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Post by Deleted on Apr 24, 2017 23:58:09 GMT
Ruido de risas llenaba el ambiente, mesas siendo golpeadas por manotazos, unos con furia, otros con alegría, y un par con unos billetes arrugados y algo aplastados. El tañido del cristal contra la madera era en cierta manera, la cancion de bienvenida del hogar de Garkal, si es que a una taberna se le puede llamar hogar. El sol todavía no terminaba de esconderse, pero ya las torres de la ciudadela cubrían de sombra las calles, por lo que la promesa del calor que se rescataba en la luz roja que salía de la ventana era bienvenida.
Garkal llegó a la entrada de la taberna, y pegó una ojeada adentro. No veía al hada, aunque a decir verdad, bien podría estar adentro y algo invisible, aunque le daba la corazonada que todavía no habia llegado. Por lo que simplemente se acomodó al lado de la entrada, reviso dos veces la hora en su tableta, y se dedico a esperar a Lira, en una de esas podía pegarle un susto al ella entrar.
Apenas viera al hada entrar al hada por la puerta, simplemente se inclinaría, apoyaría el codo en la mesa con un golpe sordo, e inquiriría con una sonrisa - ¿Y bien? toca pagar la deuda, no?
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Lira Oré
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Post by Lira Oré on Apr 25, 2017 0:09:03 GMT
Estaba llegando tarde a nuestra junta con Garkal, le debia unas cervezas y asi podriamos hablar entre amigos y pasar un buen rato en la taberna, aunque aveces era un tanto incomodo ya que o no me veian o me pasaban a llevar pero se que estando con Garkal estaria bien. Llegando a la taberna abri la puerta con las fuerzas que tenia para asi poder entrar, buscaba a Garkal con la mirada pero entre tanta gente me era complicado, vole alto para buscarlo pero no lo encontraba, queria gritar pero me daba algo de verguenza, volvi a bajar y me quede frente la puerta.
-¿Habra llegado ya o llegue muy temprano...? -Me tomaba el brazo con nerviosismo- Espero que nadie me pase a llevar como la ultima vez...
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Post by Deleted on Apr 25, 2017 0:14:42 GMT
Cuando Lira entró, Garkal intentó hacer su pantomimia de la entrada, aunque al parecer ante el bullicio de la gente el hada simplemente paso volando al lado, sin percatarse de el. Si no fuera por la actitud nerviosa de la pobre, casi se hubiera sentido ofendido. No, mentira, era imposible que se ofendiera. La vio revolotear, preocupada, algo asustada, pero era dificil que Garkal llegara hasta ella, ni aun con toda la altura podía llegar hasta donde volaba el hada.
Cuando al fin bajo de las alturas, y se quedaba mirando, preocupada, Garkal carraspeó suavemente, y acercó su mano abajo de ella, formando una especie de plataforma, o protección - -Eh, la mirada periferica, finito no? - Sonrió, colmillos asomandose ligeramente por el labio superior, intentando darle un poco mas de calidez - - Vamos, arriba los ánimos. Me sorprende que no me hayas visto, estuve al lado tuyo todo este tiempo
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Lira Oré
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Post by Lira Oré on Apr 25, 2017 0:34:53 GMT
Siento algo bajo mis pies, es una mano y al darme vuelta veo a Garkal, me alegro y una sonrisa aparece en mi rostro, volando rapidamente hacia su cara para asi abrazarlo fuertemente.
-No te burles... ¡me preocupaba no encontrarte! Y parecer una tonta parada en medio de un Bar... -Lo veo felizmente y me separo volando frente él- Vamos a beber.
Sonrio aun mas y me dirijo a la barra donde sirven las bebidas sentandome sobra la mesa esperando a mi amigo con ansias.
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Post by Deleted on Apr 25, 2017 0:58:46 GMT
Garkal respondío al abrazo de Lira feliz, haciendo como si un dedo fuera un brazo. Fue delicado, se preocupo de no aplastar las finas y suaves alas del hada, recorriendo suavemente la espalda y desordenándole un poco el pelo con la yema de sus dedos.
-Tranquila, estuve al lado tuyo todo el tiempo, ¿Que clase de persona crees que soy, dejando plantado a una damisela en un bar - Se llevó la mano al pecho, intentando imitar un acento de ofendido, aunque la sonrisa casi permanente lo delataba. Divertido por el entusiasmo de la pequeña, la acompañó a la barra. Lira se sentó en un lugar que afortunadamente no tenía una mancha de cerveza, aunque no se podría decir lo mismo del banco que alcanzo a agarrar Garkal. Por mala suerte, no todos los bancos estaban hechos a su medida, y con este quedaba a medio sentar. Pero bueno, toca lo que toca
-Eh, aca!, una cerveza negra como las fauces de una quimera- Pidió, con un potente vozarrón - ¿Y tu Lira, con que comenzarás?
