Abraham Shelley
Los Invictos
El pasado por más que se deje atrás, te alcanzara.
Posts: 86
|
Post by Abraham Shelley on Sept 19, 2017 17:31:13 GMT
—De hecho, no… pero no suena una mala idea tener nuevamente una tienda de flores. Una vez tuve una, aunque fue hace mucho tiempo atrás— La melancolía era arrastrada entre sus labios con aquellas cinco últimas palabras.
—Pues... quizás solo sea una suposición…— Observo por unos segundos mientras observaba como sacaba nuevamente de las flores los pétalos amarillos. Margaritas, aguaturmas y aleluya, aquellas eran las flores a las cuales Dahlia les estaba quitando sus pétalos y resultaba extraño pues aquellas flores no solían crecer juntas ni menos en el mismo ecosistema. Realmente aquel bosque resultaba ser un edén para las flores.
—Pero si eres sastre seguramente lo que vistes es un trabajo que tú mismo diseñaste y he de decir que es bastante precioso— Aun cuando sus palabras estaban cargadas de sinceridad también tenían un tenue tinte de incertidumbre.
Hem que no quería ser menos también se agacho junto a Dahlia y empezó a recolectar flores, pero a diferencia de la elfa el parecía sujetar con cierto cuidado el tallo de la flor y con su otra mano cuidadosamente y bastante más lento que su compañera empezaba a arrancar cada pétalo de la flor que tenía entre sus manos con sumo cuidado. Su semblante parecía algo serio, incluso parecía fruncir levemente el entrecejo de su rostro mientras iba quitando el amarillo del verde de la flor.
Apenas y llevaría un cuarto de lo que Dahlia ya tenía recogido entre sus manos y llenado en sus frascos.
|
|
Martina
Los Invictos
Hilos y Agujas
Posts: 199
|
Post by Martina on Oct 5, 2017 16:32:17 GMT
Tenía deseos de preguntar cómo alguien que alguna vez fue un florista termino en el estado en el que él se encontraba actualmente, ya tenían varias horas charlando y podría ser buen momento para hacer preguntas un poco más directas.
Aun con la mirada al frente le hace una pequeña pregunta, intentando sonar de lo más casual - “ que fue lo que paso con tu tienda?” -le dice, su comentario lo había hecho sonar a que el solía tener una. Se sorprende un poco cuando este se inclinó su lado para recoger materiales, y en un parpadeo había terminado con todo el trabajo (..!! ) Martina era un elfo que paso toda su vida rodeada como otros iguales a ella y gracias a eso solía olvidar que ahora no estaba tratando con seres iguales a ella …. La habilidad sobrenatural de Hem fue un recordatorio que se sintió como un escalofrió - “.. ha..haha, parece el trabajo ya está terminado!”
|
|
Abraham Shelley
Los Invictos
El pasado por más que se deje atrás, te alcanzara.
Posts: 86
|
Post by Abraham Shelley on Oct 9, 2017 6:47:53 GMT
—Aquello...— Por unos minutos se mantuvo pensativo mientras los pétalos de sus manos eran guardados en los frascos de Dahlia, su silencio se alargó unos segundos más, no era un silencio incomodo pues la pequeña elfa podía ver en los ojos del vampiro la tranquilidad del pensamiento, estaba recordando, moviendo aquellas baldosas que habían cubierto su mente como una coraza que al fin podía ser removida pasado el peligro.
Un débil suspiro escapo de sus labios observando ahora con cierta melancolía un pétalo de margarita que se había quedado pegada en su palma. Solo cerro su puño sobre ella.
—¿Por qué no nos sentamos? Es una historia algo larga— Giro su cabeza hacia ambos lados buscando algún lugar donde se podrían sentar, uno en el cual descansar mientras el sol aún se mantenía en lo alto del mundo, aunque ya empezaba a bajar hacia el atardecer faltaría mucho aun para que llegase a oscurecer. Observando bajo un manzano pudo ver un gran tronco podrido seguramente vestigios del árbol que antes ocupaba el lugar, se dirigió junto a Dahlia al tronco donde se sentó y gentilmente con su mano limpio el lugar donde su compañera iba a sentarse.
—Tuve que huir— Sus ojos miraron el pétalo en su mano, sin notarlo la había arrugado —Vivía en el continente humano, no sé si tu llegaste a vivir allí, pero sinceramente espero que no.
