ya veo, supongo que me costaría mucho aprender hahaha .-Se rasco la cabeza mientras se reía, la verdad su capacidad de aprendizaje no era de una calidad muy destacable, a pesar de que se esforzaba cada vez que intentaba aprender cosas nuevas, muchas veces no lo lograba o simplemente no podía sacar todo el provecho que le gustaría a aquellos aprendizajes, algo que de alguna forma lo decepcionaba y frustraba bastante, puesto que sus ganas de aprender cosas nuevas era inmenso.
Noto como Lumina procedió a sentarse junto a la Adivina, al parecer iba a comenzar con su dibujo, y lo confirmo con las palabras que le dirigió a Giselle, Blyer camino rapido hasta quedar a espaldas de Lumina, pero a una distancia prudente para no distraerla, quería ver como retrataba a la chica de colorida cabellera, observar cada detalle y trazo en el papel con la ayuda del carboncillo. Los minutos pasaban lentamente mientras Blyer no dejaba de mirar el cuaderno de Lumina, viendo como aquellas lineas que en un principio no tenían mucho sentido comenzaban a tomar forma, lentamente se mostraba la figura real que Lumina quería retratar, los ojos del Minotauro mostraban gran sorpresa y admiración por como la chica de cabello blanco dibujaba, le parecía realmente increíble, y de cierta forma eso pudo distraerlo de aquella punzada en su pecho que siempre sentía. Al cabo de un largo rato, el dibujo finalmente fue terminado, podía notar el orgullo que sentía Lumina al darlo por finalizado, Blyer sonrió cuando vio su arte, aunque habían detalles mínimos, el dibujo estaba hermoso a sus ojos, realmente captaba la esencia de la misteriosa mujer de ojos coloridos.- ¡Quedo genial! ¿A que si!?.- Comento con emoción, quería también pedirle un dibujo pero sentía que seria muy desubicado hacerlo, así que simplemente se quedo con aquella idea en su cabeza, quizás más adelante podría pagarle por uno.
Un sonido capto la atención del Minotauro, el estomago de la chica de cabello blanco hizo presencia con aquel gruñir, notando como la ajena se ponía roja por aquello, para posteriormente dar aquella proposición a los presentes.- ¡Claro! Yo pago las cervezas.- Se apunto con su pulgar de forma animada, no quería dejarle todos los gastos a ella aunque los estuviera invitando, esperaba que las otras dos chicas aceptaran, una comida de cuatro, eso realmente lo animaba.- ¿Que dicen? ¡Vamos, sera divertido!.- Dijo mirando a la adivina y posteriormente a Tahlla, con una gran sonrisa, incluso ya pensaba que quería comer, tenia muchas opciones: Carne de jabalí, Caldo de verduras, Pescado, ¡Incluso algo dulce como Pastel!, a pesar de que el Minotauro no era para nada exigente con lo que comía, tenia ciertos gustos por sobre otros, como todas las personas.
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Post by Giselle Vladgun on Aug 15, 2017 5:51:28 GMT
Era poco común para Giselle estar rodeada de tantos arcanos, pero se sentía extrañamente complacida con la presencia de todos mientras ella procedía con la lectura de las cartas que no dejaban de barajarse como si estuvieran vivas. Solo necesitaban del tacto de la mano de su dueña para retornar a su estado inerte, pues lo único que las movía era la debil magia que emanaba del aura de la dama.
Cuando Lumina se acercó, por un instante el aire mismo pudo dejar de respirar por la cercanía de sus auras, algo que dejó de sentirse en el mismo instante en el que se produjo, como la sensación de acostumbrarse a la temperatura del agua. La adivina estaba agradecida de que ninguno de los presentes tuviera habilidades extra sensoriales, o se podría haber sentido la amenazante presión de la forma arcana acechando sin mesura a quienes ahí se divertían.
-Permaneceré quieta como el papel -Dijo mirando de reojo como Lumina procedía a estudiar las facciones de su rostro antes de comenzar a pintar.
-Aceptaré con gusto la invitación a la bebida -Dijo poniéndose de pie y tocando el mazo de cartas con su mano que dejaron de moverse y desaparecieron al pasar su manga por encima. La mesa al igual que las cartas se esfumó en un parpadeo entre el paso de la manga de Giselle de un extremo de la mesa al otro, pero había sido tan fluido que la transición pudo haber sido omitida hasta de la vista de un halcón.