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Post by Lira Oré on Apr 25, 2017 1:23:41 GMT
Le veo divertida y con cara desafiante...
—QUIERO empezar con algo fuerte hoy y luego algo suave... —Mira a Garkal con cierto enojó— Y aprovechando que estas aquí vamos a hablar...
Estaba "enojada" pero por dentro sólo quería abrazarlo todo el día ya queno de aquí a que lo vuelva a ver nunca se sabe, ella es muy apegada a la gente que quiere y aveces es algo ostigante...
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Post by Deleted on Apr 25, 2017 4:34:34 GMT
El Orco arqueó una ceja, entre divertido y pasmado por el enojo de Lira. Repasó mentalmente lo que habia dicho por la tableta arcana, pero la verdad, era un poco nebuloso, ¿había pasado a llevar a su compañera hace poco? quiza era mejor detener los chistes, al menos, los mas cortantes, y descifrar que es lo que ella se traía en mente.
-Hum... ¿un trago fuerte? - Se quedo pensativo, acariciando su barbilla - ¿Licor de fuego quiza? - Se acomodó en la banca, algo confuso, mirando al hada - Vamos, Lira, arriba el animo, ¿Paso algo de lo que quieras hablar? ¿Esta todo bien? - He dicho algo y la he cagado? pregunto mentalmente el orco, preocupado, con cierto nerviosismo saliendo de los ojos de este. ¿Que podría acomplejar a Lira de esta manera?
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Post by Lira Oré on Apr 25, 2017 10:44:57 GMT
Realmente estaba de risas por dentro pero no por mucho, tras recordar el tema se puso muy roja, tanto como la lava. Frunciendo el ceño trataba de mantener la compostura pero no pudo, se rindió y callo tirada de espaldas sobre la mesa, saliendole casi humo de las orejas y las alas le empezaron a temblar.
—Un licor de fuego tamaño pequeño por favor... —Tras hablar vuelve a sentarse rápidamente y ve al orco haciendo un puchero— Lo que hiciste fue traición... ¡¿Como me pudiste dejar así con Aragno?! ¡No viste la vergüenza que me causó!
Tras eso ella no pudo hacer más que hacerce bolita, sonaba ridículo pero era verdad lo que decía, además, dijo que los mataría a cada uno... bueno no tan así pero si recibirían un castigo
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Post by Deleted on Apr 25, 2017 16:48:16 GMT
El alma se le fue en un instante a los pies al ver las reacciones del hada. El tono rojo iracundo de sus mejillas se extendió, y la media sonrisa de Garkal murio rápidamente en sus labios, mientras su cerebro corria a toda carrera intentando recordar las palabras exactas que habia ocupado.¿Que habia dicho de Lira y Argano? probablemente un comentario soez que se habia excedido, tal era su preocupacion que ni se percato que los tragos estaban llegando.
Con suavidad, acomodó la guitarra, y se sacó el sombrero, dejandolo al lado del hada. Sus dedos tamborilearon, nerviosos sobre la mesa, mientras intentaba encontrar las palabras correctas. Pero al final, sentía que no había miel que sirivera para esto, y que simplemente la sinceridad ganaría.
-Perdón, Lira, perdóname. Yo... yo a veces soy un bruto gigante, no mido mis palabras, y por intentar sacar unas risas, termino hiriendo a personas - su rostro era la culpa personificada, sus ojos seguían preocupados el movimiento del hada, y cuando esta se hizo bolita, Garkal acercó suavemente un dedo para acariciar su espalda unos segundos, intentando reconfortarla - No me di cuenta en ese momento... y no me habia dado cuenta hasta ahora de lo incomodo que fue para ti. ¿Que puedo hacer para mejorar las cosas?
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Post by Lira Oré on Apr 25, 2017 22:17:20 GMT
No pudo por mucho tiempo mas con su enojo, la sinceridad de aquel orco le inundaba el corazon de ternura y era imposible para ella seguir asi con su amigo, el mas grande hasta el momento, realmente le habia molestado lo ocurrido con Aragno pero al ver a Garkal arrepentido con toda sinceridad, la hizo sentirse mejor... <<Su castigo esta listo...>> Penso la pequeña Hada, formandoce una gran sonrisa en esa diminuta y tierna cara y sentir aquel cariño por la espalda de ella la hizo sentir aun mejor, ella queria mucho a aquel orco, era una de las mejores cosas que le habian pasado. Conocer a aquel orco.