En aquel mundo del cual bueno, muchos huyeron, tuve en una gran ciudad frente a una hermosa plaza una florería, una tienda la cual era concurrida por niños curiosos que deseaban tocar los pétalos de las amapolas, parejas en busca de las delicadas rosas y ancianos que deseaban reencontrar sus viejos recuerdos en los capullos de las glamelias.
En los ojos de Hem se pudo ver la felicidad de aquel recuerdo.
—Pero aun así la caza a los arcanos por parte de los humanos nuevamente me alcanzo, los arcanos que se ocultaban eran igualmente descubiertos, algunos amigos míos los cuales... bueno, no encontraron un buen final— Y aquella felicidad fue borrada nuevamente por la melancolía de aquel vampiro.
—Se llamaba "Flores del Sol" mi tienda, seguramente ya fue remodelada y otra tienda ocupa su lugar o bien lo volvieron viviendas— Una brisa atravesó aquel bosque y con cierta dulzura hizo volar el pétalo que descansaba en su mano el cual se perdió de su vista a los pocos metros ir hacia la exuberante vegetación del bosque.
—Abraham Shelley, ese es mi nombre— Sus palabras parecían arrastrar aun la melancolía del ultimo recuerdo, pero su rostro nuevamente forzaba una dulce sonrisa la cual era una sonrisa perfecta que era capaz de convencer a cualquiera de que “todo estaba bien”, era el perfecto mentiroso, pero uno que solo se mentía a sí mismo para no afectar a los demás.
|
|
Martina
Los Invictos
Hilos y Agujas
Posts: 199
|
Post by Martina on Oct 21, 2017 2:24:55 GMT
El pausa silenciosa de Abraham le hizo temer quizás pregunto algo indebido… aunque la expresión del joven era difícil de leer, se le notaba bastante relajado. Asintió a su propuesta y lo siguió hacia un tronco el cual usarían de asiento, sus tareas del día ya habían sido terminadas y sentía curiosidad sobre lo que él tenía que decirle.
Hem se había adelantado y limpio el lomo del tronco de las hojas secas y restos de pequeñas ramas para que tomara asiento. Coloco sus propias manos sobre su regazo acomodándose al sentarse y escuchar. Las ropas del vampiro no hicieron muy difícil de suponer algo malo le había sucedido, mantuvo una expresión seria al escucharlo hablar sobre el lugar donde solía vivir. Él tenía razón, ella había pasado el resto de su vida con otros elfos iguales a ella y no conocía a los humanos, solo podía imaginar la desesperación el debió haber sentido después de vivir todo eso .. Pero parecía estar contento de recordar ciertas cosas sobre su pasado.
No tenía mucho que aportar sobre las diferencias y maneras de pensar de razas completamente diferentes, sabia los elfos podían llegar a ser así aunque no a esa escala.. lo observo unos segundos pensado que debía decir ante una situación así. Ella no había experimentado algo similar para poder dar alguna opinión que pudiera confortarlo.
Sonrió un poco al escucharlo mencionar su tienda y su propio nombre. Martina no podía hacer mucho sobre el pasado, pero sabía que eso no quería decir el no pudiera volver a tener aquello que le causo felicidad. Empezar de nuevo quizás. Aprovecho Abraham tenía su mano abierta y extendió su mano para dejarle algo en la palma. Se trababa de un trébol común y corriente, Martina no sabía nada de plantas y olvido por un segundo eran los de 4 hojas los que eran considerados de buena suerte.
“Mucho Gusto Abraham, mi nombre es Martina” -le dice presentándose de nuevo, formalmente esta vez. – “Sabes, a este lugar le vendría bien una “Flores del Sol”. No veo porque no puedas volver a trabajar en las cosas que te gustan “
|
|
Abraham Shelley
Los Invictos
El pasado por más que se deje atrás, te alcanzara.
Posts: 86
|
Post by Abraham Shelley on Oct 26, 2017 19:34:13 GMT
Su mirada había quedado fija en la dirección donde los pétalos se habían perdido de vista, pero una extraña calidez en su mano hizo que bajara su mirada para observar la viva cálida y viva piel de la elfa ¿Notaria la frialdad de su mano? Hacía mucho que no pensaba en ello, pero aquellos pocos segundos que estuvo en contacto con Dahlia le hizo recordar su naturaleza muerta.
Sus labios se entreabrieron en una sonrisa dejando ver accidentalmente sus colmillos al notar el pequeño brote de trébol que ahora descansaba en su mano junto al nombre que ahora le era confesado y las palabras de revivir nuevamente en aquel nuevo mundo un recuerdo que ciertamente guardaba con mucho cariño en el corazón de su ser.