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Tallha
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Sonríe ante todo.
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Post by Tallha on Aug 23, 2017 19:38:29 GMT
Proceso las palabras dichas por Lumina asintiendo feliz, recordando igualmente su presencia en varias luchas quedando siempre maravillada en la forma en que era ejecutado cada movimiento, aunque uno de sus hermanos se burlaba de ella por eso. Volviendo al tema de la música, hizo una mueca de lado pensando en sus palabras, finalmente se encogió de hombros restándole importancia haciéndole un gesto con una pequeña sonrisa. Tallha se posiciono al lado de Blyer, observo atenta y con una sonrisa los trazos que la albina realizaba, le fascinaba el proceso de creación de un dibujo y el como “cobraban vida”; tal vez después le pudiera pedir un consejo. Concordó con las palabras de Blyer dando unos suaves aplausos como cumplido al trabajo realizado, quizás en algún momento le pudiese pedir que le diese algún consejo.
Escucho las contestaciones de los demás ante la propuesta de Lumina, si bien no tenía sed no se negaría a hacerles compañía. Dio una respuesta afirmativa con la cabeza bajando el cuaderno hasta posicionar el brazo a su costado dispuesta a emprender el camino junto a ellos.
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Lumina
La Resistencia
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Post by Lumina on Aug 24, 2017 5:46:35 GMT
Las mejillas de la pálida mujer ardieron con suavidad ante las adulaciones, bajando la mirada apenada, realmente no creía ser tan buena, sabía que tenía defectos aun para alcanzar algunas cosas que quería, pero se esforzaba, había tenido un buen maestro… -Les agradezco mucho… aunque aún me falta practica- agradeció con suavidad, sonriendo ligeramente orgullosa, si había mejorado, gracias a quien le enseño, un excelente maestro, por su memoria paso el primer retrato que recibió de su marido, cuando aún eran muy jóvenes, y tiempo parecía ser solo un rumor vago para ellos, que jugaban en los jardines del templo, que se daban cartas… se preguntó si aún estaría aquel retrato de esa tarde de verano, donde ella se había quedad dormida junto a un árbol, en paz, tan relajada… Se preguntó por momentos, si el realmente la había besado o había sido un sueño…jamás se lo pregunto, era tan feliz, que no sentía que hiciera falta preguntar….dioses, como lo extrañaba – Me alegro que acepten mi invitación – comento feliz, guardando suavemente el cuaderno en su mochila, se había acabado el espacio, tendría que comprar más, practicar más… deseaba que aquel diario de viajes fuera perfecto, ese era su mayor deseo en esos momentos… el único que reinaba el roto corazón de la arconte
Se levantó con suavidad, levantando poco después su enorme mochila y acomodándola en su espalda, para voltear a ver a Blyer con duda –Tú te vez muy joven para beber a mi parecer…. ¿realmente tienes edad para eso? – interrogo firmemente, acercándosele con una mirada inquisitiva, esperando la respuesta. Pero su estómago le quito poder, volviendo a sonar, reclamando el alimento, decidió dejar al chico tranquilo, soltando un suspiro suave - Vi un local cerca de aquí que parecía tener buena comida y también vendían cerveza, creo que podríamos estar cómodos allí…-ofreció, señalando a una calle menos transitada y comenzando a caminar a paso suave, meciendo las caderas con lentitud, elegancia y firmeza, habían ciertos gestos que no había podido ocultar de su pasado, sencillamente estaba demasiado acostumbrada a ese caminar firme y seguro, aun si no tenía tales sentimientos dentro de ella, se acercó un poco a la mujer de cabellos coloridos, sonriéndole – de verdad te agradezco que me dejaras retratarte… sé que es algo extraño la verdad, pero disfruto de retratar a los arcanos que poseen algo que me llama…- si bien sentía que no debía mencionar más el retrato, quería volver a agradecerle y expresar su pensamiento, quizás eso haría que la mujer comprendiera un poco el porqué de la petición