Lira de un momento a otro salto volando al rostro de su amigo solo a abrazarlo y con todas sus fuerzas, con ganas de querer apretarlo mucho pero su tamaño no se lo permitia de la manera que en verdad queria, sonrojada por su accion pero no le importo, giraba su cara contra su mejilla con la mejor de las risas feliz por el perdon de su amigo.
-No puedo enojar contigo mucho tiempo, tu perdon es tan sincero que me llena el corazon de amor y solo quiero abrazarte hasta no mas poder- Comentaba ella de lo mas contenta- Eres unos de mis grandes amigos y no me enojaria contigo de tal manera... -Ella antes de separarce le da un pequeño beso en uno de sus colmillos sobresalientes- Te quiero demaciado como para odiarte... -Volvio a su asiento y se sento sobre sus piernas- A no ser que hagas algo muy malo... eso no te lo perdono ni muerta... -Hace un puchero que se le veia realmente tierna-
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Post by Deleted on Apr 26, 2017 0:03:00 GMT
Como si fuera una marea cambiante, o mas bien, una flor que de la nada sale del capullo, la alegría de Lira sobresaltó a Garkal, que casi se cae hacia atrás en un acto reflejo ante el impulso del hada. Pero ni el sobresalto ni el vértigo podían contra la alegría que brindaba ese momento. Pura, simple, radiante, ¿Había algo mejor en la vida que esto? La risa del orco inundo el local, sintiendo la cabezita de su amiga restregándose contra sus mejillas. Deseó poder ser mas pequeño, y poder darle un fuerte abrazo, de esos que hacían tronar la espalda y llenaban el alma, pero igual el orco podía dar abrazos con los dedos, en cierta manera, un abrazo especial, mas cómplice, como un código secreto entre los dos.
-Aah, pequeña - El comentario no tenía pizca de burla, el apodo parecía surgir del cariño profundo que sentía por su amiga - ¿Te he mencionado que eres como una luz de alegría en el mundo? - Le revolvió el pelo con la punta de su meñique, jugetonamente. La risa del hada era como un agua cristalina en sus oídos, y cuando el momento de magia se iba acabando, pues si durara para siempre, no sería magico, el hada le dio un suave beso en el colmillo izquierdo, para luego volar hacia su puesto. Una sensación bastante cómoda y conocida se empezó a formar en estómago de Garkal, y este deseó con todas sus fuerzas que con la piel verde no se notara la sangre que iba subiendo a su rostro. Miró hacia los lados, buscando una excusa para cubrir su rostro unos segundos, y se topó con los tragos
-Eh! en que momento llegaron? Bueno...-Tomo su jarra, y choco suavemente el vaso pequeño del hada -¡Salud! ¡Por la amistad imperecedera, y por las aventuras inimaginables! - Alzo su jarra, aunque a decir verdad, mas que tomar, estaba inspirando hondo, intentando calmarse. Unos segundos después, creyendo tenerlo bajo control, depositó la jarra en la mesa, todavía mas de la mitad llena, y luego, le dedico una sonrisa al hada, para alegrarla -¿Algo malo? ¿Yo? Pero si soy la bondad hecha orco... aunque bueno, algo estúpido, de seguro haré, de eso no puedo prometer nada.
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Post by Lira Oré on Apr 26, 2017 2:04:20 GMT
Al ver el nerviosismo muy evidente del gran orco, la Hada no pudo evitar reir un poco mientras se ordenaba su cabello algo alborotado gracias a su amigo, toma su vaso tamaño Hada de licor de fuego y se apoya en el brazo del orco, con una mirada a la nada con cierta ternura, escuchando la musica, los gritos y risas, los vasos chocando, para ella aunque no fuera el mejor lugar del mundo estaba con buena compañia, se sentia comoda y con un calor muy agradable, que queria seguir sintiendolo... empieza tomando un sorbo lo cual de lo fuerte que era hace una cara extraña y arrugada.
-¡Ahhh! Esto esta fuerte... -mueve rapidamente la cabeza- ¿Y que tal esta el tuyo?
Hablo muy feliz, simplemente no podia evitarlo, disfrutaba infinitamente estar con él
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Post by Deleted on Apr 26, 2017 3:05:58 GMT
Parece que se habia puesto un poco en evidencia, pues la risa de Lira no parecía ser precisamente por los chistes del orco. Garkal intento mantener en calma sus emociones, aunque no pudo del todo eliminar el rubor de sus mejillas. Pero aún con verguenza y todo, la noche era definitivamente una de sus mejores noches en la ciudad: No tenía que esforzarse inventando historias, tocando hasta reventarse, o intentar calmar a la taberna, era simplemente relajarse, disfrutar de la compañía, y dejar simplemente los minutos volar. Acomodó su mano, para que no se le quedara dormida mientras el hada la ocupaba de apoyo, y se dedicó a escuchar la musica, dejando que los rasguidos de guitarra lo transportaran a una realidad aparte, donde nada existia realmente fuera de esta taberna, y de este momento. Entre trago y trago, sus dedos tamborileaban la jarra, acompañando el ritmo de la música.