Abraham con cuidado introdujo su otra mano en el bolsillo derecho de su pantalón del cual saco una pequeña bolsa la cual al abrir se pudo oler la humedad que había en su interior y como en su interior descansaba otra pequeña bolsa la cual igualmente abrió, en ella pequeñas semillas de distintas plantas descansaban protegidas y ahora junto a ellas deposito el trébol que Martina le había obsequiado, cerrando ambas bolsas volvió a guardarlo en su pantalón, su pequeño tesoro.
—Es un lindo nombre, como el de una flor— Y aquella flor tendría pétalos naranjas y un bello color de tallo como el de los ojos que se paró a contemplar por unos segundos obligándose a desviar nuevamente su mirada para no incomodarla.
—Si, creo que seguiré tu consejo, abrir una nueva florería es algo que me encantaría— El día avanzaba sin que ellos lo notaran, no quería quitarle más tiempo a Martina, disponiéndose para levantarse del tronco donde se encontraban sentado se vio de pronto invadido por una duda que hizo que abandonara sus acciones para encontrarse nuevamente sentado observando el vivo rostro de la elfa.
—¿Que significa Hem?— Habían dicho sus nombres y antes a Martina le había mencionado que su nombre provenía de una hermosa flor, pero la palabra Hem para el vampiro le era completamente desconocida y deseaba saber que significaba para no quedar con la duda.
|
|
Martina
Los Invictos
Hilos y Agujas
Posts: 199
|
Post by Martina on Nov 3, 2017 3:02:54 GMT
No digo nada y observo con curiosidad como sacaba algo de su bolsillo para depositar dentro la pequeña planta le había entregado. Ella no presto mucha atención a la temperatura de la piel de Abraham ni en los colmillos se asomaban, encontraba divertido que se volvieran a presentar y le volvió a decir lo mismo sobre su nombre.
Ella se levantó y sacudió un poco las manos, debía volver y llevar los materiales de vuelta para trabajar con ellos. Además era una caminata algo larga de regreso a la ciudadela y quería llegar ahí antes de que cayera la noche. – “ Puede tomar algo de tiempo y mucho trabajo pero al final todo saldrá bien “ - lo decía por experiencia propia, ella misma había tardado mucho en abrir su propio comercio y sabia podía llegar a consumir mucho de su tiempo.
Estaba acomodando todo en su mochila alrededor de su cintura cuando escucho su última pregunta, parecía la memoria del muchacho no era una buena, así que repitió el mismo gesto que hace algunas horas. Llevo su dedo índice cerca de sus propios labios y le respondió - “Dije era un secreto ~ te lo diré otro día. “ - sabia era probable se lo topara de nuevo en la ciudadela así que sería un buen tema de conversación.
|
|
Abraham Shelley
Los Invictos
El pasado por más que se deje atrás, te alcanzara.
Posts: 86
|
Post by Abraham Shelley on Nov 13, 2017 5:27:45 GMT
Si pudiera detener el tiempo lo habría hecho para permanecer junto a Martina todo el tiempo que hubiera deseado ¿Hace cuánto tiempo que había olvidado como se sentía mantener una conversación tan grata con otra persona? La sensación del tronco en el que estaban aun cuando era algo húmeda le resultaba quizás por la situación el asiento más cómodo que había tenido en tantas décadas por lo que no pudo ocultar una pequeña mueca de tristeza al notar como su compañera empezaba a disponerse para retirarse, sensación que pronto seria borrada a la par que ella le dedicaba tan alentadoras palabras. Quizás parecerían para otros unas palabras tan comunes como el dulce té por las mañanas, pero para alguien que estaba nuevamente descubriendo la dulce libertad eran las palabras justas para llenar de un enorme goce su corazón.
—No te mentiré— Respondió a Martina a la vez que se sacudía sus pantalones —Que voy a tener la duda del significado de aquel apodo mordisqueando mi mente hasta que me lo digas— Con un suspiro un tanto pesado se puso frente a Martina extendiendo gentilmente su mano.
—Se está haciendo tarde y pareciera que quisieras llegar temprano a otro lugar ¿Una despedida o le acompaño hasta afuera del bosque? Quizás tengamos suerte y podamos encontrar algún girasol en el camino ¿Qué dice?