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Blyer Bloodthorn
Los Grises
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Post by Blyer Bloodthorn on Aug 24, 2017 18:07:24 GMT
Se alegro bastante cuando ambas personas que acompañaban a la Arconte y al Minotauro accedieron a acompañarlos a comer y beber algo, era una sensación de convivencia que pocas veces podía disfrutar, era cálida, y a la vez dolorosa, pues le dolía que no pudiera volver a hacer aquellas reuniones con su pueblo, para beber y comer, aun así se sentía feliz de poder compartir de esa manera con gente.- ¡Bien! ¡Entonces vamos!.- Comento con gran entusiasmo mientras miraba a sus acompañantes, para luego ver como Lumina comenzaba a prepararse, y luego aquella pregunta que para cualquiera seria una simple duda, para Blyer, casi significo un insulto, su rostro lo demostraba, uno que mezclaba molestia, y frustración, ¿A que se debía? Su familia, los Bloodthorn, eran quienes más tenían resistencia al alcohol en su pueblo, y en toda Mantinea de hecho, sabia que no podía culpar a la ajena por no saberlo, pero aun así se sintió relativamente ofendido ante ello.- ¡Hmf...! En mis 170 años que llevo bebiendo, ¡Jamas habían puesto en duda la capacidad para beber de un Bloodthorn!.- Respondió a la vez que comenzaban a caminar, cruzándose de brazos con un aire de molestia, ¿Porque se ponía así por una simple pregunta? Pues en su pueblo, la capacidad de aguantar al beber era una especie de cultura, bastante tonta para quien lo pensara bien, pero para Blyer, significaba mucho.- En cuanto lleguemos al local que dice, ¡La reto a ver quien aguanta más la bebida!.- Reto a Lumina mientras la miraba con aquel aire decidido, no se iba a quedar callado, aunque fuera una razón para muchos estúpida.
Trato de relajarse un poco dando un leve suspiro, volteándose a ambas chicas que los acompañaban.- Si quieren pueden unirse también, ¡Una competencia es mucho más divertida de a varios!.- Pareciera que aquel semblante de molestia se había esfumado tan solo por la idea de volver a tener una competencia de bebidas, lo animaba, le hacia ilusión de cierta maneras, tan solo esperaba que las ajenas aceptaran aquella proposición. Miraba alrededor mientras caminaban, notando mejor lo animado que se encontraba todo, para luego ver a Lumina.- ¿Donde se encuentra ese local?.- Fue una duda más que nada para mantener alguna conversación mientras caminaban, aunque el Minotauro era bastante malo para sacar temas de los que hablar, por lo general esperaba que otros los pusieran y el pudiera acompañar con comentarios.
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Post by Giselle Vladgun on Aug 26, 2017 22:12:47 GMT
Iban de camino a un bar cercano cuando Lumina cuestionó la edad de Blyer, lo que Giselle acompañó con una modesta risilla.
-170 años? para mis 251 todavía eres un bebe- Comentó sin afán de ofender y posando sus ojos afilados en el minotauro.
En ello, Lumina le agradeció por haberse dejado retratar, cosa que no debió de haber hecho, pues una vez más le hizo recordar a Giselle una epoca más feliz.
-Yo soy la que debería mostrar gratitud -Corrigió a la arconte- El don de la pintura muy pocos son capaces de hacerlo con tanta precisión -Dijo recordando la imagen de dicho retrato- He conocido a muchos artistas a lo largo de mi historia, pero solamente algunos pudieron capturar a otros como si pintasen paisajes.
De aquel reino que los dragones llamaban hogar, donde los bardos tocaban la flauta mientras los artistas y escultores retrataban la pristina belleza de los cielos de los dragones.
-Una competencia de bebida? -Lo consideró un momento, pues aunque técnicamente seguía teniendo 3 cabezas en forma arcana, hacía ya siglos que su maldición no le permitía sentirse como tal, por lo que su resistencia debería haberse debilitado tanto como sus poderes originales.
-Acepto, pero si pierden tendrán que hacerme un favor -Añadió guiñando un ojo. Aquello era una oportunidad que no se podía perder.
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Tallha
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Sonríe ante todo.