Si existía el paraiso, debía parecerse a esto
-Epa! - Rió Garkal al ver al hada combatir con el licor -¿Ves? por eso siempre parto de abajo a arriba, asi se acostumbra la garganta -Agitó el jarro, que ya iba medio vacío. Los musicos ya estaban dejando de tocar, y habían hecho un interludio, mientras los camareros se dedicaban a repartir otras rondas. Garkal los señaló mientras se bajaban del escenario -¿Que te parecieron?
____________ Canción de fondo de los musicos (Me tome el derecho de ponerla, para ambientar)
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Post by Lira Oré on Apr 26, 2017 4:33:20 GMT
Empezaba a marcar el paso al ritmo de la musica, que nunca habia escuchado pero se le hacia un tanto interesante, pero mas atencion le prestaba al orco, aunque no lo estuviera viendo solo queria seguir abrazandolo mientras tomaba su vaso de licor.
-¿Como desde abajo? -Le pregunta curiosa pero sin quitarse de su lugar y ni siquiera abrir los ojos-
Estaba tan placida y tranquila ahi que parecia como si los sonidos de un momento a otro se fueran y los dejaran en un silencio, no incomodo si no mas como uno tan profundo y tranquilo, sinceramente le encantaba ese momento...
-Garkal... te parece ir a dar una vuelta por la ciudad mas tarde... para seguir pasando un rato juntos -Estaba realmente apenada nuestra pequeña Hada, roja como tomate pero la penosa chica no se atrevia a abrir sus ojos por miedo a que la su apacible estado sea destrosado-
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Post by Deleted on Apr 26, 2017 13:20:21 GMT
El suave calorcillo del cuerpo de Lira era un contrapunto en su brazo, recordandole la agradable presencia a su lado, ya el orco se habia acostumbrado a tener las mejilas un tanto sonrosadas, y casi con un gesto inconciente acariaba la larga trenza, o las finas alas del hada con su mano libre. Los minutos iban pasando como un hechizo, como si el pasado y el futuro fueran solamente un borrón, y solo quedara el presente, el ahora, el abrazo, y la musica muriendo en la distancia. Cuando el hada habló, Garkal giro la cabeza suavemente, aunque tuvo que tomarse unos segundos para contestarle ¿Era ese un tambor de la musica, o su corazón al verla tan relajada, tan calmada, y a gusto?
- ¿Desde abajo? bueno, con tragos no tan fuertes primeros, cervezas, tragos simples, y luego cerrar con algo mas fuertes, asi la cabeza no queda tan dolida - le rascó la base del cabello con su meñique, revolviendo un poco su cabello. Había olvidado ya hace un tiempo su propio trago, su mente divagando en otras cosas, un poco mas importantes, como por ejemplo, este momento. Y mientras las conversaciones alrededor se iban acallando, y el bar se volvia un poco mas lento y vació, un hada hacía enrojecer a un orco, como si su rostro se convirtiera en un fósforo encendido. El corazón de Garkal se lleno con un calorcillo agradable al ver al hada tan avergonzada, aunque sabía que el debía tener el mismo aspecto. Puso su palma abierta encima de la mesa, para que el hada saltara encima -¿Un paso debajo de las estrellas? me encantaría, aunque espero que no te pases de frío alla afuera-
Mientras esperaba que el hada se subiera, Garkal deposito cinco monedas de plata en el mostrador, para pagar las deudas, y revisó que no se le vaya a quedar nada. Una vez que el hada subiera a su hombro, se dirrigiría lentamente a la puerta, aprovechando los ultimos momentos del bar. Dentro suyo, la sangre latía al ritmo de una canción, una cancion que había ya sonado incontables veces en el mundo, y sin embargo, cada vez que nacía, se escuchaba como si fuera la primera vez. Una cancion que hablaba de dos personas, y de una danza sutil, mientras ambos intentaban averiguar si el otro estaba danzando al mismo són, y cuidando ellos mismos de no revelarse por error. Una dulce canción que nace entre paseos en las estrellas, fogatas en el camino, y , aparentemente, noches de calma en un bar. Y como un paso de baile, acudió la pregunta a los labios de Garkal, mirando con una media sonrisa a la sonrosada hada.
-Dime Lira, ¿Que piensas?
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