A decir verdad, quería alargar cuanto pudiera aquel paseo junto a Martina, se hacía tan grato poder nuevamente hablar con otra persona que deseaba aplazar su despedida pues seguramente le extrañaría en lo que la volviera a encontrar en alguna parte de Mirovia aunque al menos podía contar con que en la Ciudadela algún día se podrían topar.
|
|
Martina
Los Invictos
Hilos y Agujas
Posts: 199
|
Post by Martina on Nov 18, 2017 2:07:06 GMT
La elfo observo a su alrededor asegurándose de no olvidar nada, se encontraba en el bosque y no quería dejar ningún artefacto u objeto no perteneciera a él, también todo era importante para su trabajo y no podía darse el lujo de perder nada. Además sus manos aún tenían las puntas de los dedos del color de los pétalos trituro, se puso de pie a un lado de Abraham.
Sonrió entretenida al escuchar aun sentía curiosidad sobre el apodo, la elfo tenía una personalidad alegre y ya que había terminado su labor podría pasar un rato mas solo charlando. Asintió y extendió su mano hacia la de Abraham – “Claro, debo pensar en cómo darte las gracias por tu ayuda. Sobre lo que hiciste.. Son habilidades impresionantes sabes?” -se refiere a la velocidad acompaña a la raza de Abraham - “ Creo ya tenemos suficientes flores por ahora, además a ti te gustan mucho y creo no deberíamos cortar más … al menos por hoy “ - Abraham le daba la impresión de encontrarse bastante solo a pesar de estar en compañía, no estaba del todo segura si el escondía tan bien como se sentía realmente.
|
|
Abraham Shelley
Los Invictos
El pasado por más que se deje atrás, te alcanzara.
Posts: 86
|
Post by Abraham Shelley on Nov 24, 2017 19:37:47 GMT
—No tiene por que agradecerme de nada— Respondió a su vez que tomaba con delicadeza la mano de la elfo y con la otra sostenía su parasol negro —Esta es mi forma de agradecerte por haber salvado mi parasol— Dio unos pocos pasos para dar inicio al ritmo de la caminata hasta que ambos estuvieran a caminando a una velocidad similar —Y tu igualmente tienes habilidades que admiro— Y no se refería precisamente a su agilidad o equilibrio como elfo que ella era, si no por su gran talento como sastre que dejaba en evidencia por las prendas que traía puestas ella misma las cuales por si solas bien se verían sumamente comunes, pero por el conjunto que traía le hacían ver cada una de esas piezas de ropa única y que de alguna forma hablaban sobre ella misma.
Aun así, no pudo evitar esbozar una sonrisa con las ultimas palabras de su acompañante, realmente había sonreído en estas pocas horas más de lo que podía recordar décadas atrás no solo por el pequeño gesto de querer mantener intactas aquellas flores si no por el hecho que parecía que era más fácil de leer de lo que el mismo creía ¿Tan a la vista había dejado el aprecio que tenía hacia aquellas flores? Pareciera que sí.
Paso el tiempo y llego a un punto en que no sabía quién de los dos guiaba al otro por el bosque, si él o Martina, pero entendía que estaban saliendo del bosque, aunque el camino que estaban tomando no fuera el mismo que habían recorrido con anterioridad era claro que no tardarían en llegar a las fueras de los limites de este pues los arboles dejaban entrever mas al cielo y dejaban entrar por sus ramas mas rayos de luz de los cuales el vampiro se sintiera cómodo soportar sobre su piel. Con su mano libre abrió con cuidado su parasol fijándose en que el camino que recorrían era uno marcado por la falta de pasto o plantas sobre su tierra desnuda y los arboles que creaban un arco sobre este haciendo así la caminata relajante como el hecho de que las ramas de los arboles se mantendrían lejos del cuero de su parasol por el temor a que este fuera lastimado o rasgado.
—Y en la ciudadela que me hablas ¿Dónde tienes tu tienda? Por que quizás algún día pueda ir a comprar algo en ella— Martina pudo sentir como la pálida mano de Abraham sujeto por unos segundos de forma más firme la suya como a su vez a lo lejos, pero aun así visible el velo de luz que daba al exterior de aquel bosque, los ojos del vampiro estaban fijos en aquel punto evitando ver los ojos de su acompañante mas que nada por la idea que se había instalado en su cabeza de la facilidad que tendría ella para leerle.
|
|
Martina
Los Invictos
Hilos y Agujas
Posts: 199
|
Post by Martina on Nov 27, 2017 3:03:41 GMT
Martina era una persona naturalmente cortes no veía nada fuera de lo normal en mostrar un poco de amabilidad, ella había tenido la fortuna de toparse con otros que han sido igual o un poco mas generosos que ella asi que no podía imaginarse, por ahora, una situación donde algo malo sucedería. – “ Ha ha, lo dices por ser sastre? En realidad mi nivel es bajo si me comparo con otros artesanos. Aun no domino muchas cosas sobre mi oficio, estoy estudiando y preparándome para trabajar con cosas más complicadas” -le responde mientras caminan.