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Post by Tallha on Aug 27, 2017 23:43:35 GMT
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Lumina
La Resistencia
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Post by Lumina on Aug 31, 2017 22:47:57 GMT
El camino hacia la tienda apenas había comenzado, cuando la joven de cabellos cortos y claros llamo su atención, mostrándole un papel, disculpándose en este y luego, la vio marchar lejos, se extrañó, hasta cierto punto se preocupó, pero no la iba a seguir, quizás había recordado algo que debía hacer con urgencia, a veces pasaba- Que te vaya bien- Se despidió con la mano, hasta ver la delgada figura desaparecer, entonces decidió retomar el paso y la conversación anterior, mirando a Blyer con una sonrisa – No esta tan lejos de aquí la verdad, pero si tenemos que caminar por unos minutos… esperemos que no esté llena, la comida era exquisita- Sonrió feliz, entusiasmada de poder compartir con más arcanos, de poder ir retomando lentamente su vida normal… ¿Su vida había sido normal en realidad? – Me parecías mucho más joven la verdad… es decir, sigues pareciéndome joven comparada con mi edad- una risa suave se escapó de los labios de la mujer, un sonido extraño, curioso, la mujer cubrió su boca buscando ahogarlo – Y debo rechazar tu invitación la verdad… yo no debería beber…- y no era mentira, desde la muerte de sus compañeros había evitado el alcohol, lo repudiaba, le traía recuerdos de aquellas torturas, de la muerte, de la tristeza inmensa que aún estaba apegada a su pecho
Las calles por las que los arcanos transitaban estaban relativamente vacías, a pesar de que había algunas personas y puestos pequeños, la calle estaba relajada, sencilla, y eso relajaba a Lumina, a veces le era difícil andar entre muchas personas, les recordaba a sus años en la utopía, con saludos, ayudando, jugando con los niños… Un nudo se formó en la garganta de la arcana, quien trago repetidas veces para quitárselo – y… ¿Han disfrutado del festival? – comento en tono suave, mirando hacia el lado para ver a los otros dos arcanos, esperando una respuesta, ya iban a mitad de camino, no había mentido, estaban cerca, unos minutos más y llegarían al bonito local, la boca se le hizo agua de pensar en comer toda aquella exquisita comida
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Blyer Bloodthorn
Los Grises
Let me take your hand... And let's fly together
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Post by Blyer Bloodthorn on Sept 1, 2017 19:15:01 GMT
Le alegraba que Giselle hubiera aceptado aquella competencia, aunque, ¿Hacerle un favor? Eso lo hizo dudar, aunque también hacia más divertido el hecho de la competencia.- ¡Claro! Eso si es que gana, haha.- Comento animado mientras continuaba caminando. Se extraño bastante cuando la ajena escribió que debía irse, el Minotauro dejo escapar un suspiro de desanimo ante ello, no pensaba que su presencia duraría tan poco.- Esta bien... ¡Procura cuidarte mucho, nos veremos en otra ocasión!.- Comento con animo despidiendo a la chica con la mano antes de que esta desapareciera entre la multitud. Volvió a cruzarse de brazos ante el comentario de Lumina, parecía joven, eso no lo negaba, incluso podría decirse que infantil en muchas de las situaciones que se le presentaban que podrían describirse como vergonzosas la mayoría de ellas.- Si, lo se... ¡Aun así, no debe subestimar mi capacidad para beber!.- Comento con gran animo y cierta molestia, su comportamiento aveces era bastante raro, pero el era así, que se le podía hacer. Su decepción solo aumento más cuando la competencia que había propuesto fue rechazada por Lumina, ¿Aun lo creía demasiado joven? ¿O quizá era otra razón, el Minotauro dudaba, aun así iba a replicar.
¡Vamos! Sera divertido, o quizá tiene miedo.- Dijo en que mezclaba burla y a la vez un reto, si, totalmente infantil era la actitud del Minotauro, quizá la competencia solo era una excusa para beber por montones, como a el le gustaba, nada de limitarse, o quedarse con unas cuantas jarras, no señor, debía aprovechar al máximo aquella salida que prometía diversión, o al menos, eso quería, y deseaba creer el Minotauro. Al parecer, ya no quedaba nada de distancia entre ellos y aquella tienda de la que hablaba la Arconte, de alguna manera ya se le hacia agua a la boca con tan solo pensar en poder comer algo aunque, no hace mucho lo hubiera hecho.- Pues, si, un poco, ¡He encontrado buena comida!, ¿Y ustedes?.- Pregunto curioso a las dos mujeres que lo acompañaban, era bueno tener alguna conversación en lo que llegaban a su destino, se preguntaba que clase de comida podrían tener, esperaba que tuviera carne de jabalí que tanto le gustaba, aunque cualquier cosa que llenara la tripa le serviría.- ¿Que pedirán cuando lleguemos? .-Pregunto sin más, le interesaba de algún modo saberlo, quizá para poder adaptarse a lo que ellas pedirían y no estar tan fuera de lugar al momento de comenzar a pedir sus comidas y tragos correspondientes.
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