Al caminar tomo atención a los árboles, siendo un elfo podía notar detalles en ellos que le ayudarían a ubicarse en caso de perderse o querer regresar a esa misma locación. Era un buen campo de flores y podría volver a tomar flores de ahí si era necesario. No debía olvidar tampoco en recordarle a Hem sobre su ropa y aquel parasol, si era tan importante para él debía tener otro extra, tal vez de un material más resistente. Su mano fue soltada, y giro un poco en dirección de su acompañante cuando le pregunta sobre su negocio:
“ Se encuentra en el área comercial, cerca de una fuente pasando el mercado. “ -se llevó la mano al mentón, ya contaba con un letrero bastante llamativo así que Abraham no tendría problemas en dar con el lugar si lograba localizar el mercado. – “ De ahí solo debes buscar un anuncio con el dibujo de una aguja” – algo bastante sencillo de relacionar con un sastre. – “Si no has visitado la ciudadela antes podrías perderte fácilmente, es un lugar bastante grande. Yo tengo meses viviendo ahí y aun no termino de conocerla completamente. Hay muchos comercios ” -se llevo la punta de los dedos a los labios escondiendo una sonrisa juguetona – “ …pero no he visto florerías”
|
|
Abraham Shelley
Los Invictos
El pasado por más que se deje atrás, te alcanzara.
Posts: 86
|
Post by Abraham Shelley on Dec 7, 2017 7:49:23 GMT
Escucho con suma atención las indicaciones para ubicar la tienda de Martina pues aquello era algo que no deseaba en el momento en que llegara a la Ciudadela y se sintiera capaz de darle una visita no solo para tener una charla entre ellos dos si no también como un cliente para no sentir que al visitarle le quitaba parte de su tiempo.
—No te preocupes si me pierdo pues creo que me gustaría conocer cada rincón de aquella ciudadela— Y ante sus ultimas palabras no pudo evitar que se dibujara en sus pálidos labios una leve sonrisa al escuchar la posible ausencia de florerías en la Ciudadela, aunque también aquel gesto era a causa de notar como los labios de la elfo habían quedado teñidos del color de sus dedos que habían sido manchados por los colores de los pétalos que habían recogido.
Levantando su mano hasta la altura del rostro de Martina pareciera que esta iba a dirigirse a sus labios con intención de borrar aquel tinte de forma gentil de sus labios, pero Abraham se los llevo a los propios.
—Te pintaste los labios con un poco del tinte de los pétalos— Y algo que no había pensado el vampiro en aquel momento era que él también había estado recogiendo pétalos junto a su compañera y ayudado a meterlos a los frascos que ahora ella guardaba por lo que sus dedos al igual que los de ellas habían quedado tintados aunque con un color un tanto más tenues.
—Deberías limpiártelo, aunque se te ve bien el color.
Con el ademan que había hecho para que Martina viera que sus labios se encontraban pintados los pálidos labios de Abraham habían quedado igualmente manchados de forma menos uniforme que los de su compañera, pero mucho mas notorio por la palidez de su piel y la de sus labios que por el tono rojo predominante en la pintura les daban un toque más vivo a estos.
—¿Sabes? Realmente he tenido suerte con que tu hayas sido el primer arcano con el que al fin haya logrado hablar— Sus palabras juntas a sus pasos habían retomado el cálido trote del paseo siendo solo unos pocos para al fin junto a Martina encontrarse en el limite del bosque donde los grandes arboles dejan de crecer para dar paso a los verdes y finitos prados verdes donde las flores pintadas de forma accidental en aquel enorme lienzo verde daban vida a la vista de un sol que ya caía en el atardecer. Ni un girasol a la vista.
—Cuando te visite te preguntare sobre mi apodo, no creas que lo olvidare para entonces— Fue lo ultimo que dijo antes de quedarse observando bajo la sombra de su sombrilla el verde paisaje ante ellos dos estando Martina también bajo su sombra. Era un lindo día y Abraham no quería al menos por el decir el adiós, quería mirar junto a Martina al horizonte sin saber el mismo que observaban hacia la dirección en donde se encontraba la Ciudadela.
|
|
Martina
Los Invictos
Hilos y Agujas
Posts: 199
|
Post by Martina on Dec 10, 2017 2:59:44 GMT
Parecía Hem se encontraba de mejor humor y eso la alegro. No sabía aun nada sobre el antes de Mirovia y lo que charlaron hace un momento, pero siempre habría tiempo para verse de nuevo y charlar. Los elfos vivían mucho así que no había nada de prisa, Abraham seguramente pensaría igual. Ambos eran seres cuyo tiempo de vida era bastante extenso, sentía curiosidad sobre qué tipo de cosas el conocía o había visto fuera de la isla.
Miro sus propias manos ante el comentario de Abraham, había olvidado completamente sus manos habían quedado teñidas con el color estaba extrayendo de los pétalos. “ Haha, acaso me he manchado el rostro?” – no contaba con un espejo para poder verlo. Se dio vuelta para ver a su acompañante, la elfo no usaba maquillaje, sabia era costosos y para alguien que pasa la mayor parte del tiempo en un taller parecía ser un desperdicio.
“…………….” -Hizo una pausa un poco larga al ver el chico se había teñido la boca de rojo, apretó los labios pero aun así se pudo escuchar una pequeña risa. (ppffhaha-) El tono serio en la voz de Abraham le daba a entender no era momento para bromear, mejor no le mencionaba nada sobre su boca. – “ D-de verdad? Hay muchos arcanos en la ciudadela, yo apenas conozco a unos pocos. Pero si estas teniendo un día afortunado no tiene que acabar para ti aquí, aun puedes toparte con otros arcanos ~ “ - mejor llegaba a lavarse las manos al llegar al taller, su blusa era blanca y sería una pena si la ensuciara. El parecía estar concentrado y no deseaba interrumpirlo, da unos hacia atrás alejándose de la sombra de aquella sombrilla. “ Entonces estaré esperando! Espero te guste él te ~ “-iba a levantar la mano para despedirse pero ya había pintado bastante cosas el día de hoy, solo sonríe y se despide. – “ No vayas a soltar tu sombrilla si te topas con alguien más!” -le dice recordando, como lo había soltado al verlo la primera vez, mientras camina por el sendero que daba a la ciudadela.
|
|
Abraham Shelley
Los Invictos
El pasado por más que se deje atrás, te alcanzara.
Posts: 86
|
Post by Abraham Shelley on Dec 18, 2017 19:19:09 GMT
—No te preocupes, no lo hare— Fue lo ultimo que pudo escuchar Martina por parte de Abraham el cual le despedía con un movimiento ligero movimiento de mano alzándolo lo mas que podía bajo la sombra de su sombrilla hasta que la figura de la elfo se le torno difusa y borrosa, su mirada ahora se concentraba en su mano con la cual por largos minutos sin darse cuenta había estado despidiéndole notando en su pálida piel los vivos colores de los pétalos de las flores, pequeños matices rojos le daban una tez a mas viva a la punta de sus dedos aunque otra cosa también noto extraña en su mano, tintes en el costado de su palma siendo estos del color con el cual Martina se había teñido sus labios. Eran la marca de sus dedos cuando sujetaba esta su mano.
Una sensación angustia le invadió sorpresivamente al notar que nuevamente se encontraba solo en los limites de aquel bosque, una sensación que había logrado por largo tiempo ignorar, pero que finalmente le había alcanzado en el momento en que recordó que era estar acompañado gracias a la elfo, recordar que era conversar sobre uno mismo y sobre el otro, los pequeños juegos, ayudar, pasear bajo la sombra de los arboles y la calidez de un cuerpo que se encontraba vivo, cada una de esas cosas que consideraba olvidadas se las había logrado recordar y con ello añorar.
Ahora su soledad se le tornaba agria, aun estando libre se sentía aun preso de sus propios temores. Soltó un pesado suspiro dándose cuenta de que la noche ya había posado sus manos sobre aquella tierra y oscurecido todo bajo un manto de luz de dulce plata que nacía de la serena luna, observando el antebrazo de su mano derecha la cual aun permanecía teñida por el tinte de los pétalos, mirando cómo había estado oculta bajo la manga de su camisa.
Otro pesado suspiro resbala de sus labios, tenia que dejar de pensar de aquella forma, el entendía que así debía hacer, ya no poseía una razón para quedarse estancado en el pasado por mas le hubiera llegado a doler. Aquella seria su ultima noche en solitario, mañana antes de que saliera el sol se dirigiría a la Ciudadela a empezar nuevamente. De cero.
|
|